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¿Existe el amor a primera vista? Mejor el 'amor a segunda cita'
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el romanticismo de nuestra era

¿Existe el amor a primera vista? Mejor el 'amor a segunda cita'

Las aplicaciones nos obligan a convertir a personas desconocidas en potenciales parejas, pero ¿en qué nos basamos realmente para elegir a unos individuos y no a otros?

Foto: Fotograma de 'Romeo + Julieta'.
Fotograma de 'Romeo + Julieta'.

El amor a primera vista suena a novela digna de Petrarca o de algún poeta maldito del romanticismo. Lo cierto es que, a día de hoy, no es muy habitual. Los príncipes y las princesas de los cuentos de hadas solían hacerlo, eran felices para siempre y comían perdices. Se supone. O quizá comenzaban a darse cuenta al día siguiente de que se habían casado con un completo desconocido, una irresponsabilidad enorme de la que se arrepentirían el resto de sus días.

Pero ¿se basa en algo real esa vieja creencia de encontrar a tu alma gemela mirándola entre la multitud, mientras el mundo se detiene por unos instantes? No parece tan diferente al uso que se da a las aplicaciones de citas: miramos durante unos instantes una fotografía de un completo desconocido y decidimos si queremos entrar en su vida deslizando el dedo por la pantalla. El romanticismo de nuestra era. Lo cierto es que se necesitan menos de diez segundos para hacer la evaluación de la cara de una persona según informa 'BBC'.

Las primeras impresiones no predicen solo el atractivo físico. Por eso hacemos juicios de valor, por ejemplo, de los políticos cuando los vemos en la televisión. No se trata de pensamientos aleatorios sino de creencias compartidas por la mayoría de las personas, lo que no significa que sean reales o correctos. "Se trata, obviamente, de algo superficial" explica el profesor Alexander Todorov de la Universidad de Princeton. "Es una irresponsabilidad hacer una suposición de alguien sin conocerle".

La belleza no es la único que buscamos en una foto de perfil, también la aventura y la bondad, por eso muchos salen haciendo voluntariados

Hay tres cualidades universales que las personas deducen de un rostro: atractivo, fiabilidad y dominio. Evolutivamente, tiene sentido. El atractivo es una señal de apareamiento, la fiabilidad implica características sociales útiles (como poder cuidar a los niños), y evaluar la dominación es útil para evitar conflictos. El dominio, por ejemplo, según Todorov, está intensamente relacionado con la masculinidad. "Las mujeres que tienen rasgos masculinos son evaluadas negativamente por los dos sexos".

placeholder Ewan McGregor haciendo un 'match' en 'Big Fish'.
Ewan McGregor haciendo un 'match' en 'Big Fish'.

Esto sirve, por supuesto, para el mundo de las aplicaciones de citas. Asegura el académico que los retratos tomados desde abajo se juzgan como dominantes (positivo para ellos y negativo para ellas). "Además, no solo elegimos fotografías en las que se nos pueda ver atractivos, también queremos que estas reflejen otros rasgos de la personalidad como la generosidad o la aventura, por eso verás a muchas personas que tienen en su perfil una imagen en la que salen haciendo trabajos de caridad en otros países, por ejemplo".

Sin embargo, todo este esfuerzo en mostrar la mejor versión de nosotros mismos puede ser en balde si la persona que nos precedía en la aplicación (sí, la foto que salió antes que tú y que tu potencial pareja se encargó de rechazar o aceptar) es atractiva o no. Esto se conoce como "caso de amor a segunda cita", y es que si la cara anterior es atractiva, es mucho más probable que a nosotros nos califiquen de guapos también, y viceversa. Es el problema de que las primeras impresiones sean poco profundas y se maneje tan poca información. La única manera de saber si dos personas se agradan de verdad es cuando pasan a hablar.

Las culturas occidentales se sienten más atraídas hacia los individuos narcisistas, extrovertidos y seguros de sí mismos

En un estudio reciente llevado a cabo en la Universidad de Virginia con conversaciones en línea, se concluyó que las conversaciones entre hombres y mujeres en persona y mediante aplicación en línea no difieren mucho. Los patrones de comportamiento eran similares, los hombres solían "acercarse" a las mujeres más que al revés y el tema de conversación que casi siempre se establecía al comenzar a hablar era sobre las preferencias y los gustos. Algo que es único acerca de las citas en línea es que tienes más tiempo para averiguar si tu cita cumplirá tus expectativas, las aplicaciones pueden llevarte a idealizar a las personas y a las decepciones posteriores, dado que no tenemos mucha información.

Foto: Foto: iStock.

Una vez hemos evaluado el atractivo y hemos mantenido una conversación sencilla, ¿qué viene después? El estudio asegura que hacemos 'match' con aquellas personas a las que consideramos iguales en autoestima, atractivo físico y popularidad. Las personas con seguridad son más propensas a elegir otras con alta autoestima también porque son optimistas sobre el resultado. El problema es que hay una cierta ambigüedad en lo que realmente queremos. Muchos hombres, por ejemplo, aseguran querer una compañía femenina inteligente, pero luego en un escenario real, según indica el estudio, se sienten menos atraídos, quizá por inseguridad. Nuestro estado de ánimo el día de la hipotética y futura cita, por supuesto, también inclinará la balanza.

El estudio también llegó a la conclusión de que en Occidente la gente se siente "más atraída por los narcisistas, puesto que buscan en las personas extroversión y gran confianza en sí mismos. Las culturas occidentales valoran los objetivos individuales más que los objetivos grupales. Las culturas colectivistas pueden valorar más la amabilidad porque le interesan los beneficios grupales en lugar de los individuales".

En resumen, parece que encontrar el amor como en los tiempos de Petrarca, echando un simple vistazo a nuestra potencial pareja, es muy complicado. Es un verdadero milagro que encontremos a alguien que se sienta atraido de la misma forma que nosotros. La conversación, su estado de ánimo general, su origen cultural, su autoestima, el ángulo desde el que se hizo la fotografía... todo afecta. La próxima vez que hagas 'match' en Tinder acuerdate de esta interminable lista, será algo así como si se hubieran alineado los planetas.

El amor a primera vista suena a novela digna de Petrarca o de algún poeta maldito del romanticismo. Lo cierto es que, a día de hoy, no es muy habitual. Los príncipes y las princesas de los cuentos de hadas solían hacerlo, eran felices para siempre y comían perdices. Se supone. O quizá comenzaban a darse cuenta al día siguiente de que se habían casado con un completo desconocido, una irresponsabilidad enorme de la que se arrepentirían el resto de sus días.

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