Los mejores trucos para que este 'finde' no ganes peso (o lo pierdas)

El fin de semana nos soltamos la melena, sobre todo en cuanto a dieta se refiere. Estamos de lunes a viernes contando cada caloría, acudiendo al gym religiosamente y llevando unos horarios equilibrados. En cambio, algo pasa en nuestra cabeza al acabar la semana y nos volvemos medio locos: tomamos comida basura, bebemos por doquier y no nos movemos del sofá. Todo eso acaba pasando factura en nuestros michelines y barriga y, lo peor: tenemos que compensar el desfase a la siguiente semana. Y así nunca vamos a adelgazar, sino todo lo contrario: engordaremos.

Por eso, es importante no perder los papeles durante el fin de semana. No se trata de estar haciendo ejercicio todo el día o de comer solo verduras y beber agua. Apenas es necesario seguir una serie de pautas que no nos costarán nada, con las que no solo no ganaremos peso, sino que incluso perderíamos si lo hacemos bien. Son las siguientes:

1) Come con cabeza

Vale que tienes comida familiar el domingo y que el sábado has quedado a cenar. Nos parece bien, pero no por ello tienes que repetir postre y beberte toda la botella de vino. El truco está en tomar de todo un poco, así disfrutarás sin pasarte de calorías.

Si organizas una fiesta o invitas a alguien a picar a casa, lo más seguro es que prepares comida y compres snacks. Deshazte luego de las sobras

Una de las habilidades a la hora de adelgazar es aprender a escuchar las señales de tu cuerpo. Con tantas tentaciones disponibles delante, puede ser difícil tener siempre en cuenta lo que estás a punto de comerte. Lori Kupferman, dietista de 'May I Health You', asegura: "No tomes un descanso en los días libres. Cuanto más consciente e intuitivo seas, más fácil será", recoge 'The List'.

Por lo tanto, conciénciate antes de sentarte a la mesa. La alimentación consciente consiste en comer cuando tienes hambre y detenerte una vez que tu cuerpo esté satisfecho.

2) Saca de casa todo lo que engorde

Si organizas una fiesta o invitas a alguien a pìcar a casa, lo más seguro es que prepares comida y compres snacks. Y todos sabemos que en estos eventos sobra muchísimo. Las sobras te pueden durar días, por eso lo mejor es sacarlas de casa. Llévatelas al trabajo para repartirlo entre tus compañeros, dáselo a unos vecinos, a algún familiar, a algún centro... pero no te lo quedes en casa, porque todos sabemos que te lo acabarás comiendo.

3) Acelera el metabolismo

No requiere ningún esfuerzo y tampoco se trata de recurrir a suplementos, sino de incluir en las diferentes comidas del día algunos alimentos con conocidas propiedades para estimular el metabolismo. Este conjunto de reacciones químicas y biológicas se activa tras la digestión y se basa en la reabsorción y transformación final de las sustancias alimenticias para cumplir las funciones básicas de nuestro organismo. Este es el motivo fundamental por el que además de la dieta y el ejercicio, el metabolismo se presenta como el tercer factor que condiciona una buena figura.

Estos productos pueden ser la capsaicina de las guindillas, la piperina de la pimienta negra, el gingerol del jengibre, la alicina del ajo o el isoticianato de alilo del wasabi.

4) Elige frutas y verduras

La forma más fácil de reducir calorías sin hacer un gran esfuerzo es comer más frutas y verduras. Esta no es solo una buena regla para los fines de semana, sino para todo el año. Las frutas y verduras están llenas de agua y fibra, y apenas tienen calorías. Entonces, puedes comer más sin la carga extra de calorías.

En una noche de bailoteo puedes adelgazar más que corriendo, nadando o pedaleando. En concreto, puedes quemar entre 200 y 600 calorías

5) Bebe té verde

Sustituye la taza de café en el bar por los beneficios de esta infusión. Las hojas de esta planta están cargadas de polifenoles, asociados a la prevención de acumulación de grasas y al incremento de la temperatura corporal, que provocan un mayor consumo de calorías. El té verde posee también cafeína, un compuesto al que se le atribuye un efecto lipolítico o “quema grasas” y que es además un ingrediente típico de muchos complementos dietéticos para adelgazar.

