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Estás escaso de dinero, pero no importa: 9 consejos para superar la cuesta de enero
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GUÍA PSICOLÓGICA DEL GASTO ECONÓMICO

Estás escaso de dinero, pero no importa: 9 consejos para superar la cuesta de enero

Si hemos incurrido en gastos extras, es importante ser conscientes de que somos influenciables y vulnerables al entorno, a la publicidad, a los escaparates, al fervor de las compras y de la gente

Foto: Al final de la escalada se encuentra el 1 de febrero. (iStock)
Al final de la escalada se encuentra el 1 de febrero. (iStock)

Tras las fiestas navideñas llega, para muchos, la hora de “apretarse el cinturón” y afrontar con calma y seriedad la cuesta de enero. Okon Madrazo, psicóloga del Hospital Vithas San José (Vitoria-Gasteiz), traslada algunos consejos prácticos para que no nos sintamos culpables de haber gastado más de lo que debíamos y, al mismo tiempo, afrontar los gastos que aún tenemos pendientes.

“Lo ideal es no asumir más gastos de los debidos, tampoco debemos sentirnos culpables por haber cometido algún exceso”, afirma Madrazo. “Si hemos incurrido en gastos extras, es importante ser conscientes de que somos influenciables y vulnerables al entorno, a la publicidad, a los escaparates, al fervor de las compras y de la gente”.

Los pacientes expresan aumento de estrés, ansiedad e irritabilidad por no haber sido capaces de controlar sus impulsos de compras y gastos en estas fechas

Aprender lecciones para el futuro también es importante: “controlar los gastos, priorizar, administrarse, tomar decisiones basadas en la necesidad y no en la impulsividad, y tener en cuenta nuestra disponibilidad económica son lecciones que podemos aplicar en el futuro”, afirma la psicóloga.

En muchas ocasiones, los pacientes remiten en consulta aumento de estrés, ansiedad, irritabilidad, insomnio, sentimientos de culpabilidad y baja autoestima, basados en no haber sido capaces de controlar sus impulsos de compras y gastos en estas fechas. Por eso, si nos encontramos ante un mes de enero complicado a nivel económico, Madrazo traslada cuáles son las herramientas que podemos aplicar para afrontarlo con éxito:

-Hacer una lista de cuáles son los gastos fijos que tenemos que afrontar “tener una lista nos ayuda a priorizar y a saber cuáles son esos gastos que son básicos”, afirma Madrazo.

-No sentirnos culpables “porque debemos de aceptar que, aunque de manera equivocada, hemos tomado nosotros mismos las decisiones”.

-Para ello eliminaremos las autocríticas negativas y destructivas.

-No ser catastrofistas sobre el suceso o sobre uno mismo. No generalizar la situación.

-Aprender de cara al futuro. “Todas las experiencias pueden aportarnos algo positivo, en este caso, lo vulnerables que podemos llegar a ser en situaciones de masificación, cómo nos influye lo que alrededor está sucediendo”, explica la psicóloga

Afrontaré los gastos, los compensaré de alguna manera y me sentiré bien por superar esta situación que yo he creado

-Evitar las anticipaciones negativas, que en muchas ocasiones terminan cumpliéndose dado que estamos tan pendientes del suceso que lo terminamos provocando.

-Formularse autoinstrucciones tranquilizadoras tipo: “ha sido algo puntual, ha sido un exceso de gastos sin darme cuenta, se me ha ido de las manos esta vez, porque yo no actúo así. De los errores se aprende, con lo mal que me siento, probablemente no vuelva a ocurrirme”, explica.

-Automensajes de superación: “sé que puedo manejar estas situaciones de gasto, lo he hecho otras veces, se cómo hacerlo. Afrontaré los gastos, los compensaré de alguna manera y me sentiré bien por superar esta situación que yo he creado”.

-Retroalimentación y reforzamiento positivo de todos los pasos que vayamos dando para conseguir superar, compensar, y olvidar los gastos excesivos que hemos hecho.

Tras las fiestas navideñas llega, para muchos, la hora de “apretarse el cinturón” y afrontar con calma y seriedad la cuesta de enero. Okon Madrazo, psicóloga del Hospital Vithas San José (Vitoria-Gasteiz), traslada algunos consejos prácticos para que no nos sintamos culpables de haber gastado más de lo que debíamos y, al mismo tiempo, afrontar los gastos que aún tenemos pendientes.

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