Ojo con las medusas, 70.000 picaduras el año pasado

Unas 70.000 personas fueron atendidas el pasado año en las playas españolas por picaduras de medusas, unos animales que al rozar la piel humana la reconocen como posible presa y disparan sobre ella unas células urticantes que inyectan un veneno que provoca un intenso picor y dolor y que en ocasiones puede provocar la muerte. Para proteger la piel frente a las picaduras de estos invertebrados, de los que existen más de 9.000 especies conocidas, cinco de las cuales predominan en el mar mediterráneo, el laboratorio ISDIN comercializa un fotoprotector especial que desactiva el proceso de las picaduras.

El producto fue presentado en l'Oceanográfic de Valencia, donde varias personas, entre ellas algunos periodistas, introdujeron su brazo en una pecera llena de medusas media hora después de haberse aplicado el producto y no sufrieron picaduras a pesar de tocar a estos invertebrados. El biólogo y conservador de peces e Invertebrados de l'Oceanográfic, Mario Roche, explicó en rueda de prensa que las medusas se reproducen de forma masiva cuando los pólipos de los que proceden "no están agusto y se estresan" debido a cambios bruscos de temperatura o en la alimentación.

Roche señaló que en los meses de verano la temperatura del mar aumenta hasta los 26-27 grados y este incremento, junto a la disminución de depredadores naturales de las medusas, como tortugas, atunes o sardinas, hace que se aumente de forma masiva el número de estos invertebrados. Según indicó el biólogo, las últimas mediciones que se están realizando en el mar mediterráneo indican que las temperaturas son "ligeramente inferiores a las del pasado año", en el que se registraron más de 30 grados.

El farmacéutico del laboratorio que comercializa el producto Josep Montero indicó que la fórmula de este producto, descubierta por un grupo de investigadores israelíes, contiene un extracto del plancton y surgió tras la observación del mecanismo de defensa que posee el Pez Payaso para camuflarse entre los tentáculos de la Anémona de Mar sin sufrir su picadura.

Efectos de la picadura

Montero señaló que el fotoprotector especial para medusas provoca que los tentáculos de la medusa resbalen sobre la piel haciendo que el contacto no sea suficiente, y desprende unos inhibidores que confunden los sensores de las células urticarias al creer que están tocando otra medusa. La picadura de medusa, que se introduce en la piel a una velocidad de 200 atmósferas, equivalente a la de una bala, suele producir dolor, intenso picor, eritema y habones urticariales.

En algunos casos puede evolucionar a ulceración y necrosis y en otros hacia la muerte por fallo respiratorio cardiocirculatorio, ahogamiento por shock neurógeno o a complicaciones anafilácticas. Por último, indicó que esta crema ha sido probada y es eficaz frente a las medusas que hay en el mar mediterráneo, y solo hay dos especies, que habitan en el Caribe, contra las que no produce efectos porque su picadura es mortal.