Los nueve clubs privados que será difícil que visites alguna vez
Seguro que alguna vez has fantaseado con ser rico y poder ser miembro de alguna de estas sociedades. Sus interiores sin duda te sorprenderán
Si por un día fuéramos millonarios -soñar es gratis- probablemente muchos de nosotros querríamos ver con nuestros propios ojos qué se cuece en algunos de los clubs elitistas más caros del mundo. Esos en los que sabes que tienes prohibida la entrada incluso antes de acercarte, solo porque eres un "simple mortal". Imaginamos fuentes de chocolate, paredes de oro, estatuas sacadas de yacimientos romanos, partidas de cartas, golf, paddle y mucha pero que mucha hípica... pero ¿cuánto de real hay en todo esto?
Por suerte todo esto se puede refutar fácilmente desde que en 1826 Joseph Nicéphore Niépce inventó la fotografía, y, así podemos observar mientras soltamos un suspiro las imágenes de estos lugares de ensueño, acariciamos la pantalla de nuestro móvil u ordenador, sintiéndonos un poco más cerca. Como cuentan para 'BBC', hay una serie de clubs alrededor del mundo que poblarán tus fantasías durante mucho tiempo.
Roppongi Hills Club
En el corazón de Tokio podemos sentirnos como un personaje de 'Lost in Traslation', porque justamente esta ciudad tiene la capacidad de rodearnos, hacernos parpadear con las luces de neón y caminar rápidamente al ritmo de los demás transeúntes sin tocarnos nunca con ellos y encontrar una maravilla como esta.
Roppongi Hills Club ocupa todo el piso 51 de Roppongi Hills Mori Tower. Con vistas espectaculares, el club cuenta con un total de siete restaurantes, dos bares impresionantes y algunos de los espacios para eventos más buscados en la ciudad.
El club es un lugar de encuentro para los amantes de la cultura y las artes. Desde reuniones de negocios formales a almuerzos, cenas o cafés, es un entorno en el que la gente, según señala su propia página web: "puede relajarse de verdad". No lo dudamos. Es recomendable vestir de etiqueta, aunque hay bastante libertad al respecto, desde un yukata (vestimenta tradicional de algodón) a pantalones vaqueros.
Quorum Club
Nos trasladamos ahora a la India. País de contrastes, tan enorme que podría adquirir el calificativo de continente si se lo propusiera. El Quorum Club en la ciudad de Gurugram se describe a sí mismo como un "refugio urbano", que se extiende sobre un espacio de 22.000 pies cuadrados.
El club ofrece entretenimiento, como no podía ser de otra manera, juzgando sus instalaciones. Tiene espacios para beber, trabajar y mantenerse en forma. También hay una galería (en la primera fotografía). Uno de los objetivos principales del club es apoyar las artes exhibiendo obras de artistas emergentes.
Mesh Club
Cambiamos de continente. En Johannesburgo, ciudad más poblada de Sudáfrica, nos topamos con Mesh Club. Aquí es probable que no nos permitan pasar a no ser que nos hagamos miembros. Con un marcado carácter minimalista, se encuentra ubicado en Rosebank, por si te entran ganas de unirte a sus filas, lo cual sería muy lógico.
El interior combina la estética industrial con toques lujosos, y adornando las paredes hay una selección variada de arte contemporáneo y clásico.
Kee Club
O Capital Club. Aunque hemos elegido Shanghái como destino, lo cierto es que en Hong Kong, por ejemplo, también podríamos encontrarlo. Según su web es el primer club privado de negocios que abrió en China en 1994 y es el más prestigioso de Beijing. Se ha ganado su puesto como el lugar elegido para alentar y mejorar el comercio y la industria, tanto china como internacional.
Parece que nos trasladamos al Shangái exótico de principios del siglo XX. Según los propios comentarios de aquellos que han tenido el lujo de pisarlo: "Ambiente excepcional", "es como volver al pasado" o "único y precioso".
Gracias a la globalización puedes encontrar lujo y ostentación en cualquier parte del mundo
El Club ofrece un entorno relajado que fomenta el entendimiento mutuo y la confianza entre los miembros del club, sus invitados y asociados. También es bien conocido entre la alta sociedad de Beijing por sus exclusivas fiestas y grandes reuniones sociales.
