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Navidad en Suecia: casa de Papá Noel, viaje en trineo de perros y pesca en lagos helados
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cena, platos típicos y cohetes como manda la tradición

Navidad en Suecia: casa de Papá Noel, viaje en trineo de perros y pesca en lagos helados

Final de año es una época especialmente indicada para viajar al país nórdico. Allí nos esperan un sinfín de aventuras y momentos inolvidables

Foto: Un sami, rodeado de perros de nieve y un reno (Foto: Eduardo Miola)
Un sami, rodeado de perros de nieve y un reno (Foto: Eduardo Miola)

Cuando nos queramos dar cuenta, las navidades se nos habrán echado encima: estaremos comiendo turrón, escucharemos villancicos y los niños de San Ildefonso repartirán suerte en el sorteo de lotería más famoso del invierno. Todo muy tradicional pero nada llamativo ni original para los que pretendan decir adiós a 2016 de una manera diferente. Para los más atrevidos, viajar a un destino de frío como Suecia y contemplar la nieve en su máximo esplendor se convierte en una opción ideal.

Existen viajes programados que el mismo 29 de diciembre trasladan a los turistas hasta Skellefteå, una ciudad situada al noreste del citado país escandinavo. Allí se alojarán en Stiftsgården, una preciosa residencia fechada en el siglo XVI decorada con inspiración noreuropea y muebles de madera elaborados por una empresa local. Levantado sobre antiguas tierras de pastoreo de renos lapones, este enclave de descanso para turistas será el punto de partida al día siguiente para explorar impresionantes bosques de tundra camino a Svansele.

Allí, grandes y pequeños disfrutarán como nunca visitando la casa donde Papá Noel reside en Suecia —la más conocida está en Finlandia—. Un trineo tirado por perros nos acercará hasta la morada de este gordinflón de mejillas rosadas que tantas alegrías trae a los que se portan bien durante el resto del año. La señora Noel será la encargada de hacernos recuperar fuerzas gracias a una bebida caliente que nos servirá mientras escuchamos historias de magia y regalos.

Prepararás 'pepparkakor', unas galletas típicas de la zona con sabor a canela y jengibre

Para no retrasar las arduas tareas de Santa Claus, los turistas abandonarán su hogar y se encaminarán a Lantliv Lodge, en la ciudad de Osterjorn. Esta antigua edificación data del siglo XIX y es una de las construcciones destacadas del casco antiguo de la urbe —algunas de las cenas programadas en las excursiones se realizan en este alojamiento—. Especial encanto tiene la experiencia de elaborar 'pepparkakor', unas galletas típicas de la zona con sabor a canela y jengibre que terminarán en el estómago de sus creadores antes de salir camino al ya conocido hotel de Stiftsgården para cenar.

Planes inolvidables para Nochevieja

El último día del año estará cargado de buenos momentos: desde una visita a la iglesia más grande de Suecia hasta la ciudad de granjeros de Bonsstan, pasando por una degustación de bebida caliente y aperitivo para reponer fuerzas antes de conocer a un representante de la etnia de los sami. Tras adentrarnos en la cultura de este pueblo lapón —con bandera propia que simboliza el sol, el cielo, los árboles y el fuego con sus colores amarillo, azul, verde y rojo, respectivamente—, conduciremos a través de paisajes donde los alces, los wolverines, los zorros árticos o los renos saldrán a nuestro encuentro.

En la Nochevieja de Suecia, la tradición manda lanzar cohetes en todas las casas después de cenar tres platos típicos. Entre ellos, no pueden faltar ingredientes como el cordero, la trucha, el salmón, el reno o incluso el alce seco 'cocinado' como si de mojama se tratase. Ya en 2017, los turistas viajarán hasta la aldea de Osterjeim, donde lo más llamativo será pescar como antaño lo hacían los pobladores originales: haciendo un agujero en mitad de un lago congelado para poder introducir el sedal por él. Las truchas árticas no podrán resistirse a los cebos y 'caerán en las redes' sin remedio. Anímate a presumir de navidades con este plan.

Cuando nos queramos dar cuenta, las navidades se nos habrán echado encima: estaremos comiendo turrón, escucharemos villancicos y los niños de San Ildefonso repartirán suerte en el sorteo de lotería más famoso del invierno. Todo muy tradicional pero nada llamativo ni original para los que pretendan decir adiós a 2016 de una manera diferente. Para los más atrevidos, viajar a un destino de frío como Suecia y contemplar la nieve en su máximo esplendor se convierte en una opción ideal.

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