Un paciente con cáncer gana la lotería y podrá llevar a su mujer a su viaje soñado
Ambos viajarán a Italia, el país de donde procede la familia de su esposa, en un viaje que debe darle fuerzas para superar el cáncer de hígado que sufre
Richard Beare es un mecánico jubilado desde hace años que vive en el estado de Carolina del Norte, en el este de Estados Unidos. Richard y su mujer iban en su viejo coche la pasada semana cuando vieron un gran letrero que anunciaba el bote de 750 millones de dólares que había en la lotería Powerball, parecida a la lotería primitiva que se juega en España.
Fue la mujer la que animó a su marido a detenerse en una gasolinera de Charlotte QuikTrip y comprar un boleto, por si la suerte les sonreía. Pero Richard, además de comprar el boleto para el sorteo en el que se ponía en juego el descomunal bote, compró otros cuatro boletos del sistema rasca y gana. Ahí es donde le estaba esperando la suerte.
Richard volvió al coche, dio los boletos a su mujer y ambos comenzaron a rascar. El primero no tuvo premio; el segundo, tampoco; el tercero siguió el mismo camino; y cuando ya habían perdido casi toda la esperanza, apareció la diosa fortuna: en el último rasca y gana había escondido un premio de 250.000 dólares, unos 220.000 euros al cambio.
Suerte máxima
Richard explica lo sucedido a la WSB de Atlanta: “Sólo paramos porque mi mujer me pidió comprar un boleto para el bote porque yo casi nunca juego a la lotería”. Y si ya había tenido suerte parándose en el lugar indicado, la misma fortuna se amplió decidiendo en el último momento comprar los cuatro rasca y gana, además del boleto para la lotería Powerball.
El hombre no sabía siquiera qué tenía que hacer con los boletos: “Cuando vi que tenía números que coincidían pregunté a mi mujer: '¿Qué significa si los números coinciden?’ Y ella fue la que me dijo que significaba que habíamos ganado un premio. Le dije: 'Bueno, entonces supongo que acabamos de ganar 250.000 dólares'”.
"Mi mujer se quedó en ‘shock’ y sólo me miraba a mí y al boleto una y otra vez”, recuerda Richard Beare. El premio para la pareja de 250.000 dólares se reducirá casi un treinta por ciento por los impuestos, pero pese a ello se embolsará la nada despreciable cantidad de 176.876 dólares, unos 155.000 euros, que le permitirán cumplir el sueño de su vida.
Cumplirá el sueño de su mujer
El afortunado ganador señala que su mujer "siempre ha querido ir a Italia ya que de ahí es de donde proceden sus antepasados. Ahora puedo llevarla". Richard y su mujer llevarán a cabo, de esta manera, el viaje de sus sueños y podrán visitar Europa, algo con lo que nunca habían contado dado que sus ingresos no habían dado para muchos lujos.
Su mujer "siempre ha querido ir a Italia ya que de ahí es de donde proceden sus antepasados. Ahora puedo llevarla"
Y, lo que es más importante, ambos disfrutarán de un viaje romántico que servirá para alejarles por unos días de la penuria que supone la enfermedad de Richard. Tiene cáncer de hígado y lleva meses tratándose en un hospital de Carolina del Norte intentando superar este problema de salud. Seguro que el viaje le dota de fuerzas renovadas para conseguirlo.
Richard Beare es un mecánico jubilado desde hace años que vive en el estado de Carolina del Norte, en el este de Estados Unidos. Richard y su mujer iban en su viejo coche la pasada semana cuando vieron un gran letrero que anunciaba el bote de 750 millones de dólares que había en la lotería Powerball, parecida a la lotería primitiva que se juega en España.