Qué debes hacer para dormir bien (ni se te ocurra contar ovejas)
Estás agotado pero no puedes dormir, así que se te ocurre contar y, cuando llegas a 100, empiezas a pensar que quizá no funcione. Quizá esto resuelva tus dudas
"Necesito dormir / no puedo continuar así / he tratado de contar ovejas / pero hay una que se me escapa siempre" empieza una canción del grupo estadounidense Eels. A todos nos ha pasado. Nos tumbamos en la cama, después de un día agotador lleno de proyectos, cerramos los ojos y... nada. No conseguimos conciliar el sueño. Las manillas del reloj siguen girando y nosotros, muertos de cansancio, continuamos amortajados en nuestra cama esperando caer al fin rendidos en los brazos de Morfeo, sin conseguirlo. "Mañana estaré muy cansado", te dices, pensando que quedan pocas horas paralevantarte y aún no has logrado pegar ojo. Y, claro, te estresas y agobias y entonces no puedes quedarte dormido.
¿Qué hacer, entonces? Algunos expertos indican que lo mejor es levantarse y llevar a cabo alguna actividad lo suficientemente aburrida (por ejemplo, empezar a leer 'Los Episodios nacionales', que siguen esperándote en la estantería) para finalmente coger el sueño. Otras personas optan pot la química e ingieren alguna pastilla para entrar finalmente en un sueño reparador, y otros, simplemente, esperan pacientemente en la cama a que pasen las horas. Pero ¿qué hay del viejo dicho de contar ovejas?, ¿lo has probado alguna vez? Y, lo más importante, ¿funciona realmente?
¿Cuentan humanos las ovejas?
Según una investigación realizada por la Universidad de Oxford en 2002, contar ovejas para conseguir dormir por la noche es, en realidad "demasiado mundano para mantener alejadas las preocupaciones", explicaba la psicóloga cognitiva Allison Harvey. En los grupos de prueba, aquellos que pensaban en lugares idílicos y hermosos, como playas, se dormían en promedio 20 minutos antes de lo que normalmente lo harían en las noches en que no podían dejar fuera de la cama sus pensamientos o estrés. Los contadores de ovejas en realidad permanecieron despiertos más tiempo que el resto.
La gente que piensa en playas u otros ambientes relajantes consigue conciliar el sueño antes
Por tanto, si pasas por problemas de sueño, parece que conciliarás el sueño antes pensando en algún lugar paradisíaco en Tailandia que con el viejo truco de contar ovejas. Si tu problema persiste y no te deja mantener una vida normal, acude al médico o al Instituto de Investigaciones del Sueño. Nuestro desempeño durante el día durante la semana no será óptimo cuando no hemos dormido lo suficiente durante la noche.
La importancia de un buen descanso
Antes de nada, has de saber que porque te despiertes de repente, en mitad de la noche, no tiene por qué significar que padezcas un trastorno del sueño. Todos tenemos "despertadores". El reloj biológico, al fin y al cabo (culpable, en muchas ocasiones, de que te despiertes antes de que suene el despertador). El ritmo circadiano, comúnmente denominado reloj interno o biológico, puede ser tan preciso como un reloj suizo. Está situado en el núcleo supraquiasmático del cerebro, controla la presión arterial, la temperatura y el sentido del tiempo. Pero si te despiertas con demasiada frecuencia y esto te altera el sueño, quizá si debas hablar con tu médico de cabecera.
Imagina que no has podido dormir en toda la noche, ya sea por culpa del insomnio o porque te despiertas muchas veces, o quizá porque al vecino de arriba se le ha inundado el piso y has tenido que estar poniendo cubos contra las goteras. Da igual, ¿hasta qué punto es realmente bueno dormir una siesta?
Si te estás muriendo de sueño y necesitas parar un poco y descansar, pegar una cabezada es la solución, pero, ojo, no se te debe ir de las manos. Lo ideal es que dure unos 25 o 30 minutos, lo que evita que durmamos profundamente y que nos despertemos cinco horas después sin saber si estamos en el planeta Tierra o en Saturno. Estas siestas pueden renovar los niveles de alerta y restaurar la capacidad del cerebro para aprender, e incluso mejorar el estado de ánimo. Eso no significa, eso sí, que puedas prescindir del sueño que proporciona la noche.
"Necesito dormir / no puedo continuar así / he tratado de contar ovejas / pero hay una que se me escapa siempre" empieza una canción del grupo estadounidense Eels. A todos nos ha pasado. Nos tumbamos en la cama, después de un día agotador lleno de proyectos, cerramos los ojos y... nada. No conseguimos conciliar el sueño. Las manillas del reloj siguen girando y nosotros, muertos de cansancio, continuamos amortajados en nuestra cama esperando caer al fin rendidos en los brazos de Morfeo, sin conseguirlo. "Mañana estaré muy cansado", te dices, pensando que quedan pocas horas paralevantarte y aún no has logrado pegar ojo. Y, claro, te estresas y agobias y entonces no puedes quedarte dormido.