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Las diez curiosidades que no conoces de la saga ‘Alien’
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Las diez curiosidades que no conoces de la saga ‘Alien’

Este viernes se estrena en los cines españoles Prometheus, después de meses de expectación. La esperada precuela de la saga Alien ha significado el retorno a

Foto: Las diez curiosidades que no conoces de la saga ‘Alien’
Las diez curiosidades que no conoces de la saga ‘Alien’

Este viernes se estrena en los cines españoles Prometheus, después de meses de expectación. La esperada precuela de la saga Alien ha significado el retorno a la franquicia, más de 30 años después, de su primer director, Ridley Scott. Aunque en un primer momento el veterano director británico eligiese al director de publicidad Carl Erik Rinsch para encargarse de la nueva entrega de la serie, las presiones de la 20th Century Fox le han llevado a retornar al terreno de la ciencia-ficción, treinta años después de Blade Runner (1982). Junto a él se encuentra Damon Lindelof, creador y responsable de la célebre serie Perdidos (Lost, 2004-2010), que ha sido el encargado de realizar la última revisión del guión escrito originalmente por John Spaihts. Pero este no es el único baile de nombres que se ha producido en una saga que se ha visto habitualmente envuelta por la polémica entre productores y directores.

–Roger Corman estuvo a punto de dirigir la primera parte.

El responsable de gran parte de las series B de los años sesenta, entre ellas un gran número de adaptaciones de Edgar Allan Poe, estuvo a punto de dirigir la primera entrega de la serie. No era un buen momento para el director, que desde 1971, cuando realizó El barón rojo (Von Richthofen and Brown), no se había encargado de ninguna película. El guión de Ron Shusett y Dan O’Bannon interesó profundamente al autor de La máscara de la muerte roja (The Masque of the Red Death, 1964), pero cuando el estudio de Walter Hill realizó una oferta mayor por el texto original, el proyecto terminó en manos de la 20th Century Fox.

–Los diseños de H.R. Giger fueron alterados por su explícita sexualidad.

Pocos diseños han sido tan mitificados en la historia del cine como los realizados por el suizo H.R. Giger para la primera parte de la saga, pero lo que pocos saben es que nunca llegaron a convencer a los productores, que los consideraron tenebrosos y macabros. Por ello pusieron como condición que Giger rebajase el nivel del contenido sexual de sus dibujos para la película, un signo característico de la obra de su autor.

–Los aliens se reproducen como los pompílidos.

El guionista Dan O’Bannon ha manifestado en más de una ocasión cómo el proceso de reproducción de los pompílidos (avispas de las arañas) le provocó más de un mal sueño, por lo que decidió utilizarlo para su gran creación. Este animal deposita sus huevos encima de su presa –los bracónidos lo llegan a hacer dentro de otros insectos–, que queda paralizada mientras la cría se alimenta de su hemolinfa sin que el animal parasitado llegue a morir. Cuando la cría nace y se separa del cuerpo, la presa muere, tal y como ocurría en la película.

–En la escena del nacimiento del alien, sólo John Hurt sabía lo que iba a ocurrir.

Aunque esta secuencia se ha mitificado hasta la saciedad –se ha llegado a afirmar que toda la escena fue improvisada–, la realidad es que los actores contaron con ciertas pautas sobre lo que ocurriría. Tan sólo John Hurt (que daba vida al humano parasitado por el alien) conocía en profundidad los efectos especiales que se iban a emplear. Por ejemplo, Veronica Cartwright, que daba vida a Lambert, no sabía que iba a ser rociada con sangre (falsa).

–James Horner se autoplagió en la banda sonora de Aliens: el regreso.

James Cameron encargó con tan poca antelación al compositor la banda sonora de la segunda entrega de la serie, Aliens: el regreso (1986), que este se vio obligado a reelaborar parte de sus partituras para Star Trek II: La ira de Khan (Nicholas Meyer, 1982) y Star Trek III. En busca de Spock (Leonard Nimoy, 1984). Las tensiones durante la posproducción de la película fueron tan fuertes que Horner consideró que jamás volvería a trabajar con el responsable de Terminator (1984). Sin embargo, Titanic (1997) los volvió a reunir y Horner volvió a colaborar con Cameron en Avatar (2009).

