Así adelgacé 55 kilos, me convertí en una mujer muy atractiva y perdoné a todos
Tras perder muchísimo peso, la joven decidió compartir su estrategia con el resto del mundo. La historia de una reconocida bloguera que hoy cuenta con miles de seguidores
Ser 'el gordo de la clase' con el que nadie quiere formar equipo porque 'le pesa el culo', no entrar en el pupitre por tener un tamaño superior a la media, escuchar el recordatorio constante de que se es un 'zampa bollos' y estar cada día más y más marginado del resto, no resulta agradable para nadie. Y todo, por su aspecto físico. La rusa Tanya Rybakova, de 25 años, conoce bien lo que se siente cuando vives esa situación. Tras una infancia y adolescencia en la que tuvo que soportar el acoso y burlas de sus compañeros aludiendo a su sobrepeso, decidió que cambiaría su estilo de vida y adelgazaría.
Tras perder cerca de 55 kilos, la joven cambió radicalmente su aspecto y decidió compartir su estrategia y avances con el resto del mundo. Esta es la historia de la reconocida bloggera especializada en estilo de vida que hoy cuenta con más de 270.000 seguidores en su canal de YouTube, acude a entrevistas en radio y prensa y participa en programas de televisión. “A menudo no puedo creer que esta sea mi vida”, reconoce la joven que define su evolución como la auténtica historia de la Cenicienta.
El mediático viaje hacia la delgadez
Cuando tenía 17 años la vida de Tanya era prácticamente un infierno. Sin amigos, aislada del resto de personas de su edad y con un byuede complejos físicos que no dejaban de aumentar. “Me sentía tan mal que todos los días llegaba a casa de la escuela llorando y yo no quería volver. El exceso de peso se llevó mi confianza”, confiesa en una entrevista con 'The Daily Mail'.
El punto de inflexión llegó en la noche de su graduación, evento que Tanya describe como la peor noche de su vida: “Estaba sola y no paraba de llorar. Incluso los que eran mis amigos no me hablaban. Entonces decidí que tenía que perder peso”.
No vengo de una familia rica y comíamos un montón de comida barata que no era saludable. No sabíamos que no era buena
Fue después de adelgazar prácticamente veinte kilos cuando un vídeo en el que explicaba qué había hecho y cómo había llegado 'del antes al después', llevó a la joven al estrellato de la red de redes. Su recorrido para perder peso se convirtió en un auténtico viaje viral.
Hoy son muchas las personas que contactan con ella para solicitarle ayuda o, simplemente, para decirle lo guapa y delgada que está. Entrevistas en televisión, radio, prensa escrita y cada vez más y más fanáticos que la siguen a través de las redes sociales. Pero, ¿qué hizo realmente para conseguir estar así de delgada?
Un proceso largo pero efectivo
Antes del glamour y las habituales apariciones en televisión, Tanya se sometió a tres años y medio de intenso trabajo en los que iba perdiendo peso progresivamente. Lo primero que hizo fue empezar a ir a nadar y practicar ejercicio tres veces a la semana y eliminar de su dieta las grasas trans, demasiado presentes en su alimentación: “No vengo de una familia rica y comíamos un montón de comida barata que no era saludable. No sabíamos que no era buena, solo que era sabrosa. La realidad es que cada vez pesaba más y más, empecé a tener problemas para respirar y prácticamente no podía caminar. Tenía problemas de salud por no comer sano y al llegar a la universidad me sentía débil y temblorosa”.
No se trata sólo de adelgazar, eso es sólo el primer paso, se trata de tener confianza y estar sano física y mentalmente
Después de probar varias dietas que le ayudaron más bien poco, Tanya contactó con un nutricionista y entrenador personal que dio con la clave: la joven necesitaba un cambio radical de sus hábitos alimenticios –más proteínas y menos grasas– y ejercicio. Hoy come bien, “por lo general pollo o atún con verduras”, se sirve raciones más pequeñas y ha sustituido el chocolate y los dulces por aperitivos saludables como manzanas o yogur de kéfir. Además, trata de cenar tres horas antes de acostarse y siempre planea sus comidas de un día. Sin embargo, ninguno de estos cambios tiene sentido si no hay una base: “No se trata de hacer una dieta, sino de seguir un estilo de vida”, insiste.
La clave está en la confianza
Como tantas otras personas que pierden una gran cantidad de peso en poco tiempo, Tanya tuvo que someterse a cirugía para que le extirpasen el exceso de piel. “Intenté aceptar la flaccidez e hice todo lo posible que había en mi mano, pero era demasiado pellejo”, narra. En gran medida, fue gracias a este proceso –que nunca ha ocultado haber realizado– como consiguió lucir la increíble figura que muestra a diario a sus 170.000 seguidores de en Instagram.
Me sentía tan mal que todos los días llegaba a casa de la escuela llorando y yo no quería volver. El exceso de peso se llevó mi confianza
“Intento mostrar a la gente que quiere perder peso que lo primero que tiene que hacer es cambiar su manera de pensar. No se trata sólo de adelgazar, eso es sólo el primer paso, se trata de tener confianza y estar sano física y mentalmente”, asegura la bloguera, quien ya ha hecho de esta frase su propio eslogan vital y corporativo: “Puedes cambiar tu vida si crees en ti mismo”.
Tanya insiste en que ha perdonado a los niños que le hicieron la vida imposible cuando era pequeña, y asegura que no está enfadada ni siente rencor hacia sus compañeros de colegio. “En aquel momento eran jóvenes. Todo el mundo comete errores”, disculpa la bloguera.
Ser 'el gordo de la clase' con el que nadie quiere formar equipo porque 'le pesa el culo', no entrar en el pupitre por tener un tamaño superior a la media, escuchar el recordatorio constante de que se es un 'zampa bollos' y estar cada día más y más marginado del resto, no resulta agradable para nadie. Y todo, por su aspecto físico. La rusa Tanya Rybakova, de 25 años, conoce bien lo que se siente cuando vives esa situación. Tras una infancia y adolescencia en la que tuvo que soportar el acoso y burlas de sus compañeros aludiendo a su sobrepeso, decidió que cambiaría su estilo de vida y adelgazaría.