El exingeniero de la NASA que fascina a millones de personas con inventos caseros

Un hombre aparece en la pantalla con una pistola de agua. De repente, cansado de la poca potencia que tiene el juguete, decide montar el mismo artefacto pero 10 veces más grande. Es, de hecho, la pistola de agua más grande del mundo capaz de escupir agua a 437 kilómetros por hora. Empieza a destrozar todo tipo de objetos y, logicamente, el vídeo se hace viral. Aunque todo parece la típica idea de vídeo de youtuber, lo cierto es que la historia de este inventor es mucho más grande de lo que crees.

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Cristina Sánchez

El creador del vídeo, que lleva ya casi un millón y medio de visualizaciones, es Mark Rober, un ex ingeniero de la NASA que ha creado uno de los canales más interesantes de la red. Pero sus dos millones de seguidores y sus vídeos con más de 90 millones de visualizaciones no son lo único que lo avalan.

Rober, nacido en California, entró a trabajar en la agencia espacial estadounidense en 2004, con solo 24 años. Apenas dos años después, la agencia ya le había dado un puesto clave para trabajar en uno de sus proyectos más ambiciosos de los últimos años: enviar el Rover Curiosity a Marte. Estuvo hasta 2013 colaborando con la NASA pero, después de casi una década, decidió que necesitaba un cambio. “Fui a Londres, vi el London Eye y pensé: ‘qué estoy haciendo en el mundo’”, explicó el ingeniero a la revista Wired ya en el 2011.

En ese momento, frente a una de las atracciones de la capital inglesa, decidió que la NASA no le daba todo lo que buscaba y empezó una carrera de 'inventor' que le ha acabado convirtiendo en una peculiar estrella de YouTube. Alquien que mezcla ciencia, ingeniería y diseño en vídeos condenadamente entretenidos. Solo tardó unos meses en descubrir su nuevo camino; en octubre del 2011 colgó su primer vídeo todo cambió para él.

La aplicación que le cambió la vida

Con un par de amigos creó una sencilla aplicación que consistía en unir las dos cámaras de dos iPads para crear una ilusión óptica haciendo creer que tenía un agujero en el estómago. La idea era que la 'app' ayudase a la gente a crear un disfraz original y barato para Halloween, pero su fama hizo que fuera mucho más allá. El vídeo consiguió un millón y medio de visualizaciones en solo un día y fue uno de los fenómenos de Halloween ese mismo año.

La aplicación por su parte se hizo tan famosa que en 2013 ya 250.000 personas se la habían descargado. Según Rober, solo tres semanas después de que lanzaran la 'app', su empresa, Digital Dudz la cual montó con sus amigos para desarrollar su invento, ya llevaba ganado un cuarto de millón de dólares. Y eso que no tenían ningún tipo de publicidad, solo los vídeos que el inventor colgaba.

Con estos datos, una de las empresas de disfraces más grande del mundo, Morphsuists, se fijó en la idea y compró su compañía. El ingeniero dejó la NASA de forma definitiva y empezó a dedicarse completamente a su nuevo proyecto, creando incluso trajes para películas de Disney.

Tras el éxito de sus primeros vídeos, Rober se lanzó a la piscina y empezó a hace todo tipo de experimentos. Y lo mejor: a explicarlos para que todo el que quisiera pudiera intentar hacerlo en casa.

Enseñó a todo Internet, por ejemplo, cómo montar (comprando todos los materiales en Amazon) una futurista mesa iluminada con LEDs en los bordes, parecida a la que él usaba para presentar sus inventos en todo tipo de eventos. Siempre mezclando algo de humor, ciencia y mucha imaginación.

Sus experimentos gustaban cada vez a más gente, y sus soluciones tanto científicas como caseras convertían su canal en un lugar muy interesante para coger ideas. Que te apetecía alguna locura con bolas, luces y figuras, pues Mark te contaba cómo hacerlo.

Otro: con unos globos, un simple dibujo y una estructura de metales ligeros construyó un Super Mario flotante que dejó alucinados hasta a los policías de la ciudad. Pero, pese a sus curradas construcciones y sus geniales consejos, lo cierto es que lo que le mandó al estrellato de internet fue algo de lo más sencillo y divertido.

Fama mundial por vaciar una sandía

En 2013 llegó otro de esos hits en forma de invento casero instantáneo que tanto fascinanan a Internet. ¿Cómo hacer un granizado de sandía (natural) en solo dos minutos? Con un simple taladro y un poco de mañana, listo:

Aquel vídeo fue tan bien (16 millones de visitas) que un par de años más tarde lanzó otro descubriendo a internet un truco tan sencillo como viral. Peló una sandía, metió todo su interior en una nueva cáscara vacía y ¡boom! más de 91 millones de visitas a día de hoy.

Aún no ha sacado una tercera parte, pero todo apunta a que su último vídeo lleva un camino similar al de estos dos. Su nueva pistola seguro que, además de destrozarle la casa, llega muy lejos. Y, si no, siempre nos quedarán su otros inventos, como este vídeo (debajo) sobre cómo crear claxons para el coche con sonidos personalizados (y mucho más amables). Ideas de la NASA al servicio del pueblo.