La solución más práctica (y científica) a la duda de qué regalar en Navidad

Con las navidades a la vuelta de la esquina, la tradicional compra de regalos puede llegar a quitarle el sueño a más de uno. Si acertar con el presente perfecto para una persona ya es casi imposible, cuando tenemos que hacer múltiples regalos esta tarea se vuelve una auténtica quimera. Sin embargo, una investigación psicológica publicada en el Journal of Consumer Researchparece haber dado con la solución para evitar las caras largas de los agasajados, al tiempo que nos ahorrará tiempo y, sobre todo, muchos quebraderos de cabeza: dar el mismo regalo a todo el mundo. Además, e independientemente de la disponibilidad económica, existe unamultitud de factoresde tipo psicológicoque nos impiden hacer el regalo perfecto.

Los autores de la investigación llegaron a esta conclusión después de haber llevado a cabo seis experimentos diferentes con un grupo de voluntarios y el resultado fue siempre el mismo: cuando sólo tenían que hacer un regalo elegían el más atractivo, pero cuando debían hacer varios se centraban más en buscar artículos diferentes y las posibilidades de acertar disminuían.

Los regalos individuales muestran un mayor conocimiento de la personalidad del destinatario, pero sin son varias personas acabamos comprando artículos poco idóneos

Las psicólogas María Steffel de la Universidad de Cincinnati y Robyn A. Le Boeuf de la Universidad de Florida explican en las conclusiones que “los compradores tienden a pasar por alto la idoneidad del regalo cuando tienen que hacer varios para centrarse en elegir artículos que difieran lo más posible unos de otros”. Así, por ejemplo, siendo conscientes de que el regalo ideal para un padre y un hermano es una suscripción a su revista de fútbol favorita, la elección final será regalarle a uno la suscripción de una revista tecnológica y al otro una de coches.

Menos preocupaciones y más posibilidad de acierto

Esta peculiar investigación titulada Overindividuation in Gift Giving, también llega a la conclusión de que los agasajados se sienten tanto o más agradecidos si reciben el mismo presente que el resto de la familia, lo que pone en entredicho la obsesión por hacer regalos personalizados y lo más diferentes que se pueda. En otras palabras, muchas veces la familia o los amigos tienen intereses y gustos compartidos, por lo que será más fácil acertar con un regalo único que buscar varios, aseguran. De este modo se evitarán posibles celos y se ahorrará la preocupación por si alguien se siente discriminado al considerar que ha recibido un regalo menor.

Los experimentos que se detallan en el estudio muestran que hasta las personas más detallistas erraban más a medida que se incrementaba el número de regalos que debían comprar. “Puede parecer una mejor decisión dar regalos individuales porque transmiten un mayor conocimiento de la personalidad del destinatario, pero casi todo el mundo acaba por regalar cosas poco útiles cuando hay múltiples destinatarios”.

Por si estas conclusiones fuesen pocas para tratar de cambiar nuestra política de regalos, el estudio también encontró que la mayoría de personas tienden a subestimar el dinero invertido en el presente. Unos resultados que, conocidos en las vísperas de la Navidad, pondrán las cosas más fáciles de lo que nunca antes podríamos haber imaginado. Eso sí, romper el hielo de la primera vez no será fácil.