La conspiración que se oculta tras el divorcio de Jeff Bezos

"Vemos un futuro como amigos y compañeros". Así comenzaba el comunicado en el que Jeff Bezos, fundador y CEO de Amazon, con una fortuna de más de 120.000 millones de dólares, anunciaba el fin de su matrimonio con su mujer, MacKenzie Bezos, tras 25 años juntos.

¿El motivo? Tiene nombre y apellidos: Lauren Sanchez. Según la revista estadounidense 'National Enquirer', esta expiloto de helicóptero y presentadora de informativos de 49 años (también casada), llevaría meses manteniendo una relación secreta con él, que habría incluido exóticos viajes en el jet privado de 50 millones de euros del hombre más rico del mundo, además de un intercambio de selfies eróticos y mensajes picantes.

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A. López

El medio nortamericano publicó la documentación que acreditaba la infidelidad: fotos de su pene, selfies sin camisa y todo tipo de whatsapp románticos en los que el amor brotaba a borbotones. La relación comenzó hace ocho meses e incluyó todos los detalles sórdidos de un romance clandestino en el que ambos protagonistas están unidos en sagrado matrimonio.

Cosas de telenovela

"Te amo. Te lo mostraré con mi cuerpo y mis labios y mis ojos, muy pronto" o "quiero olerte y sentirte. Quiero abrazarte fuerte... Quiero besarte... te quiero. Estoy enamorado de ti", con algunas de las declaraciones de amor que cruzaba con Sanchez.

Es fantasioso sugerir que lo hicimos porque es nuestro enemigo, pero la realidad es que un personaje así es un sujeto de interés periodístico

La última vez que Mackenzie apareció en los titulares fue por escribir una crítica negativa de un libro sobre Amazon en 2013. La decisión de emitir un anuncio público parecía fuera de lo común: una ruptura muy accesible de una pareja muy cautelosa. Todas estas declaraciones y detalles escabrosos han sido objeto de fascinación provocando una teoría conspiratoria que tiene fascinados a todo el mundo: ¿Ha provocado esto Donald Trump?

La revista, que investigó a la pareja durante cuatro meses, explica que la esposa de Bezos se enteró de esta relación extramatrimonial cuando vio los registros de vuelo del jet privado del matrimonio. El nombre de la amante aparecía demasiadas veces y era la única en la lista de pasajeros. Aunque el CEO quiso comprar la historia a la revista, la amistad del director con el presidente de Estados Unidos, enemigo declarado del empresario, pudo más. ¿Por qué? ¿Venganza?

El 'Enquirer' ha sido acusado de pagar cientos de miles de dólares para comprar y silenciar las historias de las mujeres, como la de la actriz porno Stormy Daniels, que en 2016 amenazaba con contar que fue amante del presidente. Hasta aquí nada sorprendente porque es una práctica conocida en la prensa del corazón: pagar por exclusivas para guardarlas y asegurar que nadie más las publique.

Donde las dan...

Lo cierto es que, como titulaba Adam K. Raymon en el 'New York Times', es "una casualidad" que el mismo medio que decidió colaborar con el FBI y la fiscalía para investigar a al exbogado de Trump, Michael Cohen, por fraude (ya está condenado) sea el más odiado por el presiente.

¿Ha sido la amistad del presidente de EEUU con el director de la revista la razón por la que no aceptaron archivar la exclusiva?

Además, Trump no ha dudado en expresar lo que siente en su cuenta de Twitter: "Lamento escuchar las noticias de que Jeff Bozo ha sido derribado por la cometencia, cuyos informes, según tengo entendido, son mucho más precisos que los de su periódico cabildero (para los que no conozcan este término sirve para designar a una persona que trata de influenciar a las autoridades para asegurarse de que las leyes favorezcan o no perjudiquen a una industria, organización o el público en general), el Amazon Washington Post. ¡Esperemos que el periódico pronto caiga en mejores manos y más responsables!".

La investigación del 'National Enquirer', la más cara y relevante en la historia de la revista, llevó a los periodistas a perseguir a la pareja por cinco estados. Algo que parece hacer merecido la pena por su gran repercusión. "Aunque ambicioso, era lógico investigar qué sucede alrededor de la persona más rica del mundo. Es carnaza y esto es un negocio", se defendía la publicación. "Es fantasioso sugerir que lo hicimos porque es nuestro enemigo, pero la realidad es que un personaje así es un sujeto de interés periodístico", añadían.