The Clubhouse
Cruzamos el charco para movernos hasta Buenos Aires. El país del tango nos ofrece el que es quizá el más impresionante de todos los clubs que tendremos el gusto de "visitar", aunque sea mediante fotografías. Según su propia web: una casa moderna ambientada con estilo contemporáneo-ecléctico, ubicada en Palermo Soho. The Clubhouse es un club urbano. Fundado en 2011 con el objetivo de albergar una comunidad de miembros diversa pero con gustos similares, enfocándose en el arte y la industria del diseño.
The Clubhouse solo acepta un número limitado de miembros que deben atravesar un proceso de solicitud y evaluación previo. A cambio, si eres de los elegidos, puedes disfrutar de otras instalaciones en São Paulo, Nueva York, Londres, Budapest y Rio de Janeiro (próximamente).
Dumbo House
Si eres un enamorado de Nueva York como lo somos en esta sección, quizá hagas de este club tu favorito. Ubicado en Brooklyn, el interior de lujo de Dumbo House en Brooklyn está decorado para imitar el aspecto de los estudios de artistas que han vivido en el barrio desde los años 60 y 70.
El club tiene además una terraza de césped con vistas a la ciudad y piscina. Igual que sucede con el resto de clubs, en la propia página web puedes encontrar información para realizar el proceso de solicitud y poder formar parte como miembro de este elitista lugar.
1880 Club
En Singapur no se puede comer chicle pero seguro que a los miembros del Club 1880 no les importa especialmente. Diseñado por Timothy Oulton Studio, el elegante interior es una mezcla de motivos chinos y estilo industrial, y presenta materiales terrosos, como madera y minerales.
Por supuesto hay un bar y una galería de la que puedes disfrutar, pero si realmente entras en el club y no te apetece socializar con nadie existen cabinas telefónicas con forma de cápsula.
¿Te apetece hablar por teléfono con alguien? Llevate el tuyo propio, por supuesto, y después relájate en estas zonas revestidas con aluminio en el exterior y acolchadas con seda en el interior. Hasta la experiencia más sencilla se puede convertir en algo placentero.
A’dam&co
Te pensabas que una visita a Ámsterdam significaba ir a un 'coffee shop' y pasearte por el barrio rojo ¿no? Pues también puedes ser un auténtico señor si visitas el club A’dam&co. La terraza con vistas a toda la ciudad es, por ejemplo, una de las principales atracciones del club, aunque no la única.
Su impresionante escultura de madera que representa "el árbol de la vida" es otra. El club se encuentra localizado en la planta 18 de la Torre A'dam. Un club social para gente curiosa en el campo creativo. Eso empieza a sonar familiar, ¿no? aunque la originalidad de su propuesta no es lo más importante siempre que podamos disfrutar de esas vistas.
Groucho Club
No sabemos si los principios de los miembros de este club de Londres son como los de Groucho Marx y tienen otros, pero desde luego la ciudad inglesa es conocida por tener un amplio número de sociedades. Que se lo digan si no a Phileas Fogg. Con el lujo y la ostentación a la que estamos acostumbrados tras leer este artículo puede que este club nos parezca un poco más "terrenal".
Fue creado en la década de 1980 por un grupo de mujeres como un antídoto para los clubes de caballeros, el Club Groucho sigue siendo un bastión y refugio para las artes, la literatura y la gente de los medios en el corazón bohemio del West End de Londres. Pues no suena tan mal ¿no? Igual nos quedamos aquí.
Si por un día fuéramos millonarios -soñar es gratis- probablemente muchos de nosotros querríamos ver con nuestros propios ojos qué se cuece en algunos de los clubs elitistas más caros del mundo. Esos en los que sabes que tienes prohibida la entrada incluso antes de acercarte, solo porque eres un "simple mortal". Imaginamos fuentes de chocolate, paredes de oro, estatuas sacadas de yacimientos romanos, partidas de cartas, golf, paddle y mucha pero que mucha hípica... pero ¿cuánto de real hay en todo esto?