La importancia de hablar del VIH, porque no ha desaparecido, porque los jóvenes lo ven lejano

La cercanía de las celebraciones del Orgullo gay (el primer fin de semana de julio, en Madrid) y el desafortunado 30 aniversario de los primeros casos de Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH) son una estupenda coincidencia para recordar, una vez más, que la epidemia de Sida no ha desaparecido, no ha sido erradicada, y hay que seguir luchando contra ella.

Y hay que hacerlo especialmente en un colectivo concreto: el de los hombres que mantienen relaciones sexuales con otros hombres, porque, a pesar del descenso general de afectados desde hace años, parece ser que los jóvenes de hoy en día, menos familiarizados con el VIH, lejanos a la enfermedad y confiados con los avances médicos, no son tan prudentes como deberían. De hecho, el 12,4% de los nuevos casos diagnosticados de VIH corresponden a hombres homosexuales menores de 25 años, un dato “preocupante” en palabras de la ministra de Sanidad e Igualdad, Leire Pajín. “Tenemos la sensación de que se ha bajado la guardia, y por eso queremos redoblar los esfuerzos”, explicaba la ministra sobre la prevención del síndrome.

Pajín presentó esta semana la campaña ‘De hombre a hombre, habla del VIH’, una iniciativa que pretende  fomentar una mayor comunicación entre este colectivo y prevenir mejor el VIH y otras infecciones de transmisión sexual. Según los datos ofrecidos por la ministra, la transmisión del sida entre hombres que mantienen relaciones sexuales con otros es la más numerosa, con un 42,5% de los casos, seguida de la vía heterosexual, con un 34,5%, en tanto que la que se produce entre usuarios de drogas inyectadas es de un 8,1%.

El vídeo promocional de la campaña reza: “existe algo más fuerte que el VIH que también se transmite de persona a persona: las palabras” y con él sus protagonistas pretenden concienciar sobre la inmensa necesidad de hablar del síndrome sin vergüenza, sin tapujos y sin prejuicios.

Uno de ellos es Iñigo Lamarca, homosexual, activista del colectivo LGTB (Lesbianas, Gays, Transexuales y Bisexuales), y Defensor del Pueblo en el País Vasco, quien considera que “lo que está en juego es el derecho a la salud”. En su opinión, todas las personas que mantengan relaciones sexuales deberían “comportarse como si todos fuéramos seropositivos” a la hora de tomar precauciones ya que hay muchos infectados que ignoran que lo están.

La OMS también se centra en los hombres homosexuales

Por su parte, la Organización Mundial de la Salud (OMS) esta misma semana se ha fijado, en el colectivo de hombres que mantienen relaciones sexuales con otros hombres y ha publicado un informe que pretende prevenir los contagios. Con motivo del 30 aniversario de los primeros casos, que se dieron entre varones homosexuales en San Francisco (EEUU), la OMS ha hecho hincapié en una cifra: estos hombres tienen hasta 19,3 veces más posibilidades de infectarse de VIH que el resto de la población.

Las recomendaciones recogidas en el informe van dirigidas a los políticos, al personal sanitario para asegurar la correcta atención médica a los contagiados y al colectivo homosexual y transexual para fomentar la prevención, usando siempre preservativo.

Además del impulso de políticas educativas y de integración, la OMS pide al personal sanitario de todos los países que ofrezcan pruebas y orientación sobre la infección y faciliten tratamiento a los pacientes con menos de 350 linfocitos CD4.

Cabe referirse también las situaciones más dramáticas del VIH en el mundo. La OMS recuerda que en muchos países estos colectivos están estigmatizados, lo que determina que estas personas no acudan a los servicios de atención médica a recibir tratamiento por miedo a ser humillados o acosados y que se rompa la confidencialidad médico-paciente.

Más de 75 países criminalizan en la actualidad a los homosexuales y transexuales, privándoles de derechos fundamentales, como la atención médica.

Según los datos por regiones, la prevalencia de infecciones de VIH entre homosexuales en el África Subsahariana oscila entre el 6 y el 31%, mientras que en Asia los homosexuales presentan dieciocho veces más probabilidades de contraer el VIH que la población en general. En Latinoamérica, alrededor de la mitad de los contagios de VIH se producen entre homosexuales.