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La cara roja no es señal de salud sino síntoma de enfermedad
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La cara roja no es señal de salud sino síntoma de enfermedad

La cara roja no es, como se dice popularmente, señal de lozanía y buena salud, sino que en ocasiones puede ser síntoma de numerosas patologías, desde

La cara roja no es, como se dice popularmente, señal de lozanía y buena salud, sino que en ocasiones puede ser síntoma de numerosas patologías, desde algunas leves como la rosácea hasta enfermedades graves como varios tipos de cáncer. Así se puso de manifiesto en el XXXIII Congreso Nacional de Dermatología y Venereología, que se celebró en Salamanca bajo el epígrafe "La piel, imagen del interior" y en el que entre otras cuestiones se aborda el problema de la "cara roja".

Según el dermatólogo del Hospital Clínico de Salamanca Manuel Morán, "la cara roja es una manifestación que aparece en el rostro, fundamentalmente en forma de eritema o enrojecimiento, y que puede ir acompañado de otro tipo de lesiones dermatológicas con o sin picor". Esta coloración de la piel de la cara puede ser "un aviso de enfermedades sistémicas graves e incluso llegar a precederlas", advirtió el doctor, quien citó dolencias como el lupus o la dermatomiositis.

Además, la cara roja puede alertar de procesos tumorales como el síndrome carcinoide, el feocromocitoma o ser síntoma de linfomas cutáneos y otras enfermedades de la sangre.

Aunque la cara roja puede deberse a la constitución de la persona, y en esos casos no significa que se esté enfermo, el dermatólogo aconsejó acudir al médico para conocer su causa y así descartar posibles dolencias, e incluso atenuar el color rojizo por fines estéticos.

En ocasiones, la cara roja no es síntoma de enfermedades sistémicas, sino dermatológicas y muy frecuentes, como la rosácea, la dermatitis seborreica y atópica o la psoriasis, y también puede estar provocada por factores externos como alergias a cosméticos y medicamentos.

El elevado número de enfermedades y procesos asociados a la cara roja hace que no existan datos sobre su incidencia, y esta misma razón explica que no haya un tratamiento concreto, pues lo que se trata es la causa que la origina, precisó.

Por otro lado, apuntó que es importante diferenciar la cara roja asociada a alguna enfermedad del rubor que se produce en el rostro en situaciones de vergüenza, y que se debe a la dilatación de los vasos de la cara por el aumento del flujo sanguíneo.

Morán aconsejó, como cuidados básicos para la piel del rostro y la prevención de la cara roja, que se eviten los productos irritantes y el consumo excesivo de bebidas calientes y cafeína. Lavarse la cara con jabones sin perfume, aplicarse protección solar y emplear cremas que contengan extractos de plantas como ruscus, hammamelis y helianthus con otras de las recomendaciones de los dermatólogos.

La cara roja no es, como se dice popularmente, señal de lozanía y buena salud, sino que en ocasiones puede ser síntoma de numerosas patologías, desde algunas leves como la rosácea hasta enfermedades graves como varios tipos de cáncer. Así se puso de manifiesto en el XXXIII Congreso Nacional de Dermatología y Venereología, que se celebró en Salamanca bajo el epígrafe "La piel, imagen del interior" y en el que entre otras cuestiones se aborda el problema de la "cara roja".