Menos hijos, menos matrimonios, menos dinero: ¿cuidamos de verdad a las familias?

La ministra de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad anunció ayer que el Gobierno pretende que las familias numerosas no dejen de serlo hasta que el último de los hijos cumpla la edad límite establecida de 21 años, ampliable a los 26 si es estudiante,para que todos los descendientes tengan las mismas oportunidades. Una propuesta quenace fruto de la situación que viven muchos hogares por la crisis y por la tasa de paro juvenil que alcanza el 57 por ciento. Y es que las familias españolas están sufriendo cada vez más los efectos de la crisis. Los ingresos medios de los hogares se han reducido en 2.000 euros al año y tienen un "alto grado" de endeudamiento, fundamentalmente, por la compra de la vivienda, que supone casi el 60 por ciento de las deudas, según de las conclusiones del estudio "Análisis de los comportamientos socioeconómicos de las familias en España", que ha elaborado la ONG Acción Familiar.

Una realidad que está provocandouna emancipación cada más tardíaque, de seguir así, afectará estructuralmente al país,frenando las posibilidades de los jóvenes para formar una familia.El estudio tiene como objetivo evaluar cómo afecta la crisis económica a las familias y refleja, también, cómo ha cambiado la población española a lo largo de la última década, qué ha ocurrido con las pensiones, a la par que insiste en que la violencia machista se debe tener en cuenta a la hora de medir la calidad de vida de los hogares. Un fenómeno que,sin la intervención estatal y el mantenimiento del estado del bienestar, podría provocar graves disfunciones en la sociedadespañola, provocando que la pirámide poblacional siga invirtiéndose a pasos de gigante.

En la síntesis del informe, Acción Familiar resalta quehay "importantes" diferencias de renta entre las comunidades autónomasde forma que, por ejemplo, una familia extremeña ingresa cerca de 11.000 euros menos que una navarra. En cuando al actual sistema de pensiones, la ONG señala que es un instrumento no solo asegurador sino, ante todo, retributivo, "que en manos de las familias duplica sus efectos y utilidad" de forma que constituye una red de protección en los hogares.

Una de cada diez familias tiene a todos sus miembros en paro

Ser madre es una causa de discriminación no solo por el hecho de ser mujer sino precisamente por tener hijos

La reducción de los ingresos de las familias por la crisis se agrava con el nivel de endeudamiento, ya que el hogar que tiene deudas dedica alrededor del 20 por ciento de su renta bruta al pago. Según la ONG, el 20,84 por ciento de las familias tienen, al menos, a la mitad de sus miembros activos en paro y el 10,67 por ciento a todos ellos.

En el caso de las mujeres casadas la tasa es cerca de cinco puntos más alta que la de los casados y el informe constata que ser madre es "una causa de discriminación" no solo por el hecho de ser mujer sino precisamente por tener hijos."Tener hijos tiene un coste monetario importante, pero sobre todo un coste de oportunidad para las mujeres", resalta el informe, que recuerda, por otra parte, que desde 1996 hasta 2012 la población española ha crecido gracias a la inmigración, si bien la tendencia se ha invertido.

El informe destaca el envejecimiento de la población española porel descenso de nacimientos y el aumento de la esperanza de vida, que se sitúa, prosigue la ONG, en los 82 años. Recoge, asimismo, la disminución de los matrimonios en las últimas dos décadas, indica que el 60 por ciento de los enlaces en la actualidad son por lo civil y que el número de divorcios se ha incrementado "considerablemente" en los últimos diez años, aunque este aumento se ha frenado por la crisis.

A juicio de la Acción Familiar,los hogares más habituales son los formados por una pareja sin hijosy han aumentado las familias con un único progenitor "lo que tiene consecuencias educativas". Por todo ello, la ONG estima necesario la aprobación de un Plan de Familia que cuente como objetivos prioritarios el reconocimiento y valoración de la familia "como institución necesaria" para la estabilidad y la cohesión social y el apoyarla en el cumplimiento de sus funciones "de las que se beneficia toda la sociedad".