Así tienes que lavarte: claves para lucir el pelo sin estropearlo

Volver a los métodos tradicionales para mantener la higiene personal. Este debió ser el deseo de Katherine Marinko y Margared Badore, dos blogueras estadounidenses que quisieron compartir los resultados de cómo queda el pelo después de estar 14 días lavándolo con bicarbonato.

Las editoras de treehugger.com se unieron el año pasado a la moda del “no poo” y quedaron encantadas con la forma en la que queda el cabello tras lavarlo con productos naturales, una tendencia que cada vez añade más adeptos contra el champú.

Sin embargo, la opinión de los expertos dignifica la función de este producto de higiene personal. “El champú nunca perjudica al cabello ni al cuero cabelludo”, explica Ángel Ostáriz, estilista de Thalía, Elsa Pataky o Marta Sánchez. “Hay que confiar en los profesionales del sector, que usarán champús sin sulfato, detergentes ni parabenos”, añade.

“El champú perjudica si es de mala calidad o es inadecuado para nuestro tipo de piel o cabello”, informa Xavi García, de Salon44. Por sus manos han pasado clientes tan conocidos como Eva Hache, Bimba Bosé o Laura Ponte, y afirma que lo más importante a la hora de elegir un buen champú es “saber los componentes que tienen”. En la misma línea se posiciona Francesc Peytaví, estilista y promotor del Salón Llongueras de Rambla Cataluña: "Lo malo es lavarse con un producto no apropiado para cada necesidad".

¿Por qué proliferan estas modas anti-champú?

En opinión de Ángel Ostáriz, la respuesta radica en que las personas “quieren ser únicas e inigualables, y por eso tienden a acercarse más a la naturaleza puesto que el estrés del día a día anima a buscar el equilibrio sin utilizar productos que nos agredan”.

En la misma línea se mueve Xavi García quien, al ser preguntado sobre el porqué de estas modas a lo “no poo”, lo tiene claro: “El cansancio por el gran consumo”. La gente intenta diferenciarse del resto de algún modo, y en este caso lo hace en casa recurriendo a productos completamente naturales.

¿Cuántas veces hay que lavarse el pelo?

Lo ideal, según Ostáriz, sería no superar las tres veces por semana. Sin embargo, tal y como apunta García, hay que tener en cuenta las circunstancias personales para adecuar a ellas la higiene capilar. Por ejemplo, si sudas mucho o vives en la ciudad, es normal que tengas que lavarlo con más frecuencia. Peytaví es más práctico, y resume: "El pelo hay que lavarlo cuando esté sucio, ni más ni menos".

El fin del encrespamiento

Que el pelo parezca una escarola no es algo que agrade. Sucede cuando "el cabello está deshidratado y roto", tal y como informa Francesc Petayví, que aconseja utilizar sérum aplicado en seco. Por su parte, Xavi García recomienda “aportar mucha hidratación y aplicar aceites o serum en las puntas para aportar más brillo”. Por su parte, Ostáriz aconseja “productos específicos para el encrespamiento a base de queratinas hidratantes, alisantes y células madre”.

Si además de la tendencia a encresparse tu cabello es quebradizo, lo ideal es que lo trates con productos específicos para estos casos. Ostáriz apunta un remedio casero efectivo: untarlo con una mezcla de aceite de almendras y aguacate. Recuerda el consejo de García si lo que tienes son las puntas abiertas: córtalas o “dará la sensación de que el pelo no crece y se ve encrespado”.

No más caspa

Para Xavi García (de Salon44) y Francesc Peytaví (de Llongueras, que ha trabajado con personas tan conocidas como Montserrat Caballé, Ana Botella, Zubizarreta o Martina Klein) es importante diferenciar entre caspa y descamación. “Hay productos que hidratan y cuidan el cuero cabelludo para controlar estos problemas, pero hay que ser constante con los tratamientos” para que no vuelvan a surgir.

En la peluquería de Ángel Ostáriz insiste en que es “primordial” visitar al dermatólogo además de romper el ciclo de irritación del cuero cabelludo con un champú anticaspa o con “ingredientes a base de ortiga blanca”.

¿Y para el pelo teñido?

Para mantener el color del cabello teñido, lo fundamental es que el tinte que se utiliza sea de buena calidad. Después, “el mantenimiento es igual que en un cabello natural” con la diferencia de que hay que hacer “más hincapié” en la hidratación, apunta García con más de 20 años de experiencia a sus espaldas.

La misma opinión se expresa por boca del madrileño Ángel Ostáriz, que aconseja el uso de champús que no arrastren pigmentos de color cuando laven el pelo y estén “libres de sulfatos”.

Desde Llongueras, Francesc Peytavé aconseja utilizar mascarillas para cabellos teñidos, que hacen que el cabello "mejore mucho", además de utilizar champús específicos que hacen que el tinte tenga más duración.

Una ayuda para los rizos

“No hay que friccionar mucho el cabello” al secarlo con la toalla, apunta Ostáriz, que añade: “Además, cuando vayamos a desenredarlo es bueno utilizar un producto especial para activar las espirales del rizo”.

Por su parte Xavi García sugiere tratarlo con un mayor énfasis en cuanto a la hidratación, puesto que en general “es un pelo más seco y encrespado, por lo que necesita más cuidado para que se vea sano y brillante”.