Las cinco reglas básicas para conseguir que tu pareja te escuche

La comunicación es la piedra angular de un matrimonio bien avenido, como han repetido hasta la saciedad los coach matrimoniales, aunque no siempre es fácil con el paso del tiempo, esta premisa se vuelve más complicada de lo que parece. La experta en relaciones de pareja y autora del galardonado ensayo The ADHD Effect on Marriage, Melissa Orlov aporta algunas de las reglas básicas para recuperar la buena comunicación en el matrimonio y, con ella, mejorar la vida marital construyendo una relación sana y feliz.

Para Orlov, la mejor forma de que nos escuchen pasa, en primer lugar, por saber escuchar a los demás, pero también por implementar una serie de claves propias de una estrategia comunicativa. Unos objetivos que para alcanzarlos pueden seguirse las siguientescinco reglas, con las que se logrará que nos presten la atención que demandamos de nuestra pareja. El reto, insiste Orlov, consiste en evitar la comunicación destructiva.

Sé claro y conciso

Es la regla número uno de los buenos comunicadores: claridad y concisión. Para que nos escuchen y, sobre todo nos comprendan, hay que expresarse de forma sincera y sin esconder los verdaderos sentimientos y emociones. Cuando se tiene que reprochar algo a la otra persona, de nada sirve recrearse en una crítica, insistiendo todo el rato sobre lo mismo y elevando el tono para parecer más duro. Lo que quizá comenzó siendo un simple reproche por dejar los zapatos en el salón puede subir el tono hasta provocar el enfado entre el matrimonio. Sé moderado, breve y vea la raíz de la cuestión. A los buenos entendedores, pocas palabras bastan.

Subraya lo positivo frente a lo negativo

Hay que revisar las frases antes de hablar y traducirlas siempre en positivo. Con inteligencia, aunque también con realismo,hay que saber ver la cara positiva de las cosas y entender o relativizar la mala. La pareja siempre prestará más atención y estará predispuesta a debatir, aunque terminemos haciendo una crítica que no le agrade, si captamos antes su interés resaltando aquello que pueda darle ánimo. Lo más recomendable es evitar atacar o defenderse del otro, lo que nos lleva a alejarnos del problema original.

Presta atención

Hay que revisar las frases antes de hablar y traducirlas siempre en positivo

Saber escuchar es una cualidad imprescindible en la vida matrimonial. Dejar de prestar atención a la persona con la que se convive esuno de los síntomas más claros de que el matrimonio está en una etapa de decadencia. Se trata de actuar de la forma en cómo nos gustaría que actuasen con nosotros, explica Orlov, por lo que estar siempre dispuesto a escuchar los problemas o reproches de la pareja es la mejor forma de que nos respeten cuando tengamos que hacerlo nosotros.

Evita el orgullo

Aunque uno se crea con la razón, es inútil exigir a la otra persona que se disculpe con nosotros porque cuando las cosas aún están calientes, si tiene un mínimo de orgullo propio, nunca reconocerá su culpabilidad. Es más, la situación puede derivar al típico tira y afloja del “y tú más”. Lo que aconseja lacoaches tratar de rebajar la tensión y volver al tema cuando la situación se haya calmado. Querer quedar por encima de la pareja nunca ayudará a resolver la situación en condiciones de igualdad.

Respeta su silencio por respuesta

Si se atosiga a alguien cuando está confundido tras una conversación, normalmente porque se le ha reprochado algo o se le ha dado un ultimátum, lo único que se conseguirá es que tome una mala decisión en caliente. Lo mejor es esperar, respetar su callada por respuesta y darle un tiempo para pensar.