El 'Blue Monday' no existe: es una profecía autocumplida sin evidencia científica

Llega enero, nuevo año, nuevos propósitos y nuevos planes. Pero cuando pasa la mitad del mes, nos topamos con un día que nada tiene que ver con la ilusión de comenzar nuevos proyectos. Si bien todos los lunes se presentan como el día más difícil de la semana, al tercer lunes del mes de enero tenemos que sumarle el concepto de 'Blue Monday', término que se utiliza a menudo sin que mucha gente tenga muy claro qué es lo que hay detrás de él.

• Cuando el 'Blue Monday' no es el único día triste del año: cómo gestionar los momentos de bajón

Este 'lunes azul' se supone que es el día más triste del año, en virtud de una investigación sin base científica. El origen del Bluen Monday parece remontarse a una fórmula hallada por un experto en motivación, Cliff Arnall, quien indicó que el día menos feliz de los 365 días del año es el tercer lunes de enero. Se basó en un patrón, que posteriormente fue modificado, [C+(D-d)]TI / MNa, y que corresponde a una serie de parámetros que, en conjunto, determinan lo felices que seremos durante el día.

'C' equivale al factor climático (qué duda cabe de que el frío y la nieve con que se ha levantado el país no anima a la fiesta), 'D' representa las deudas adquiridas durante la Navidad, 'd' supone el dinero cobrado en enero, 'T' es el tiempo que ha trascurrido desde que los Reyes Magos partieron de nuevo para Oriente, y la 'l' significa el periodo desde el último intento en el que se intentó abandonar algún mal hábito sin éxito. El resultado del cálculo habría que dividirlo entre 'M' (nivel de motivación) por 'Na' (necesidad de hacer algo).

TE PUEDE INTERESAR

Blue Monday: 10 planes para ponerle alegría al ¿día más triste del año?

Ángeles Castillo

Sin embargo, la idea de utilizar este patrón fue de una agencia de viajes, Sky Travel, para promocionar la reserva de vacaciones. En 2010, el propio creador del 'Blue Monday' explicó que le pidieron que evaluara lo que podría ser "el mejor día del año para reservar las vacaciones de verano". "Cuando empecé a pensar en los motivos que llevan a una persona a reservar sus vacaciones, penando en lo que miles de personas me habían dicho durante mis talleres de felicidad y de gestión del estrés encontré todos estos factores que apuntan a que el tercer lunes del mes es particularmente deprimente", explicó. "Pero es casi una profecía autocumplida".

Según ha explicado a la agencia EFE el pisquiatra Jaime del Corral, de la Clínica La Paz de la Orden Hospitalaria de San Juan de Dios, Arnall utilizó factores que son reales y afectan al estado anímico, pero lo hizo con un "planteamiento arbitrario, con cierta base pero poca consistencia". "Ha cogido una serie de elementos negativos y ha hecho una ecuación de forma arbitraria para deducir que es el peor día del año", insiste este experto, quien asegura que esos factores se pueden dar igualmente el tercer martes o el tercer miércoles de enero o en febrero.

Profecía autocumplida

El término de profecía autocumplida fue definido por Robert Merton en 1948 como "una definición falsa de la situación que evoca un nuevo comportamiento que hace que la concepción falsa original se vuelva real". "Esta validez engañosa de una profecía autocumplida perpetúa el reinado del error, dado que el profeta citará el actual curso de los acontecimientos para demostrar que tenía razón desde el principio". Este punto es el que recalca el psiquiatra Del Corral, quien reconoce que a base de insistir se puede convencer a alguien de que ese es un día malo, puede llegar a sugestionarse y plantearse realmente que un día en concreto, en este caso, el tercer lunes del mes de enero, va a ser muy triste.

Actualmente no forma parte de la valoración de los españoles: es más una curiosidad que una creencia popular

El psiquiatra explica que es natural que en esta época del año se experimenten ciertos cambios anímicos, algo de estrés, cansancio emocional o desmotivación, pero hace hincapié en que no tiene que confundirse con la depresión. "Es normal tener bajones anímicos", incide, dado que en general, el invierno es una de las estaciones en las que más aumentan los síntomas depresivos, pero no tiene que coincidir necesariamente con el tercer lunes de enero, ni quiera con este mes.

A su juicio, en España, el 'Blue Monday' es un concepto que tiene muy poca aceptación. "Yo no veo que la gente lo comente por la calle, creo que, de momento, es más una curiosidad que una creencia popular". Además, tampoco ha podido observar que más gente vaya a urgencias o a la consulta en este día. "No forma parte, al menos de momento, de la creencia popular de los españoles". Tanto es así que el propio autor del término se declara actualmente activista para detener la ola del 'lunes más triste del año' con una iniciativa bajo el lema #StopBlueMonday:

De la misma opinión es el psicólogo Jesús Matos, quien asegura que no hay forma de designar un día como el más triste del año, aunque reconoce que "los lunes son difíciles, pero también enero es difícil y el invierno es difícil". Según señala a Efe este psicólogo, autor del libro 'Buenos días, alegría', el 'Blue Monday' puede resultar al final una profecía autocumplida: "Basta que lo pensemos para tener predisposición a hacer cosas que nos ponen triste". Y es que hay una relación directa entre las actividades agradables que hacemos y el nivel de bienestar que logramos, que suele coincidir con los fines de semana, por lo que es normal tener "bajón" los lunes.

En cualquier caso, según este psicólogo, "estar triste es absolutamente normal, necesario y sano", y para luchar contra este estado anímico "lo mejor que podemos hacer es estar activos, que la tristeza no guíe nuestra vida".