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Viaje por la Europa más dulce: dónde comer y cómo quemar las mejores tartas
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Viaje por la Europa más dulce: dónde comer y cómo quemar las mejores tartas

El 26 de noviembre se celebra en Estados Unidos el Día de la Tarta. ¿Por qué no lo celebramos en Europa haciendo una ruta gastronómica de lo más dulce?

Foto: Tarta Sacher de Viena (iStock)
Tarta Sacher de Viena (iStock)

10. La 'napoleonka' de Polonia

placeholder Tarta 'Napoleonka', de Polonia Foto: Piotrus-CC
Tarta 'Napoleonka', de Polonia Foto: Piotrus-CC

Se trata de una tarta de hojaldre y nata típica de Polonia, similar al milhojas. También conocido como 'kremowka' o 'cremeschnitte', en alemán, es un pastel hecho con dos capas de hojaldre y un relleno de crema batida, todo espolvoreado con un poco de azúcar glas. En 1999, en una visita de Juan Pablo II a su ciudad natal, Wadowice, el entonces papa hizo público su amor por este dulce, por lo que en algunos sitios también se le conoce como 'pastel de crema papal'. La unidad de 100 gramos aporta unas 429 calorías.

¿Dónde comerla... en Varsovia? En Lukullus, una cadena que tiene tres de sus tiendas en el centro. Precio: 7,90€.

¿Cómo quemarla? La mejor manera de no sentirse mal después de disfrutar de una deliciosa 'napoleonka' es caminando la ciudad. Según el motor de búsqueda de alquileres vacacionales y apartamentos Holidu, encargado de hacer esta ruta dulce por Europa, habría que cmainar durante 123 minutos para quemar las calorías del 'dulce papal'. ¿Una opción? Subir las escaleras de las 42 plantas del Palacio de la Cultura y las Ciencias de Varsovia.

9. La 'käsekuchen' de Alemania

placeholder Käsekuchen, tarta de queso alemana | Foto: Serhan Altug-CC
Käsekuchen, tarta de queso alemana | Foto: Serhan Altug-CC

¿A quién no le gusta un pedazo de tarta de queso de postre? A pesar de que hay multitud de variedades, existen diferencias culturales entre las recetas de los distintos países. La 'käsekuchen' es la versión alemana de la tarta de queso, que utiliza para su elaboración queso Quark —muy típico en la cocina alemana— y smetana, una especie de nata agria similar a la 'crème fraîche'. Además la 'käsekuchen' alemana no lleva nata y uno de sus ingredientes básicos es el 'vanillepuddingpulver', algo parecido a los polvos para hacer natillas. Una unidad de 100 gramos aporta 152 calorías.

¿Dónde comerla... en Berlín? En la cafetería Einstein, en la Villa Henny Porten. Precio: 3€.

¿Cómo quemarla? Al tener un aporte calórico relativamente bajo, será suficiente con caminar durante 44 minutos, algo relativamente fácil por la capital alemana, que tantas ofertas de turismo tiene. Otra opción es subir los 285 escalones de la Columna de la Victoria (Siegessäule) de Tiergarten, que dan lugar a un espléndido mirador a 65 metros de altura.

8. La gallega tarta de Santiago

placeholder Tarta de Santiago | Foto: Manuel Zaera-CC
Tarta de Santiago | Foto: Manuel Zaera-CC

Es, sin duda, el postre más típico de Galicia. La característica tarta con la marca de la cruz de Santiago en una capa de azúcar glas espolvoreado está hecha con almedras, azúcar y huevos y bajo ningún concepto lleva harina —por lo que es apta para celiacos—. Además, lleva canela y ralladura de limón. Es una de las (muchas) delicias de la gastronomía gallega y símbolo indudable de la capital de Galicia. Un pedazo de 100 gramos tiene una aportación calórica significativa: 377 calorías.

¿Dónde comerla... en Madrid? La mejor tarta de Santiago la encontrarás en muchas pastelerías de Santiago de Compostela: sobre todo hay que valorar que no esté envasada al vacío —vamos, que se note que es casera y está recien hecha—. Sin embargo, desde Holidu recomiendan una panadería artesana en la capital, Madrid, llamada Museo del Pan Gallego. Precio: 6,50€.

