Cómo limpiar las manchas de tu ropa

¿Recuerdas al entrenador de fútbol José Antonio Camacho? ¿Sí? Entonces también tendrás en mente el problema corporal que padecía: hiperhidrosis. El sudor es un mecanismo del que se sirve el cuerpo para regular la temperatura corporal. No solo sudamos cuando hace mucho calor, también en situaciones de estrés o nerviosismo.

No es necesario padecer esta enfermedad (es crónica y se caracteriza por una excesiva producción de esta secreción) que solo sufre el 3% de la población. Aun así seguramente tengas alguna prenda manchada que no logras limpiar a pesar de haberla metido en la lavadora una y otra vez. ¿Estás cansado de que tus camisas tengan una aureola en las axilas? Te contamos algunos trucos que puedes utilizar para quitarlas de una vez por todas.

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A. López

La transpiración es como tinta invisible. Sale de nuestras glándulas sudoríparas clara e inodora, pero al mezclarse con otras sustancias se vuelve visible y maloliente. "El aluminio usado en la mayoría de los antitranspirantes y desodorantes es lo que reacciona con el sudor y causa la decoloración", afirma Gwen Whiting y Lindsey Boyd, creadoras de una marca de productos de limpieza, en 'Prevention'. Además, puede volverse amarillento cuando se mezcla con los aceites naturales de nuestro cuerpo.

A veces son tan difíciles de quitar porque se acumulan siempre en la misma zona. No es como una mancha de café o vino que raramente caerá exactamente en el mismo lugar. No necesitas salir a comprar jabones especiales o quitamanchas. Todas las herramientas que precisas se encuentran en tu despensa o cocina. Para evitar el problema estético y la incomodidad de las prendas manchadas, te contamos algunas formas de prevenirlos.

Sé precavido

Lo primero que debes saber es que antes de ponerte una camiseta tienes que dejar que se seque el desodorante. Si tienes prisa, hazo con el secador. Si sufres este problema a menudo quizá debas ir haciéndote a la idea de llevar una camiseta interior para evitar que la otra se manche.

El 3% de la población sufre una enfermedad crónica llamada hiperhidrosis que se caracteriza por una excesiva producción de sudor

Cuando vayas al supermercado, compra productos que no tengan aluminio. Fíjate bien en su composición y no te lleves los que tengan metales en su composición. Si cuando vayas a lavas la prenda te da cuenta de que la mancha está ahí, olvídate luego de ponerla en la secadora porque las temperaturas altas hacen que se fijen más y después sea más complicado eliminarlas.

Amoníaco

Se utiliza para manchas de mucha resistencia como por ejemplo quitar la grasa del horno que se queda pegada. Por lo general, las de sudor en las axilas no deberían ser un problema. Empieza mezclando a partes iguales agua y amoníaco, además de unas cucharadas de jabón en el fregadero o donde vayas a limpiar la ropa. Pon la prenda manchada en la solución y déjala en remojo durante la noche. Al día siguiente, mételo en la lavadora como de costumbre. (Para tu información, no intentes mezclarlo con cloro porque el combo puede crear gases peligrosos).

Bicarbonato y sal

Este producto es otro fantástico remedio casero. Los usos del bicarbonato de sodio en el hogar son múltiples, y uno de ellos eliminar las manchas de sudor en las prendas. Para utilizarlo, solo debes mezclar una cucharada con agua, de forma que te quede una pasta que aplicarás en la zona afectada. Deja pasar 20 minutos y vuelve a limpiar como lo harías normalmente.

Vinagre de manzana

Es un limpiador natural con muchos usos diferentes, incluida la capacidad de quitar las manchas de las axilas. "El ácido en el vinagre degrada la suciedad acumulada", asegura Alberto Navarete, gerente general de una empresa de lavandería.

El aluminio usado en la mayoría de los antitranspirantes y desodorantes es lo que reacciona con el sudor y causa la decoloración

Para comenzar, vierte en una olla o en cualquier recipiente dos vasos de agua tibia y cuatro cucharadas de vinagre blanco. Remuévelo hasta que esté todo diluido. Sumerge la prenda en la solución y déjala en remojo durante una hora, después enjuágala y escúrrela. Restriega la mancha con un cepillo y un poquito de detergente y lava la prenda con normalidad, pero con agua fría.