Su novio llegó borracho a casa. Ella le gastó una broma que no olvidará

Natalie Weaver no perdona una. Esta mujer de Castleford en Inglaterra se vengó de su pareja por llegar muy tarde a casa ebrio tras un largo fin de semana de copas con sus amigos. Ella lo tenía todo planeado para pasar una tarde de domingo con su novio, Stephen Hall, de 26 años, pero él durmió durante todo el día tras haber llegado a altas horas de la madrugada oliendo a alcohol y tirando todo lo que se le ponía por delante.

Así, la joven de 23 años decidió tomarse la ley por su mano, cogió su maquillaje y le comenzó a pintar toda la cara. Una minuciosa labor que incluyó sombra de ojos, cejas depiladas, labios pintados y perfilados y hasta uñas postizas. "Estaba muy aburrida, así que me vengué", confiensa Natalie.

Weaver, que trabaja como recepcionista en un hotel de su localidad, publicó las fotos en Facebook donde advirtió: "Fue muy divertido, pero espero que se lo piense mejor la próxima vez antes de hacer esto de nuevo". "Estaba muy impactado y preguntaba qué había pasado", comentaba la joven que en un tono sarcástico bromeaba: "Es muy femenino y chisposo, a la gente le gusta divertirse con él".

Por su parte, Hall se lo tomó como un juego entretenido de su novia: "Estaba tan cansado que no podía ni abrir los ojos. Solo me sorprendió, pero no estaba enfadado, me reí de mí mismo. Quizá lo que peor llevaba eran los arañazos que me daba cuando intentaba rascarme con esas uñas".

El chico confiena que entró en pánico cuando imaginó ir a su trabajo con las uñas postizas: "Tuve que arrancarlas y fue bastante doloroso". La historia se hizo viral y multitud de medios ingleses recogieron la noticia de la 'revenge' de esta novia. ¿Y tú, que harías si tus planes de domingo se estropearan porque tu pareja llegara tarde y borracha esa noche a casa?