¿Cómo quemarla? Harán falta unos 108 minutos de caminata. ¿Cuál es la mejor opción? Si estás en Santiago, conviértete en peregrino. Si no... también, pero en la capital, donde hay multitud de opciones para quemar esas calorías: paseos, carreras en el parque del Retiro...

7. La 'prinsesstårta' de Suecia

placeholder 'Pricesstårta' de Suecia | Foto: Fredrik Tersmeden-CC
'Pricesstårta' de Suecia | Foto: Fredrik Tersmeden-CC

Originalmente se la conocía como la tarta verde, por razones obvias. Es uno de los postres más tradicionales del país y su actual nombre, 'tarta de la princesa', viene, como también es obvio, del especial gusto de la realeza británica por este postre. La receta original la publicó en un libro de cocina la que fue profesora de Marta y Astrid, las hijas de los príncipes Carlos de Suecia e Ingenborg de Dinamarca. Está elaborado con bizcocho, crema de vainilla y nata o crema, con una cobertura de mazapán verde espolvoreada con azúcar glas. A veces se decora también con una flor de mazapán roja. Aporta 290 calorías por cada trozo de 100 gramos.

¿Dónde comerla... en Estocolmo? En realidad se puede comer en casi cualquier parte del mundo, ya que se vende en los establecimientos de IKEA —aunque en ocasiones con sabor a frambuesa y de color rosa, variente que deja de ser 'tarta de la princesa' para ser 'tarta del príncipe'. La mejor opción es la pastelería Tosse. Precio: 5€.

¿Cómo quemarla? La 'tarta de la princesa' exige una caminata de al menos 85 minutos: ¿una opción? Al salir de la pastelería ve caminando hasta el Royal Djurgården, en la zona de Skansen, y haz el camino de vuelta. Eso sí, a paso ligero para bajar el delicioso postre.

6. La 'torta caprese' de Italia

placeholder 'Torta caprese' | Foto: Fabrizio Pucci-CC
'Torta caprese' | Foto: Fabrizio Pucci-CC

Se trata de un postre típico de la zona de Nápoles, procedente de la isla de Capri. Está hecha de chocolate y almendras —¡sin harina!—, crujiente por fuera y con más suavidad en el interior y que, en ocasiones, está hecho con un toque de licor de Strega. Según Holidu, cuenta la leyenda que una princesa austriaca, casada con el rey napolitano, quería una tarta sacher pero que su chef no conocía la receta. así que preparó un pastel de chocolate con almedras, inventando así la que ahora conocemos como 'torta caprese'. El trozo de 100 gramos aporta unas 418 calorías.

¿Donde comerla... en Roma? Pues al igual que ocurre con la tarta de Santiago, la recomendación de Holidu no se va para su ciudad origen, sino que en esta ocasión se va para Roma, una ciudad con 0.15 cafeterías por cada 1.000 habitantes. En concreto para la panadería Said dal 1923 que, por cierto, también tiene local en Londres. Precio: 8€.

¿Cómo quemarla? Con 120 mminutos de caminata: un paseo agradable por los siete kilómetros de longitud del Vaticano. ¿Por qué no?

5. La 'sponge victoria' británica

placeholder tarta Victoria Sponge | Foto: Kelly Hunter-CC
tarta Victoria Sponge | Foto: Kelly Hunter-CC

Se trata de un dulce esponjoso que se sirve tradicionalmente con mermelada de frambuesa y crema batida. Este dulce le debe el nombre a la reina Victoria, que adoraba tomarse este postre acompañando a su té diario. A veces la 'tarta de Victoria' recibe también el nombre de 'Victoria sandwich' y, aunque algo menos, también se la conoce como tarta victoriana. Es el postre preferido entre los británicas sin lugar a dudas. Aporta, un pedazo de 100 gramos, un total de 400 calorías.

¿Dónde comerla... en Londres? La mejor opción es optar por este dulce en el Park Room, ubicado en una zona residencial muy cerca del mítico Hyde Park. Es un lugar estupendo para disfrutar de la hora del té, la principal tradición gastronómica de Reino Unido. Precio: 10,70€.

¿Cómo quemarla? Por su importante aporte calórico es imprescindible caminar, al menos, durante casi dos horas (115 minutos).

