Es noticia
Probamos el Xiaomi Mi Mix: este increíble móvil viene del futuro y es todo pantalla
  1. Tecnología
¡Mira esa pantalla!

Probamos el Xiaomi Mi Mix: este increíble móvil viene del futuro y es todo pantalla

¡Guau! ¡Joder! ¡La leche! ¡Ahí va la hostia! Cada cual puede elegir su exclamación preferida, pero es casi seguro que va a pronunciar alguna nada más ver el Xiaomi

Foto: El Xiaomi Mix: el 91% es todo pantalla. (Foto: Zigor Aldama)
El Xiaomi Mix: el 91% es todo pantalla. (Foto: Zigor Aldama)

¡Guau! ¡Joder! ¡La leche! ¡Ahí va la hostia! Cada cual puede elegir su exclamación preferida, pero es casi seguro que va a pronunciar alguna nada más ver el Xiaomi Mi Mix. Porque es el teléfono móvil que rompe moldes y que avanza lo que va a ser el futuro de los ‘smartphones’. De hecho, la marca china lo considera un ‘móvil conceptual’.

Y todo gracias a la gigantesca pantalla de 6,4 pulgadas que, sin embargo, encaja en un terminal apenas un poco más voluminoso que el iPhone 7 Plus, cuya pantalla es casi ¡una pulgada más pequeña! Así se entiende que muchos consideren que el Mix es lo que tendría que haber sido el último ‘smartphone’ de Apple. Comparado con el Huawei Mate 9, cuya pantalla es media pulgada inferior, su tamaño es casi idéntico —aunque algo más grueso y 19 gramos más pesado—.

Un diseño rompedor

El truco está en que en el frontal del Mi Mix la pantalla ocupa casi el 90% de la superficie. De esta forma, es lo más cercano a tener un móvil compuesto íntegramente por una pantalla sin marcos. Tanto el superior como los laterales son casi inexistentes, y solo queda una franja de un centímetro de grosor en la parte inferior, que es donde se ubica también la cámara anterior —de los selfis—.

Todo ello envuelto en un cuerpo de cerámica negra que convierte el aparato en un elegante bloque negro cuya parte trasera es casi un espejo. Eso sí, resbala peligrosamente y es un imán para la grasa de los dedos. Afortunadamente, Xiaomi incluye una carcasa negra de cuero que no hace sino potenciar la elegancia del conjunto.

Lógicamente, este diseño rompedor firmado por el francés Philippe Starck ha requerido de varias innovaciones tecnológicas. La más llamativa es la que permite escuchar al interlocutor de las llamadas —y bastante bien, además— sin tener un altavoz.

La marca explica que utiliza el propio cuerpo cerámico del terminal para canalizar el sonido, lo cual permite escuchar las conversaciones utilizando cualquier cara del móvil. Un sensor ultrasónico detecta cuando nuestra cara está pegada al Mi Mix y pone en marcha el sistema. Raro, sí, pero funciona y nadie alrededor es capaz de escuchar la conversación en curso. Efectivamente, parece magia.

Cámara e imagen

También sorprende el funcionamiento de la cámara anterior, que está situada en el extremo inferior del terminal y se ve obligada a dar la vuelta a la imagen. Salvo que el usuario le dé la vuelta al móvil, claro. Debajo puedes ver algunos ejemplos de fotos tomadas con el Mi Mix.

Desafortunadamente, como sucedía en el Mi Note 2, la imagen es el punto débil del Mi Mix. La cámara anterior, de cinco megapíxeles, toma autorretratos que resultan simplemente correctos. Nada del otro mundo.

Pero la cámara principal es el talón de Aquiles del terminal. Aunque sobre el papel parece excepcional, en la práctica no lo es tanto. Los 16 megapíxeles del sensor y la lente de luminosidad f 2.0 —estándar ya en muchos terminales de gama media— ofrecen muy buenas fotografías en condiciones favorables de luz. Pero cuando esta escasea, la definición cae en picado. No obstante, la imagen no se rompe en cuadrados negros como sucede con el Mi Note 2. Un estabilizador óptico habría ayudado a mejorar los resultados, pero en algún lugar tenía que ahorrar Xiaomi...

Porque, a pesar de que su fabricación es extremadamente complicada y solo el 20% de sus impresionantes cuerpos cerámicos pasa las pruebas de calidad, el precio del Mi Mix sigue siendo contenido. No es la gama media a la que nos tiene acostumbrados la marca china, pero sigue siendo algo más barato que los buques insignia de Apple o Samsung, y mucho más económico que el exclusivo terminal que Huawei ha firmado con Porsche y que no resulta ni la mitad de sorprendente que el Mix.

