El BdE da por finalizada la crisis inmobilaria tras un desplome de la vivienda del 44%

Tras siete años de agonía, el Banco de España se suma a los mensajes optimistas en torno a la recuperación inmobiliariayen su Informe Anual de 2014 da por finalizada una crisis queha dejado tras de sí un desplome de precios de las viviendas del 44% -en términos reales, es decir, descontando los efectos de la inflación- y una fuerte contracción de la actividad residencial, que ha pasado de representar un 68% del PIB a apenas un 4%.

Son varios los motivos en los que se apoya la autoridad monetaria para dar por zanjada la últimapesadilla inmobiliaria: el tímido repute de los visados de obra nueva y las compras de casas, por el lado de la oferta, así comola lento pero continua absorción del stock, por lo que respecta a la demanda.

"El descenso delprecio de la viviendatocó suelo en el primer trimestre del año pasado según el INE, incrementándose un 0,3% en el promedio anual, tras seis años de caída, y cerrando el año con una tasa interanual positiva, del 1,8%. La evolución de losprecios de la viviendaseñala asimismo comportamientos dispares por áreas geográficas, aunque al concluir el año prácticamente todas las Comunidades Autóomas participaban del incremento de los precios de la vivienda", señala el documento hecho público hoy.

No obstante, el Banco de España se muestra prudente ya que considera que larecuperaciónaún está rodeada de algunas incertidumbres, dadoel elevado volumen deviviendas sin vender, su distribución geográfica y las dudas respecto a la incidencia de la evolución demográfica sobre la demanda potencial devivienda. En este sentido señala que “los mayores desajustes entre oferta y demanda se concentran en las zonas costeras, donde se acumularon los mayores excesos durante la expansión".

Para el Banco de España "es difícil determinar en qué medida el cambio de tendencia observado se irá reflejando en unarecuperaciónsostenida de la actividad, dado el elevado volumen deviviendas sin vendery su particular distribución geográfica. Además, a medio plazo, existen dudas sobre la incidencia de los desarrollos demográficos sobre la demanda potencial de vivienda", recoge en su informe.

Lo cierto es que los últimos datos en torno al sector residencialinvitan al optimismo. Según los registradores, lasviviendas inscritasdurante el mes de abril repuntaron un 9,4%, mientras que los datos del INE muestra unaumento de los preciosen el primer trimestre del 1,5%, de tal manera que se acumula ya un año de subidas.

Preocupa el elevado número viviendas sin vender, su distribución geográfica y la recuperación de la demanda potencial de viviendas

El Banco de España constata además en su informe cómo tras sieteaños de contracción, la actividad del sector residencial ha reflejado pequeñas variaciones positivas desde comienzos del segundo trimestre del año pasado. No obstante, a pesar delcambio de tendencia, "la inversión en vivienda tuvo una contribución levemente negativa a la actividad en 2014, a gran distancia del nivel de detracción que ejerció durante la crisis".

Asimismo constata una mejoraenel volumen de las nuevas operaciones de crédito, con crecimientosdel 23% en el segmento de préstamos a hogares para adquisición de vivienda, si bien, señala quecabría esperar que los factores demográficos tiendan a reducir la demanda de financiación de los hogares.

"La caída de la población en los segmentos más jóvenes se traducirá, previsiblemente, en una reducción del número de solicitantes potenciales de préstamos, especialmente en el segmento de la financiación para la adquisición de vivienda, ya que la demanda de fondos de las familias se concentra en aquellas cuyo cabeza de familia es joven".

Y, de acuerdo con la Encuesta Financiera de las Familias de 2011, un 61% de los hogares que son propietarios de la vivienda en la que residen la adquirieron cuando el cabeza de familia tenía menos de 35 años.