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¿Exceso de sudoración? La hiperhidrosis tiene tratamiento
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BÓTOX Y CIRGUÍA PARA LOS CASOS MÁS GRAVES,

¿Exceso de sudoración? La hiperhidrosis tiene tratamiento

La sudoración es incómoda para todo el mundo, pero cuando es excesiva (hiperhidrosis) se convierte no sólo en una enfermedad, si no en un impedimento para

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¿Exceso de sudoración? La hiperhidrosis tiene tratamiento

La sudoración es incómoda para todo el mundo, pero cuando es excesiva (hiperhidrosis) se convierte no sólo en una enfermedad, si no en un impedimento para la vida cotidiana. Quienes sufren de hiperhidrosis, un síntoma que además se da de forma impredecible (no siempre tiene que ver con el calor o los nervios) en manos, pies axilas e incluso en el rostro, lo tienen difícil para desarrollar actividades tan simples como teclear el ordenador.

Además de eso el hecho de sudar de forma continua y en grandes cantidades supone para quienes lo padecen problemas emocionales y psicológicos que condicionan su comportamiento.

La hiperhidrosis, que en algunos casos responde a factores genéticos, puede manifestarse o bien en una sola zona del cuerpo (hiperhidrosis focal) o en muchas a la vez (generalizada). Siguiendo otros criterios también puede ser clasificada como hiperhidrosis primaria idiopática o  hiperhidrosis secundaria. La primera, que es la que se trasmite genéticamente, está relacionada con problemas en el sistema nervioso simpático, y la segunda se da como consecuencia de otra enfermedad como el cáncer o la menopausia.

Afortunadamente, la hiperhidrosis se puede tratar. Existen multitud de opciones en función de su gravedad y de las características del paciente, desde las más simples (como usar desodorantes potentes) hasta la cirugía (simpatectomía torácica endoscópica o STE).

El STE es, como explica el doctor José Revuelta Mirones a El Confidencial, una intervención “fácil” y “poco agresiva” que consiste, de forma simplificada, en “desconectar un ganglio del nervio simpático”, es decir, en ‘cerrar’ la señal que le ordena al cuerpo sudar excesivamente.

Aún así Revuelta, que es pionero en España en aplicar esta técnica y que lleva ya más de 1.000 intervenciones realizadas, advierte de que esta solución no funciona cuando la sudoración se da en los pies, algo bastante incómodo porque por ejemplo provoca, como explica el doctor “que se resbalen los zapatos”.

Sin embargo, el STE sólo se aplica en los casos más extremos de hiperhidrosis. Para un grado intermedio hay aún otros remedios como el de inyectarse toxina botulínica purificada (bótox), algo útil para el verano ya que bloquea los nervios que estimulan la sudoración durante un tiempo que ronda los tres meses.

Otra opción es la iontoforesis, un procedimiento que utiliza electricidad para cerrar temporalmente la glándula sudorípara y que se aplica en sesiones de unos 20 minutos, aunque puede provocar agrietamiento de la piel y ampollas.

Además ciertos medicamentos, los llamados anticolinérgicos, ayudan a prevenir la estimulación de las glándulas sudoríparas, pero aunque son efectivos con algunos pacientes, no han sido estudiados tan bien como otros tratamientos y tienen algunos efectos como: boca reseca, mareo y problemas con la micción. Por su parte, los betabloqueadores o las benzodiacepinas, ayudan a reducir la sudoración relacionada con el estrés.

Por supuesto más allá de los tratamientos citados quienes sufran hiperhidrosis pueden tomar ciertas medidas preventivas tales como evitar el consumo de alcohol y de alimentos picantes, evitar el uso de prendas de nylon o muy ajustadas, usar siempre calcetines, evitar el calzado sintético y optar por prendas blancas o negras para disimular las manchas ocasionadas por el sudor.

La sudoración es incómoda para todo el mundo, pero cuando es excesiva (hiperhidrosis) se convierte no sólo en una enfermedad, si no en un impedimento para la vida cotidiana. Quienes sufren de hiperhidrosis, un síntoma que además se da de forma impredecible (no siempre tiene que ver con el calor o los nervios) en manos, pies axilas e incluso en el rostro, lo tienen difícil para desarrollar actividades tan simples como teclear el ordenador.