Es noticia
La misteriosa enfermedad que provoca alergia a la carne de forma repentina
  1. Alma, Corazón, Vida
ESTÁ CAUSADA POR UNA GARRAPATA

La misteriosa enfermedad que provoca alergia a la carne de forma repentina

Hasta hace pocos años, que alguien sufriese alergia al consumo de carne sonaba descabellado, pero ya hay más de 1.500 casos, y pronto irán a más

Foto: Hace apenas un lustro que se empezó a tener constancia de esta reacción alérgica.
Hace apenas un lustro que se empezó a tener constancia de esta reacción alérgica.

Hasta hace pocos años, que alguien sufriese alergia al consumo de carne sonaba poco menos que a invento. Sin embargo, hoy existen más de 1.500 casos diagnosticados en Estados Unidos, y como señalan los alergólogos expertos en el tema en un artículo publicado en Pop Science, es probable que este número aumente en los próximos años. Si en un primer momento dicha dolencia parecía circunscribirse a los Estados del sur, ya ha llegado a Nueva York y de ahí trasladarse a cualquier otro rincón.

Como cualquier alergia alimenticia, la que tiene relación con la carne impide a los enfermos ingerir comidas como la vaca, la ternera o el cordero (aunque en algunos casos toleran el pollo), y los efectos aparecen tres o cuatro horas después de su consumo. En la mayor parte de casos, afortunadamente, la alergia sólo dura unos pocos meses o años. Esta tiene su origen en la garrapata Lone Star, que recibe su nombre por el apelativo con el que se conoce de forma popular al Estado de Texas y que se ha desplazado hacia zonas más septentrionales durante los últimos años. Aunque no se sabe si todas las variantes de este insecto causan la alergia, por ahora es el principal sospechoso.

Una enigmática epidemia

¿De qué manera se ha extendido la enfermedad? Como señala en el artículo el doctor Erin McGintee, alergólogo de Long Island que ha diagnosticado ya 200 casos en su consulta en la Costa Este, es probable que se haya trasladado por todo el país en la piel de los pavos salvajes, que fueron reintroducidos en Long Island para satisfacer a los entusiastas de la caza. Otras aves migratorias que puedan haber transportado la garrapata o una creciente población de ciervos podrían tener la clave.

La enfermedad fue identificada por primera vez en el año 2008, cuando los alergólogos del sistema de salud de la Universidad de Virginia Thomas Platts-Mills y Scott Commins repararon en que algunos de sus pacientes habían desarrollado alergia a un medicamento anticancerígeno, el cetuximab. Era uno de los azúcares presentes en dicho compuesto, el alfa-gal, lo que provocaba dicho rechazo. Y no pasó mucho tiempo hasta que descubrieron que en los alrededores de las Montañas Rocosas comenzaban a producirse reacciones semejantes, en la misma zona en la que abundaba la garrapata Lone Star.

Después de unos cuantos meses, los alergólogos empezaron a tener cada vez más claro que la garrapata se encontraba en la raíz del problema. En el origen de ambas alergias se hallaba el alfa-gal, una clase de azúcar que también aparece en la sangre de mamíferos no primates y que el ser humano no es capaz de sintetizar por sí mismo. En una serie de experimentos, los investigadores descubrieron que los anticuerpos que se encontraban en la inmunoglobina E de los infectados reaccionaban de forma semejante con el alfa-gal tanto en los alérgicos a la carne como en los que rechazaban la cura del cáncer.

Aún quedan muchas preguntas por responder, la principal de las cuales es de qué manera el mordisco de la garrapata provoca la reacción en la inmunoglobina E, y por qué la alergia tarda tanto tiempo en hacer efecto. Los alergólogos sugieren que puede deberse a que la absorción de la grasa por el organismo se produce de forma lenta y lleva al menos dos horas. Sin embargo, los expertos creen que no hay motivo para preocuparse, especialmente si se vive al otro lado del Atlántico. McGintee sugiere que puede llegar a producirse “una epidemia regional en muchas zonas”, pero mantiene que es muy poco probable que la alergia se extienda por todo su país.

Hasta hace pocos años, que alguien sufriese alergia al consumo de carne sonaba poco menos que a invento. Sin embargo, hoy existen más de 1.500 casos diagnosticados en Estados Unidos, y como señalan los alergólogos expertos en el tema en un artículo publicado en Pop Science, es probable que este número aumente en los próximos años. Si en un primer momento dicha dolencia parecía circunscribirse a los Estados del sur, ya ha llegado a Nueva York y de ahí trasladarse a cualquier otro rincón.

Alergias
El redactor recomienda