Visita a la bodega CVNE y cata de vinos: qué ver en Azofra

Decía Dante Alighieri que el vino sembraba poesía en los corazones. Quizá no estuviera desencaminado, pues los paisajes riojanos de los que nacen algunos de los caldos más afamados de España bien podrían inspirar mil y un libros de sonetos. Y es que esta región del país es la cuna donde se desarrollan las uvas que, con el paso del tiempo y la fermentación, provocan que los paladares se derritan al entrar en contacto con sus mimados jugos.

Para conocer de primera mano los trabajos enológicos de La Rioja, se pueden realizar excursiones a una de las bodegas de la Compañía Vinícola del Norte de España. Sus siglas –CVNE– han traspasado fronteras y se han convertido en un auténtico referente internacional, por lo que conocer sus secretos a través de una visita guiada por las instalaciones centenarias es una experiencia que no hay que dejar pasar.

Tan importante bodega alberga una impresionante nave de barricas cuyo artífice dejará tan impresionado al visitante como la propia contemplación del recinto. Allí, en la localidad riojana de Haro, descansa un espacio ideado por el célebre Gustave Eiffel que levantó la emblemática Torre Eiffel de París. Funcionalidad y estética se dan la mano en esta superficie sin columnas que permitió al ingeniero emplear todo el espacio disponible para la instalación de las barricas, sin tener que hacer frente a los obstáculos que supondrían los trabajos de trasiega y mantenimiento de las mismas en el caso de que las vigas se hubieran dispersado por su suelo.

Tras finalizar la visita guiada, los amantes del buen vino podrán disfrutar de una cata de algunos de sus caldos. De esta manera, su visita a La Rioja estará marcada por los matices del zumo de uva que ha conquistado a millones de personas a lo largo y ancho del planeta. La experiencia también es apta para niños, que conocerán parte de la cultura gastronómica de España gracias a los diferentes tipos de mostos sin alcohol que se les sirve durante la degustación de los vinos.

Podrá reposar la gran cantidad de conocimientos acumulados a lo largo del día en las cómodas habitaciones de un hotel cuyo precio está incluido en este plan. Ubicado en la localidad de Azofra, a tan solo 25 kilómetros de Haro, este establecimiento con encanto le servirá de 'campamento base' durante dos noches. Cada estancia tiene su propia esencia y el mobiliario ha sido importado desde diferentes países.