Polémica en la lotería: ganaron 4 millones pero la administración no se los quiere pagar

Por todo lo alto. Mark Goodram y Jon-Ross Watson no ocultaron su felicidad cuando se enteraron que habían ganado 4 millones de libras (4,635 millones de euros aproximadamente) en el sorteo rasca y gana. Una botella de champán de casi un metro y y publicaciones en las redes sociales para que todo el mundo se enterase de lo afortunados que eran.

Sin embargo, la administración se niega a pagarles el premio, ya que poseen antecedentes por robos, según informa 'The Daily Mail'. Las alarmas saltaron cuando se pusieron en contacto con los funcionarios de la agencia de loterías británica con la esperanza de cobrar el dinero ganado y les dijeron que ninguno de ellos poseía una cuenta bancaria en activo.

Me voy a ver a la Reina. Esto es maravilloso. Me merecía un poco de descanso

Lo más llamativo es que adquirieron el boleto ganador con una tarjeta de débito, expedida solo a través de de una cuenta bancaria. Al preguntarles de qué tarjeta se trataba, Goodram y Watson se refirieron a un misterioso amigo llamado "John", pero no comunicaron su apellido, dirección o número de teléfono. Ahora, la operadora de loterías británica ha abierto una investigación para descubrir toda la verdad.

Pero a ellos no les importa, ya que no tuvieron tapujos en celebrar públicamente su sospechosa victoria. "Me voy a ver a la Reina. Esto es maravilloso. Me merecía un poco de descanso", aseguró Goodram en declaraciones exclusivas a 'The Sun'. Con antecedentes de 22 condenas por 45 delitos cometidos, el británico no puede dejar de pensar en qué hará con el premio: "Me muero de ganas de gastar el dinero del bote. Voy a comprar propiedades de lujo y a cuidarme".

Esta victoria es increíble, nos merecemos el dinero. Nuestros amigos y familiares no nos creen todavía

La otra parte en discordia, Jon-Ross Watson, quien se define como hincha del Manchester United y que también tiene un par de condenas por robo, aseguró que se lo gastaría en viajar por el mundo. "Me voy a hacer un crucero por el Caribe y luego a Las Vegas", anunció. "Pero primero necesito un pasaporte".

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Ambos mostraron su camaradería delante de los periodistas. "Mark y yo hemos sido colegas desde que éramos pequeños", explicó Watson. "Esta victoria es increíble, pero nos merecemos el dinero. Estábamos gritando en la calle. Se lo hemos contado a amigos y familiares, pero todavía no nos creen". La pareja, que actualmente encuentra desempleada, declaró haber sentido un pálpito a la hora de pasar por la administración de loterías.

En lo relativo al misterioso "John", ambos alegaron que ya no se encontraba en el país y que había partido "hacia el norte". Actualmente, los funcionarios se encuentran investigando el origen de la tarjeta de crédito de su amigo fantasma. No dudan de que el boleto sea el oficial, pero todavía tienen que hallar la identidad del dueño de la tarjeta. Ellos alegan que no tenían constancia de que se podía tratar de que fuera robada.