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El estimulante definitivo: cómo gastar más calorías y comer menos
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LOS BENEFICIOS SECRETOS DEL CAFÉ

El estimulante definitivo: cómo gastar más calorías y comer menos

La luna y el sol. El amor y el matrimonio. El ying y el yang. El café y el deporte. Espera… ¿El café y el deporte? Efectivamente, hay un vínculo entre ambas y es positivo

Foto: Recientes investigaciones nos descubren propiedades del café que desconocíamos. (Corbis)
Recientes investigaciones nos descubren propiedades del café que desconocíamos. (Corbis)

La luna y el sol. El amor y el matrimonio. El ying y el yang. El café y el deporte. Espera… ¿El café y el deporte? Muy pocas personas se atreverían a encontrar un vínculo entre el ejercicio físico y la bebida con cafeína, que de hecho, parecen casi enemigos irreconciliables: hemos visto a muchas personas refrescarse con agua o una bebida energética después de sudar la gota gorda en la cinta, pero muy pocas con una taza de café entre las manos. Esto no es Brooklyn.

Pues bien, esas personas un tanto peculiares que prefieren el café a la hora de ejercitarse quizá lo estaban haciendo bien, como sugiere una investigación publicada en el Journal of Applied Physiology. El estudio señala que, efectivamente, las personas que toman café antes de entrar por el gimnasio manifiestan que el ejercicio ha sido mucho más fácil de practicar y más divertido que aquellas personas que no lo tomaban o habían consumido un placebo.

El experimento se llevó a cabo con 14 personas que practicaban habitualmente deporte; a unos de ellos se les proporcionó una bebida con cafeína equivalente a cuatro tazas de té negro o a dos cafés de ocho onzas (es decir, de unos 250 mililitros cada uno), mientras que otros tomaron un placebo. 90 minutos después de tomar la bebida, se les pidió que realizasen dos ciclos de ejercicio montados a lomos de una bicicleta estática durante 4 horas, con un descanso de una hora entre medias. Se tomaron muestras de sangre, de la inspiración y espiración de gases y del apetito percibido, y el resultado fue positivo para los bebedores de café.

El estimulante definitivo

Las ventajas de la bebida no se limitaban a espabilar a los atletas en su ejercicio diario, sino que también afectaba a sus hábitos alimenticios. Aquellos que habían tomado las dos tazas de té consumieron un menor número de calorías que sus amigos los del placebo cuando fueron arrastrados hacia un restaurante bufet después de la sesión en el gimnasio. El experimento midió el número de calorías de los alimentos que unos y otros seleccionaron, y concluyó que aquellos que tomaron café antes del ejercicio ingirieron de media 72 calorías menos que el resto, algo así como la cuarta parte de un donut.

No sólo eso, sino que los que habían tomado cafeína gastaron más energías y oxidaron una mayor cantidad de ácidos grasos que el grupo de control. “Combinar el ejercicio y la intervención nutricional es probablemente el mejor método para crear un equilibrio energético para perder el peso”, señala el estudio, que sugiere que el café puede ser un ingrediente importante a la hora de diseñar una dieta que, combinada con el deporte, nos haga perder peso.

No es esta la única investigación que establece un vínculo entre el café y el deporte. Durante los años setenta, varios experimentos demostraron que la cafeína incrementaba la liberación de adrenalina en la sangre. Sin embargo, un documento publicado por el Colegio Americano de Medicina Deportiva señala que es posible que el café no ocasione ningún cambio metabólico, como sugirieron varias investigaciones realizadas durante los años 80, que pusieron en duda la teoría de que la cafeína es la causante de que haya más grasa disponible para el organismo, lo que reduce la necesidad de recurrir al glicógeno, el carbohidrato almacenado en los músculos, y reduce la fatiga.

La luna y el sol. El amor y el matrimonio. El ying y el yang. El café y el deporte. Espera… ¿El café y el deporte? Muy pocas personas se atreverían a encontrar un vínculo entre el ejercicio físico y la bebida con cafeína, que de hecho, parecen casi enemigos irreconciliables: hemos visto a muchas personas refrescarse con agua o una bebida energética después de sudar la gota gorda en la cinta, pero muy pocas con una taza de café entre las manos. Esto no es Brooklyn.

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