–James Cameron rechazó la participación de H.R. Giger en la segunda parte.

La película original de Ridley Scott se encontraba tan definida por la estética creada por el artista suizo que James Cameron no quiso que su visión sobre el alienígena más famoso de todos los tiempos, con permiso de E.T., fuese eclipsada por la personalidad de Giger, por lo que decidió prescindir de él en la segunda parte. En una carta enviada a su agente, Cameron pedía perdón a Giger, alegando que “sintió que podría sentirse abrumado por él”.

–David Fincher reniega de Alien 3 (1992).

Aunque significó su debut en el largometraje, el autor de Se7en (1997) o La red social (The Social Network, 2010) siempre ha renegado de su participación en la tercera parte de la saga alienígena. Tras una serie de problemas con 20th Century Fox concernientes al guión y al presupuesto, Fincher se sintió poco respaldado por los responsables económicos de la película y se desentendió de la película justo antes de comenzar el montaje.

–Renny Harlin fue candidato a dirigir la tercera parte.

A finales de los años ochenta, Harlin era otro principiante en la industria de Hollywood, y la tercera parte de la saga podría haber significado su gran salto. Harlin trabajó con un guión realizado por el escritor de ciencia-ficción y padre del cyberpunk William Gibson, que en alguna ocasión ha señalado que se encontraba influido por la película de Andrei Tarkovsky Solaris (1972). Los productores no quedaron contentos con el texto de Gibson, por lo que pidieron a Eric Red que lo reescribiese, momento que Harlin aprovechó para abandonar el proyecto y centrarse en lo que sería su obra más célebre, La jungla 2: alerta roja (Die Hard II, 1989).

–Jean-Pierre Jeunet casi no sabía hablar inglés cuando dirigió la cuarta parte.

El director de Amélie (2001) se enfrentó a su primera producción internacional sin su hasta entonces inseparable compañero Marc Caro y sin saber expresarse correctamente en inglés. Por ello, necesitó un equipo de traductores que le apoyasen durante el rodaje. Alien: Resurrección (1997) fue el resultado de trasladar el universo de Jeunet a una saga con un personalidad muy marcada, y aunque el choque entre ambos mundos no dejase a todos satisfechos, el largometraje sigue siendo por ahora el último episodio (cronológicamente hablando) de la saga.

–El guionista de la cuarta entrega es Joss Whedon, director de Los vengadores (The Avengers, 2012) y creador de Buffy Cazavampiros y Angel.

Esta primavera ha sido la del gran éxito internacional de Joss Whedon, carismático guionista estadounidense que se encuentra detrás de algunas de las creaciones fantásticas más divertidas de los últimos veinte años. Whedon llegó a escribir cinco versiones del guión, y nunca quedó satisfecho con la adaptación que Jeunet y su equipo realizó de su texto. En una entrevista de 2005 manifestó que “el problema no es que cambiasen cosas, el problema es que lo hicieron todo mal”.

Este viernes se estrena en los cines españoles Prometheus, después de meses de expectación. La esperada precuela de la saga Alien ha significado el retorno a la franquicia, más de 30 años después, de su primer director, Ridley Scott. Aunque en un primer momento el veterano director británico eligiese al director de publicidad Carl Erik Rinsch para encargarse de la nueva entrega de la serie, las presiones de la 20th Century Fox le han llevado a retornar al terreno de la ciencia-ficción, treinta años después de Blade Runner (1982). Junto a él se encuentra Damon Lindelof, creador y responsable de la célebre serie Perdidos (Lost, 2004-2010), que ha sido el encargado de realizar la última revisión del guión escrito originalmente por John Spaihts. Pero este no es el único baile de nombres que se ha producido en una saga que se ha visto habitualmente envuelta por la polémica entre productores y directores.