Ikea, el refugio para elegir nombre para tu bebé y que sea diferente a todos
Las Marías, Anas y Nurias y los Pepes, Antonios y Pacos están dando paso a los Sommar, Karlsnas o Krydda en los bebés del siglo XXI
Ikea es muchas cosas, sobre todo una enorme tienda que, cada día, usan miles de personas para decorar su casa, ya sea comprando muebles, cambiando despachos, incorporando cortinas o poniendo nueva toda la vajilla. Pero, de la misma manera, Ikea es una fuente inagotable de ideas para mentes inquietas.
Aunque la mayoría de las veces esas ideas se utilizan para hacer que nuestro hogar sea lo más acogedor posible y encaje a la perfección en nuestros gustos, no siempre tienen que ver con ese fin. Y el ejemplo más claro lo tenemos en los millenials, el grupo de jóvenes que nació con el cambio de milenio y está ahora comenzando a tener sus primeros hijos.
Este sector de la población ha nacido entre estanterías Kalax, muebles Hemmes, camas Brimnes o armarios Dombas. Son términos que, incluso en ocasiones, nos cuestan pronunciar, pero para los millenials son casi como su día a día: por eso están empezando a poner esos extraños nombres a sus hijos, una moda que comenzó como un goteo hace unos meses y que no para de crecer.
Una moda al alza
Algunos blogueros ya avisaban hace algunos meses de un fenómeno que estaba dando sus primeros pasos. Ikea es muy conocida por los nombres escandinavos que da a sus productos, pero la idea de que se conviertan ahora en nombres de bebés parece, cuando menos, curiosa. Aunque para los jóvenes parece muy atractiva.
En España aún no está proliferando esa costumbre, pero en Europa y Estados Unidos ya se han encontrado padres en el registro civil que llaman a sus hijos Plumsa, Jansjo, Barvalla o Knipsa. De hecho, hasta se están confeccionando listas con los nombres de los productos de Ikea que mejor podrían sentar a los bebés y lo cierto es que los hay muy interesantes.
Entre los nombres que parecen más indicados para niña podemos encontrar Aina, Allehanda, Fejka, Knarra, Lalle, Plumsa o Sanela. Sí, estamos de acuerdo en que no son habituales y que nos costará hacernos a llamar a nuestra hija Knarra González o Plumsa Martín, pero, a fuerza de repetirlo, la idea no parece tan mala.
Ya se han encontrado padres en el registro civil que llaman a sus hijos Plumsa, Jansjo, Barvalla o Knipsa
También hemos hecho una lista de aquellos nombres que parecen más indicados para niños: Vasnas, Drommar, Finnvard, Hilvar, Krispig, Lymmel, Pahl o Sjuda no encajarían mal, acompañados de un Rodríguez o de un Nadal, por poner algunos ejemplos. Y seguro que no se encontrará con nadie en el colegio que se llame igual.
Nombres escandinavos
Aunque si se trata de utilizar Ikea como fuente de inspiración, también podemos hacer un listado de nombres para bebés originarios de los países nórdicos. Así encontraríamos Tarva, Mydal o Fredde, nombres que pueden acompañar perfectamente a los niños españoles de los próximos años al colegio.
Eso sí, hay algunos productos cuyo nombre, por complicado que sigue siendo de pronunciar, no podemos recomendar para poner a un bebé: Godmorgon parece más para un personaje de El Señor de los Anillos que para un niño pequeño; Direckt podría ir dirigido a una campaña de seguros, pero no a un menor; y los abuelos de cualquier infante estarán de acuerdo en que Gnarp no es el nombre más adecuado para él.
Sea como fuere, lo cierto es que los nombres de bebés están cambiando al mismo ritmo frenético que lo hace el resto del mundo. ¿Llegará algún momento en el que no habrá Anas, Lucías, Jorges o Fernandos en el mundo?
Ikea es muchas cosas, sobre todo una enorme tienda que, cada día, usan miles de personas para decorar su casa, ya sea comprando muebles, cambiando despachos, incorporando cortinas o poniendo nueva toda la vajilla. Pero, de la misma manera, Ikea es una fuente inagotable de ideas para mentes inquietas.