Concretamente, la versión que monta 4GB de memoria RAM y 128 GB de almacenamiento interno se puede reservar en Gearbest por 725 euros, mientras que la edición de lujo, con 6GB de RAM, 256 GB de memoria interna y oro de 18 quilates en el bisel de la cámara y el lector de huellas dactilares, cuesta 815 euros. Merece la pena pagar la diferencia porque esa última cuenta con casi todas las bandas de frecuencia de 4G, lo cual permitirá navegar a toda velocidad en casi todos los países y operadores.

Ambas versiones, eso sí, utilizan el mismo cerebro: el chip Qualcomm Snapdragon 821, que trabaja con cuatro núcleos a una frecuencia máxima de 2,35 Ghz., superior a la de competidores como el Google Píxel.

Batería y pantalla

También comparten el resto de elementos clave. La batería, por ejemplo, cuenta con una carga rápida que logra en 30 minutos el 40% de los 4.400 mAh. de capacidad —es más lenta que otros aparatos de Xiaomi, pero aceptable teniendo en cuenta que también es mayor—. La autonomía con una carga completa es suficiente como para utilizar el terminal durante día y medio con un uso moderado gracias a la optimización del sistema —la capa MIUI basada en Android 6 que ya hemos analizado en varias ocasiones anteriores— y al hecho de que la pantalla sea FHD.

¿Se queda corta esa resolución para una tan grande? Pues, en este caso, un poco sí. Tiene 1080 x 2040 píxeles debido a su inusual ratio 17:9, y, aunque se trata de un panel IPS de gran calidad fabricado por Sharp, con este tamaño se habría agradecido una densidad de píxeles mayor que la de 362 que ofrece. Sobre todo para utilizar la realidad virtual. Además, su peculiar forma hace que al ver vídeos aparezca una banda negra en el lado derecho, de manera que se pierde un poco de la espectacularidad que le da el no tener borde. En los juegos, eso sí, es impresionante. Y su potencia hace que ni los más exigentes tengan ralentización alguna.

Lógicamente, como casi todo el móvil es pantalla, en esta ocasión Xiaomi ha optado por utilizar botones virtuales en la parte inferior, a la que ha añadido un icono para lanzar y esconder rápidamente su peculiar botón virtual, similar al de Apple pero con más funciones. La navegación así es bastante fluida, pero se echa de menos que no haya personalizado más el sistema operativo para adaptarlo a un terminal tan peculiar.

Pros y contras

A pesar de que no se trata de un ‘smartphone’ perfecto, y que es recomendable solo para los amantes de los ‘phablets’, es evidente que con el Mix Xiaomi ha demostrado su capacidad para innovar y asombrar al público. Eso sí, hay que recordar que no es el primero en fabricar una pantalla de este tipo. Los Aquos ya la tenían antes, pero su diseño está a años luz del que ha adoptado Xiaomi, que es uno de los más bonitos que existen. Y, aunque la marca no lo ha querido confirmar a Teknautas, todo apunta a que lo repetirá en una versión más reducida —quizá de 5,5 pulgadas— que podría servirle para estrenarse de forma oficial en Estados Unidos. Ese sí que podría tener una mayor aceptación entre el público en general.

Teniendo en cuenta que su precio es ya el de un tope de gama de marcas tradicionales, ¿merece la pena? Quien quiera fardar, no tiene ni que hacerse la pregunta. Por supuesto. Quien quiera un móvil funcional, sin embargo, puede que lo encuentre excesivamente grande y resbaladizo —no apto para torpes—. Además, es frágil. Porque la cerámica es casi imposible de rayar, pero algunos ‘youtubers’ ya han demostrado que se casca con las caídas más pequeñas.

Finalmente, es un móvil que, por la poca cantidad que Xiaomi tiene previsto producir, es muy difícil de conseguir. Las ventas ‘flash’ que Xiaomi hace en su página web oficial de China se agotan en pocos segundos, e incluso en Gearbest reconocen que no saben si podrán dar abasto con las reservas que ya se han realizado. No obstante, personalmente creo que merece la pena intentarlo.

¡Guau! ¡Joder! ¡La leche! ¡Ahí va la hostia! Cada cual puede elegir su exclamación preferida, pero es casi seguro que va a pronunciar alguna nada más ver el Xiaomi Mi Mix. Porque es el teléfono móvil que rompe moldes y que avanza lo que va a ser el futuro de los ‘smartphones’. De hecho, la marca china lo considera un ‘móvil conceptual’.

El redactor recomienda