Burla todas las medidas de seguridad de la Torre Eiffel y escala por ella sin arneses

Sin ningún tipo de arnés y esquivando cualquier tipo de impedimento. James Kingston consiguió subir hasta la cima de la Torre Eiffel parisina utilizando únicamente la habilidad de sus manos y pies. Dando esquinazo al personal de seguridad que vigila el monumento más famoso de Francia 24 horas al día, este joven escalador británico grabó en vídeo su trayecto hasta la zona más alta gracias a una cámara GoPro que llevaba instalada en su cabeza.

Después de ascender poniendo en riesgo su integridad física –podía haber caído al vacío en cualquier momento–, Kingston se entregó a las fuerzas del orden sin oponer ningún tipo de resistencia. La Policía francesa le llevó a comisaría, donde después de haberle preguntado los motivos de su temeraria acción se le puso en libertad con la única condición de que prometiera no volver a escalar la Torre Eiffel durante, al menos, tres años.

A pesar de que los hechos tuvieron lugar a finales de 2014, el joven –que tiene 25 años y reside en Southampton– publicó la grabación de su escalada el pasado 8 de noviembre en YouTube. Las mentes más privilegiadas recordarán que no es la primera vez que este británico salta a la fama. Hace dos años, Kingston se colgó de una grúa en su ciudad desafiando todas las leyes de la gravedad. A principios de 2015, el joven volvió a escalar un reconocible escenario: en esa ocasión, escaló el arco del londinense estadio de Wembley.

El pasado lunes, 'El Confidencial' se hacía eco de otra acción digna de película. El ruso Alexánder Chérnikov saltó al vacío desde un quinto piso en la ciudad de Novoaltaisk. Este deportista de riesgo registró su hazaña con el mismo sistema que Kingston –una cámara GoPro– y salió por su propio pie después de haberse lanzado sin ningún tipo de medida de seguridad. Una montaña de nieve hizo las veces de mullido colchón y el joven –que ya había saltado en otras ocasiones desde alturas similares o superiores– resultó ileso.