4. La 'bündner nusstorte' de Suiza

placeholder 'Bündner Nusstorte' | Foto: Alexander Klink-CC
'Bündner Nusstorte' | Foto: Alexander Klink-CC

También se le conoce como pastel de nuez de Engadine: es un dulce tradicional suizo relleno de nueces caramelizadas del cantón de los Grisones. La 'bündner nusstorte', o torta de nueces rellena, se inventó en la década de los veinte por un panadero llamado Fausto Pult y se diferencia de los anteriores pasteles porque la pasta está rellena de frutos secos y no se mezcla como solía hacerse hasta entonces. Este dulce tiene un aporte calórico de 483 calorías para un pedazo de 100 gramos.

¿Dónde comerla... en Zúrich? La mejor tarta de nueces rellena es la de la cafetería Weber Backerei Konditorei, donde se puede escoger este dulce de postre después de una tradicional cena suiza. Precio: 4,20€.

¿Cómo quemarla? Se trata de los dulces más pesados de esta lista así que, como consecuencia, exige mucho más movimiento que las demás: al menos es necesario caminar durante 138 minutos para quemar el pedazo de pastel.

3. El 'toucinho do céu' de Portugal

placeholder toucinho do céu
toucinho do céu

Se trata de un postre que también tenemos en España: el tocino de cielo. Nosotros lo tenemos en Jerez de la Frontera (Cádiz), en Palencia y en Asturias, pero también es uno de los dulces más típicos de Portugal. Y sí, el portugués es diferente a nuestro tocino de cielo. El 'toucinho do céu' procede del convento de Odivelas, en la región de Lisboa: se trata de una tarta elaborada cono azúcar, almendras molidas, gila dulce y yemas de huevo. Por cada trozo de 100 gramos se reciben 316 calorías.

¿Dónde comerla... en Lisboa? La pastelería Faruque, ubicada justo enfrente del convento que vio nacer este postre, es la mejor opción para degustar esta maravilla de dulce portugués. Precio: 1,50€.

¿Cómo quemarla? Exige unos 90 minutos de caminata. ¿Y qué mejor ciudad para caminar que Lisboa?

2. La 'tarte au citron' de Francia

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Tarte au citron

La 'tarte au citron' o pastel de limón es un delicioso dulce hecho con una masa dulce, principalmente bizcocho de limón, recubierto de una capa de crema de limón y, en ocasiones, otra adicional de merengue. Se trata de un postre muy habitual en Estados Unidos y en Reino Unido, pero en Francia es uno de los mejores acompañantes para tomarse un café a media tarde en cuaquiera de las bellas cafeterías de las calles parisinas. De hecho, no es un postre fracnés al uso, aunque sí es uno de los más vendidos en el país galo. Para los franceses, el origen de la 'tarte au citron' viene de la ciudad de Menton, conocida por sus limones. Cada trozo de 100 gramos tiene un valor calórico de unas 284 calorías.

¿Dónde comerla... en París? En muchas pastelerías de París, pero la recomendación especial es la Gérard Mulot. Precio: 4€.

¿Cómo quemarla? Harán falta 81 minutos de caminata. Y París es una ciudad que se presta a ello: camina desde la catedral de Nôtre Dame hasta la torre Eiffel o, si estás ya por la zona... ¡atrévete y sube la torre caminando! Al menos el tramo que sí está permitido.

1. La 'sachertorte' de Austria

placeholder Tarta Sacher de Viena (iStock)
Tarta Sacher de Viena (iStock)

Y llegó el turno del postre. EL POSTRE, con mayúsculas. La 'sachertorte' o tarta Sacher es una bendición para todo paladar amante del chocolate. Con una capa de mermelada de melocotón (o frambuesa) entre los dos bizcochos, recubierto todo con glaseado de chocolate negro, este postre austriaco es uno de los postres más apreciados por los amantes del dulce. Y también por los residentes en Viena, una de las ciudades con más cafeterías por habitante, según un estudio de Holidu. Tiene unas 337 calorías por pedazo de 100 gramos.

¿Dónde comerla... en Viena? Sin lugar a dudas, la 'sachertorta' debe ser consumida, al menos una vez, en el café Sacher, que sigue la receta tradicional. Precio: 6,70€.

¿Cómo quemarla? Harán falta 96 minutos de caminata para quemar el postre, pero ¿a quién le amarga un largo paseo por los jardines de Belvedere hasta 'El Beso' de Klimt después de tan delicioso dulce?

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