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Los sueños sexuales de los hombres, contados por ellos mismos
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Los sueños sexuales de los hombres, contados por ellos mismos

Dicen que el más popular es el trío. Pero, más allá de mitos falsos, ¿qué es lo más estimulante con lo que se puede soñar sexualmente? Las respuestas son muy variadas

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Impredecibles e indescifrables. ¿Tienen algún significado muchos de los bizarros sueños que tenemos? Esta sin duda es una de las preocupaciones más antiguas que existen en el ser humano. Un interés que tuvo su máximo apogeo con Sigmund Freud y la publicación de su libro 'La interpretación de los sueños'. Las imágenes que nuestro cerebro proyecta cuando dormimos siguen sorprendiendo a psiquiatras y expertos, y en especial, a cualquier persona cercana a la que le queramos contar eso que nuestros ojos ven cuando están cerrados y permanecemos recostados sobre la almohada.

Pero si hay un tipo de sueños que seguramente no queramos relatar ni a nuestros más allegados, esos son los de contenido sexual o erótico. Depende de cada persona, pero es seguro que resulta mil veces mejor tener este tipo de ensoñaciones que otras desagradables. Si tienes la suerte de ver a alguien de la vida real a quien deseas mucho en sus momentos más íntimos, estás de enhorabuena. Puede que los más comunes de este tipo sean aquellos que muestran imágenes de un exnovio o exnovia. También presenciar a dos o varias personas mientras están haciéndolo. O, incluso, siendo heterosexual, acostarte con alguien de tu mismo sexo.

Estábamos trabajando hasta tarde en la oficina. Me puso contra el escritorio y comenzó a dominar la situación

Sea como sea, los significados atribuidos a muchos de estos sueños son bastante desilusionantes. No es que en lo más profundo de tu corazón seas homosexual (en relación al sueño anteriormente mencionado); muchas de las páginas consultadas coinciden en que más bien se trata de dos dualidades del yo que se muestran y su relación entre ambas. Soñar con sexo, en todo caso, no viene a decir que eres un salido y que lo que más quieres en el mundo es hacer el amor, sino que, como en el resto, su interpretación va más allá de lo superficial, adentrándose en el interior de la psique y del momento físico, anímico o mental que estás atravesando.

Pero tampoco nos vengamos arriba; muchos de ellos no son nada placenteros. ¿Cómo despertarías si has visto, por ejemplo, mantener relaciones sexuales a algún familiar, o bien a tu jefe? No, definitivamente no todos son placenteros, también los hay aterradores. Esta es la prueba de que, aunque sueñes con imágenes de alto contenido erótico, no es precisamente por el gusto o deseo sexual que sientes hacia la persona con la que has soñado. Artistas, filósofos y psiquiatras han visto en los sueños una forma de desencorsetar la mente, conocerse más a uno mismo a partir de los símbolos que aparecen o aprender de ellos, como mensajes inextricables sobre ti y tu vida, lo que verdaderamente esperas y deseas, o bien lo que te aterra y conmociona, y por ende, te frena en tu evolución personal.

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La revista masculina 'Men's Heatlh' ha recopilado algunos de los sueños más sorprendentes y curiosos que han tenido algunos hombres a lo largo de su vida. ¿Te sentirás identificado?

Un trío con tu amigo

"Tuve un sueño", comenta Phil. "Estaba en un trío con una chica muy potente y desconocida... Y también con mi mejor amigo. No me lo podía creer. Soy heterosexual, si quisiera un trío jamás aparecería otro hombre. Incluso aunque lo hiciera, por nada del mundo quisiera que mi amigo estuviera allí para verlo. En el sueño terminamos besándonos, y me desperté un poco sobresaltado. Fue un poco caliente, hasta ese momento, pero muy extraño". ¿Finalmente le acabó gustando y se replanteó su sexualidad? ¿Se lo contó a la persona en cuestión?

Con tu jefa

"Es probable que sea común, y lo entiendo, porque era realmente excitante", asegura Johathan. "Estábamos solos trabajando hasta tarde en la oficina. De repente, me preguntó si quería algo de beber, y le que dije que sí, así que se fue a la cocina y regresó con dos latas de cervezas. Fue muy loco. En mi sueño se veía guapísima. Me dio la cerveza, me puso contra el escritorio y comenzó a dominar la situación. Terminamos haciéndolo en todas partes". Enhorabuena por Jonathan. ¿Alguna vez te ha sucedido lo mismo?

Contigo mismo

Lo que hemos visto hasta ahora es bizarro, pero esto ya podría decirse que "pasa de castaño-oscuro": Patrice soñó con que hacía el amor con su propio cuerpo. "No tengo ni idea de lo que puede significar, pero me parece genial. Tuve un sueño sexual en el que me clonaron y tenía relaciones conmigo mismo. ¿Quizá soy un narcisista? No lo sé, pero en el sueño estaba muy excitado".

Una orgía en una casa hinchable

"Estaba en una casa hinchable y había como diez mujeres muy hermosas. Saltaban arriba y abajo conmigo, y nos íbamos turnando para liarnos entre nosotros o caer redondos al suelo hinchable. En este caso, el soñador se llama Randy, y por su descripción todo apunta a que se le debió mezclar algún fetiche oculto de su mundo infantil con los deseos más impuros de su despertar sexual. "En resumen, fue una orgía festiva repleta de sexo increíble".

Con la madre de tu amigo

No en vano una de las categorías más visitadas en las páginas pornográficas sea la de "MILF" ("Mother I'd Like To Fuck", para quien no se haya enterado todavía). "Lo tengo que reconocer: la madre mi amigo está muy cachonda, llevo enamorado de ella desde la infancia". Así presenta su sueño David. "Y a medida que iba cumpliendo años, me ha ido poniendo más y más. Soñé que iba a casa de mi amigo siendo estudiante universitario y ella terminó encerrándome en el armario. Lo hicimos allí. Fue genial".

Impredecibles e indescifrables. ¿Tienen algún significado muchos de los bizarros sueños que tenemos? Esta sin duda es una de las preocupaciones más antiguas que existen en el ser humano. Un interés que tuvo su máximo apogeo con Sigmund Freud y la publicación de su libro 'La interpretación de los sueños'. Las imágenes que nuestro cerebro proyecta cuando dormimos siguen sorprendiendo a psiquiatras y expertos, y en especial, a cualquier persona cercana a la que le queramos contar eso que nuestros ojos ven cuando están cerrados y permanecemos recostados sobre la almohada.

Sin censura Sigmund Freud
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