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Qué, cuánto y cuándo: lo que debes comer (y beber) para estar más sano y delgado
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Qué, cuánto y cuándo: lo que debes comer (y beber) para estar más sano y delgado

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Los tips definitivos para adelgazar

Quieres bajar de peso y crees que haces las cosas bien. Tomas café porque te han dicho que adelgaza, sustituyes el azúcar por los edulcorantes, comes pocas grasas, no te pasas con el alcohol... y largo etcétera. Pues, amigo, hemos de decirte que aunque todo eso está bien, te quedas en la superficie. Puedes pasar al siguiente nivel y hacerlo aún mejor. La nutricionista de éxito Jessica Sepel tiene las claves, detalladas en 'My body soul'.

Si quieres hacerlo de diez con tu dieta y dejar de sabotearte a ti mismo, pasa las flechas de la derecha. Hemos recopilado los mejores tips desvelados por la experta y hemos añadido información al respecto para acabar de convencerte. Venga, ¡ánimo campeón!

1) Solo un café y a esta hora

El café ayuda a adelgazar, pero solo si se toma bien. Sepel recomienda que únicamente tomemos una taza de café solo y siempre antes de las 10 de la mañana. Si esta opción nos parece demasiado fuerte o amarga, podemos echarle un pelín de leche de vaca.

El café es un poderoso diurético y un gran aliado en la pérdida de peso. Además, acelera el metabolismo y actúa contra la retención de líquidos gracias a la cafeína, ciertos ácidos cafeicos y la teobromina y asparagina que contiene. Y, por si fuera poco, estimula el sistema nervioso, favorece la digestión y es un gran inhibidor del apetito.

2) Tés para el resto del día

Por la mañana, café, y solo uno. ¿Y durante el resto del día? La respuesta es té e infusiones. Los mejores, según Sepel, son el verde, el chai y el diente de león, los cuales puedes tomar calientes o fríos.

Jeffrey Morrison, médico y fundador del Morrison Center de Nueva York, tiene unas indicaciones claras: debes tomar dos o tres veces tazas de infusiones al día. Él recomienda también el diente de león. El hinojo asimismo lo aprueba. Puedes mezclar estos tés con una mezcla de apio y una cápsula de 500mg de perejil dos veces al día.

Otras buenas opciones son el té rojo (tiene muchas propiedades quemagrasa), infusión de canela (reduce los niveles de azúcar en sangre y acelera el metabolismo), té verde (reduce la grasa de la cintura) y cola de caballo (evitan que retengas más líquidos).

3) Agua sola o acompañada, tu aliada

Para no consumir tanta teína (luego no vas a poder pegar ojo), bebe también agua sola, con gas o con limón. ¿La temperatura de la misma? Cuanto más baja, mejor. Tu cuerpo quema calorías de grasa para igualar la temperatura del agua helada que estás bebiendo con la temperatura de tu cuerpo. Para que te hagas una idea, quemas 15 calorías con cada medio litro que bebes de agua fría. Es decir, que si al día bebes 7 vasos, quemarás 100 calorías de más o, lo que es lo mismo, podrás perder 4,5 kilos al año solo dando sorbos.

En 2003, una investigación publicada en 'US National Library of Medicine' demostró que aquellos que bebían agua helada aumentaban su gasto calórico en un 30% durante más de una hora. "Si bebes dos litros de agua al día, quemarás unas 100 calorías extra", asegura Rachele Pojednic, profesora asistente en el departamento de nutrición de Simmons College, a 'Self'.

El jugo de limón también es una buena opción para adelgazar. Contiene pectina, un carbohidrato soluble en agua que se emplea como agente espesante o gelatinizante en diversos tipos de alimentos como mermeladas, flanes o yogures. Según un estudio publicado en la revista American College of Nutrition, la pectina que se encuentra en la cáscara de limón reduce la sensación de hambre durante unas cuatro horas aproximadamente.

4) Canela en lugar de edulcorantes

Olvídate del azúcar, la miel o los edulcorantes artificiales para endulzar tus bebidas: tienen muchas calorías y en general son perjudiciales para la salud. Lo mejor, asegura Sepel, es que eches un poco de canela o Stevia.

Además de sus efectos como afrodisíaco natural, la canela se utilizaba tradicionalmente en Asia como remedio para combatir la gripe y algunos problemas respiratorios. Si se tiene antojo de dulce, echar un poco de canela, por ejemplo al yogur, será una rica alternativa que satisfará nuestra necesidad sin renunciar a comer rico.

5) Si quieres alcohol, vino tinto

Si te apetece tomar algo de alcohol a la hora de comer o cenar, decídete por el vino tinto. Su consumo moderado no solo no hace daño, tiene importantes beneficios para nuestra salud: reduce el riesgo de sufrir problemas cardiovasculares, previene la depresión y frena la aparición de la diabetes tipo 2.

Ahora bien ¿cuánto es un consumo moderado? Por lo general, cuando los científicos recomiendan beber dos copas al día. Pero esto ser refiere a la copa de vino estándar: 150 ml. Y el problema es que nos solemos servir mucho más.

6) ... o ginebra y vodka

Sepel afirma que si tienes una fiesta o evento, y el vino se te queda corto, lo mejor es que bebas ginebra o vodka, que puedes mezclar con zumo de limón o agua con gas.

Los licores también son una buena opción, pues son los que menos carbohidratos tienen. Otros que puedes beber sin engordar son el ron y el tequila, eso sí, siempre y cuando no estén endulzados ni mezclados con un refresco gaseoso azucarado.

7) Nada de hidratos para la cena

Como ya te contamos, hay que tener cuidado con los hidratos de carbono. Sepel asegura que debes obviar por completo los complejos durante la cena, y optar en su lugar por los integrales o platos ricos en proteína.

Asimismo, es preferible primar los hidratos complejos de los vegetales y verduras sobre los procedentes de la pasta y el arroz. El gran problema de tomar arroz o pasta para cenar es que, además, solemos consumir grandes cantidades, ingiriendo muchas más calorías de las recomendadas. Si se toman en raciones pequeñas no constituyen ningún problema, pues son alimentos muy fácilmente digeribles, pero es difícil no excederse.

8) Si quieres algo dulce, chocolate negro

La nutricionista recomienda tomar chocolate negro en lugar de con leche. Una recomendación que se ha extendido en los últimos años entre la mayoría de dietistas.

Al respecto, el neurocientífico Will Clower asegura en su libro 'Eat Chocolate, Lose Weight' que tomar chocolate 20 minutos antes y cinco minutos después de comer y cenar puede reducir el apetito un 50%. A ello se añade un estudio de la universidad italiana de L'Aquila, que asegura que las personas que comieron una barrita de chocolate negro una vez al día durante 15 días vieron cómo su resistencia a la insulina disminuía un 50%.

El chocolate negro, además, tiene grasas saludables que ralentizan la absorción de azúcares por la sangre, lo que evita picos en la insulina, responsables de frenar los mecanismos destinados a quemar grasa y de provocar hambre pese a haber comido. Además, reduce las ganas de comer alimentos grasos, dulces y salados, y reduce los efectos metabólicos que el estrés conlleva.

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