6) Sal a bailar

Salir de fiesta nunca te ha salido más rentable. En una noche de bailoteo puedes quemar más calorías que corriendo, nadando o pedaleando, según una investigación reciente de la Universidad de Brighton (Inglaterra). Bailar durante una hora puede quemar entre 200 y 600 calorías.

7) Pasea o camina rápido

No subestimes el poder de un paseo. Con uno relajado de 15 minutos quemarás casi tres veces más calorías que si estuvieras sentado el mismo tiempo, según un estudio del 'Journal of Physical Activity and Health'. Además, es algo que puedes hacer en cualquier momento durante el fin de semana.

Si te ves animado, puedes hacerlo más rápido, así adelgazarás más. Con el simple hecho de caminar con un poco más de velocidad durante un rato quemarás hasta un 20% más de calorías que si lo hicieras con ritmo constante, de acuerdo con un estudio de 2015 de la Ohio State University. Así pues, trata de acelerar durante 30 segundos y luego camina más relajado por los siguientes 3 minutos, así.

8) Bebe mucha agua

La deshidratación puede hacerte pensar que tienes hambre, incluso cuando no es así. Un equipo de científicos alemanes demostró además que beber agua adelgaza. La investigación, llevada a cabo en la clínica universitaria Charité de Berlín, asegura que la ingesta de agua refuerza los efectos de una dieta de adelgazamiento.

Los investigadores analizaron casi 5.000 referencias de cuatro bases de datos de artículos científicos en busca de todos aquellos en los que se estudiara la relación entre el consumo de agua y la pérdida de peso. Encontraron 11 estudios y tres de ellos mostraban a las claras que el consumo de agua está relacionado con una mayor pérdida de peso.

La investigación destaca el éxito de una dieta de adelgazamiento para personas mayores con un alta ingesta de agua. Las personas estudiadas que aumentaron en un litro al día el agua ingerida al día adelgazaron entre uno y dos kilogramos más que el grupo de control, que mantuvo sin cambios la cantidad que bebía.

9) Limita el alcohol

El problema no es tanto el alcohol, sino lo que comes con él. El divulgador científico Gary Taubes explica en su libro 'Cómo engordamos y qué hacer al respecto' (RBA) que aunque el alcohol aumenta la producción de grasa del hígado, no conlleva de forma intrínseca un aumento de peso, ya que "almacenar estas calorías como grasa o quemarlas depende de si comemos o bebemos hidratos de carbono con el alcohol, algo que hacemos de forma habitual".

En efecto: los pinchos son los que, mezclados con la copa de vino, nos engorda. Por eso mismo, además, la mayoría de nutricionistas desaconsejan el consumo de cerveza en planes de adelgazamiento, pues se trata de una bebida que combina alcohol con hidratos de carbono: un tercio de las calorías de una cerveza común proceden de la malta, un hidrato de carbono refinado que engorda por sí solo y, aún más, cuando actúa junto al alcohol, con el que va de la mano. De ahí la famosa barriga cervecera.

La forma más fácil de reducir calorías sin hacer un gran esfuerzo es comer más frutas y verduras. Esta no es solo una buena regla para los fines de semana

Ya sabemos que el vino no engorda, siempre y cuando se consuma sin hidratos de carbono. Pero no te engañes, acabarás pecando.

10) Duerme

Aprovecha que no tienes que ponerte la alarma al día siguiente para remolonear en la cama. Cuando duermes de siete a ocho horas, tu cuerpo está más preparado para deshacerse de las hormonas del estrés durante el día, y tu metabolismo se acelera. Una investigación de la Universidad de Chicago descubrió que la gente que estaba a dieta perdió un 55% menos de grasa cuando dormían solo 5 horas y media que cuando lo hacían 8 horas y media.

11) Ríete

Es normal que no te rías mucho de lunes a jueves, pero el fin de semana no tienes razón alguna para, a priori, no hacerlo. Y no por aquello de ser más feliz, sino porque quemarás más calorías. De hecho, con solo 10-15 minutos de risa, pierdes un total de 40 calorías.