El estudio académico "Cómo es un pene bonito" detalla qué les gusta a ellas
Muchos hombres se obsesionan con el tamaño de su miembro viril y con si está o no dentro de la normalidad. Tranquilos, a ellas esto parece importarles más bien poco
Aunque decenas de estudios científicos se centren en desmitificar su relevancia e incluso se establezcan nuevas medias bastante más bajas para que se calmen los ánimos, el eterno debate sobre la importancia del tamaño del pene parece no tener fin.
Acostumbran a mirar el tamaño y forma de otros miembros viriles cuando están en los vestuarios masculinos, compararse con fotos de revistas e incluso buscar posibles semejanzas con los protagonistas de películas porno, por qué no. Pero, mientras muchos hombres incluso se llegan a obsesionar con el hecho de estar o no dentro de la normalidad, la cuestión es: ¿y a ellas les importa? ¿qué es lo que más valoran las mujeres?
Parece que el clásico 'más vale calidad que cantidad' se cumple a rajatabla para ellas. Al menos así lo asegura un reciente estudio titulado 'What Is a Good Looking Penis', (algo así como 'Cómo es un pene bonito') publicado en el último número de la revista Journal of Sexual Medicine según el cual a las mujeres no les interesa tanto la magnitud de los miembros viriles como que sean estéticamente agradables.
Para ello contaron con la colaboración de un grupo de 105 mujeres de diferentes grupos de edad que valoró y clasificó en orden de importancia ocho aspectos del pene masculinodesde el grosor, la longitud o la posición, hasta la forma del escroto o el glande, o cómo influía el tacto y textura de la piel o el vello púbico. Y los resultados son bastante sorprendentes.
Bonito, tu pene me parece bonito
En algún momento de su vida todo hombre se ha planteado si su pene era normal. Forma, textura, grosor, color pero sobre todo tamaño, son algunos de los rasgos que evalúan de sus miembros viriles mientras que para ellas importa más la belleza del conjunto: “la apariencia estética general fue clasificada como el factor más relevante para considerar que un pene es bonito”, explicaron los autores del estudio.
Seguida de esta el vello púbico y la piel que rodea la zona genital se situaron en segunda posición, lo cual no es de extrañar dado que son dos de las características más llamativas a la vista y el tacto. ¿Y lo que menos importa? La posición y la forma de la abertura de la uretra (el meato) fueron las menos valoradas, para bien o para mal, por las mujeres.
De los resultados obtenidos llama la atención que mientras que quedó en tercera posición el grosor (cuya media, según el último estudio realizado a principios de año, se establece en 11,66 centímetros erecto y 9,31 centímetros flácido), la longitud (13,24 centímetros erecto y 9,16 centímetros flácido, según el mismo estudio) parece importar mucho menos situándose como el sexto rasgo más importante a la hora de evaluar un pene.
Anomalías pasadas por alto
Pese a lo superficial que pueda parecer a simple vista el estudio –aunque para aquellos hombres obsesionados con la apariencia de su pene los resultados puedan tranquilizarles y serles de gran utilidad para superar el posible complejo–, en realidad los autores no buscaban definir las características del pene perfecto. Precisamente las conclusiones resultan especialmente interesantes para los aquellos varones que sufren o han sufrido una anomalía conocida como hipospadia en la que la abertura del pene (la desembocadura de la uretra) no está dónde debiera (en la punta), y se sitúa en la parte inferior del glande, en el tronco del pene o, lo que es peor, en la base de éste. Para más inri, los niños que sufren la enfermedad suelen tener penes más pequeños de lo normal, en ocasiones demasiado pequeños (micropenes).
En ocasiones provoca que la cabeza del pene se incline hacia atrás e imposibilita que se pueda orinar de pie y también está relacionado con que los testículos no desciendan normalmente, por lo que algunos hombres con hipospadias no son fértiles. Pero se trata de un problema tratable y existe cirugía para revertirlo sin que apenas se aprecie, y esto es lo que querían demostrar los investigadores.
A las mujeres no les interesa tanto la magnitud de los penes como que sean estéticamente agradables
Los hombres que colaboraron en el estudio se habían sometido a cirugías por hipospadias y el objetivo era saber si las mujeres podrían detectar la diferencia con un pene originalmente sano. Para ello mostraron a las encuestadas dos fotografías: una de un hombre que se había operado para corregir la hipospadia y otra con un hombre circuncidado,ya que los penes sin prepucio tienen una apariencia similar a aquellos con hipospadias corregidas. “La mayoría de las mujeres eran incapaces de saber si un hombre se había sometido a una cirugía y ambos genitales fueron considerados como de aspecto normal”, señalan los autores.
Que no, que no es tan importante
Una vez destapado que no percibían que se hubiese realizado intervención quirúrgica alguna, aprovecharon para averiguar cuáles eran las características que las mujeres apreciaban más a la hora de valorar un pene como bonito y atractivo.
El hecho de que considerasen la posición del meato como la menos importante es otra muy buena noticia para los hombres que han sufrido hipospadias porque la abertura de la uretra se ve afectada por esta anomalía.
En cuanto a la longitud, los investigadores creen que la poca importancia que le dan las mujeres “confirma los resultados de estudios anteriores que señalaron que la mayoría de las mujeres consideran el tamaño del pene 'poco importante' e incluso 'nada importante' y están satisfechas con las medidas de sus parejas”.
Queridos, guarden la cinta métrica y cuiden la apariencia del vello púbico, el escroto o la textura de la piel de sus genitales. Más vale pene bonito en mano que centímetros de más poco valorados.
Aunque decenas de estudios científicos se centren en desmitificar su relevancia e incluso se establezcan nuevas medias bastante más bajas para que se calmen los ánimos, el eterno debate sobre la importancia del tamaño del pene parece no tener fin.