Supervivientes inmobiliarios y bancos se codean en el palco del Bernabéu

 El pasado viernes arrancaba en Madrid, en el Palco de Honor del Santiago Bernabéu, la edición de invierno del SIMA, la cita inmobiliaria de la capital madrileña que, en los últimos años se ha convertido en un fiel reflejo de la realidad del mercado en España.

Y esta realidad muestra en la actualidad a un puñado de promotoras que intentan sobrevivir a la crisis, la práctica desaparición de las grandes compañías nacionales y la constante presencia de las nuevas inmobiliarias del país: los bancos.

El pinchazo de la burbuja inmobiliaria y el elevado endeudamiento que asumieron algunas empresas del sector han dejado tras de sí un importante reguero de inmobiliarias zombies a quienes la banca ha refinanciado en los últimos años pero que no podrán devolver su deuda y cuya actividad se ha visto reducida a la mínima expresión.

La banca ha asumido, a su pesar, su nuevo rol en el mercado inmobiliario español en el que convive con promotoras de menor tamaño y que, gracias a diferentes estrategias han conseguido mantenerse a flote y sacar adelante nuevas promociones. Algunas de ellas han estado en el SIMA y han explicado a El Confidencial cómo están consiguiendo salir adelante: autofinanciación o permuta de suelo con las entidades financieras a cambio de viviendas, son algunas de las claves. 

“En ferias como ésta se ve que todavía hay una parte del sector viva. La evolución de la demanda de compra de vivienda y la financiación determinarán cómo evolucionará el conjunto del sector y las empresas”, explica Rafael González-Cobos, presidente del Grupo Inmobiliario Ferrocarril.

Ausencia de endeudamiento y promoción en suelos de la banca

"Nosotros hemos sido un operador que hemos estado muy presentes en vivienda protegida y en la vivienda protegida de alquiler lo que ha permitido que la crisis nos afectara menos. No estábamos en compras de suelo pendiente de avanzar urbanísticamente. Teníamos suelo urbano y barato para VPO y la especulación del suelo nos ha pegado en menor medida que a otros operadores. Pero el cierre de la financiación bancaria nos ha llevado también a la fórmula de vivienda libre sobre suelo propiedad de la banca que son los que ahora tienen garantizada la financiación", añade. 

Precisamente la permuta de suelo ha sido otra de las fórmulas que han permitido a Vía Célere, otra de las pocas promotoras que puede presumir de estar construyendo viviendas nuevas en la Comunidad de Madrid. Con apenas dos años de vida -la compañía nació en 2010-, se perfila, según los expertos como otra de las superviviendas gracias, en gran medida a la ausencia de endeudamiento. 

"El sector inmobiliario está prácticamente quebrado", aseguraba su presidente, Juan Antonio Gómez-Pintado en una entrevista a idealista.com. "Es la situación real del mercado hoy en día pero también es cierto que se está formando la nueva base del sector inmobiliario del futuro. entre tanta noticia sobre concursos de acreedores creo que ya se empiezan a vislumbrar compañías con otro perfil y que serán las que participen en el futuro sector".

Entre la treintena de expositores de la feria también se encontraba Pryconsa. Una promotora y constructora con casi 50 años de experiencia en el mercado con ocho promociones actualmente en marcha en la Comunidad de Madrid. Su jefe de ventas, José Ramón Prol Zanón, consciente de las dificultades por las que atraviesa el sector cree que la crisis está provocando un cambio en el mapa inmobiliario. "Las empresas que puedan mantenerse y puedan subsistir a esta crisis estarán posicionadas cuando termine".

El salvavidas de la compañía ha sido su modelo de negocio. Un modelo que, por otra parte, es el que seguían la mayor parte de las inmobiliarias antes del boom. "Compramos el suelo al contado. Promovemos y construimos. En Pryconsa no se hipoteca ningún solar y nos autofinanciamos hasta la entrega de llaves cuando el  cliente pide su hipoteca y nos desembolsa el resto. Se puede construir sin necesidad de tener al banco detrás, a base de nuestras arcas y con lo que nuestros clientes van aportando. En principio, para sacar adelante los proyectos no necesitamos la financiación del banco". Tampoco su suelo. "La banca nos ha propuesto en varias ocasiones la permuta de suelo pero, o no llegamos a ponernos de acuerdo en cuanto a precio o no están donde queremos".

Altamira, CatalunyaCaixa...

Todas ellas han compartido en el SIMA espacio con algunas de las entidades financieras que se han mostrado más activas en sacar de sus balances el ladrillo heredado de promotoras y particulares: Altamira (Banco Santander) y CatalunyaCaixa Inmobiliaria. La filial inmobiliaria de la entidad que preside Emilio Botín ha acudido a la feria, entre otras promociones, con los últimos pisos que heredó de Francisco Hernando, El Pocero. 

Por su parte, la entidad catalana ha acudido con viviendas a estrenar y de segunda mano. Todas ellas con condiciones de financiación preferente, la gran arma que están utilizando los bancos para dar salida a sus inmuebles. 

CatalunyaCaixa ha sido una de las entidades más activas en cuanto a la limpieza de sus balances de activos inmobiliarios. Más de 7.600 inmuebles comercializados durante el año pasado (5.927 ventas y 1.747 alquileres) por valor de más de 1.300 millones de euros. Unas cifras que perfectamente podrían atribuirse a cualquier gran promotora española. El G-14, el lobby de las grandes inmobiliarias españolas, apenas vendió 900 viviendas entre enero y junio –últimos datos disponibles- y apenas cuenta con 1.700 viviendas en construcción.