Los crípticos mensajes de Wikileaks que han disparado la conspiranoia en internet
Una serie de tres mensajes, acompañados de un extraño código, han provocado que los usuarios de las redes sociales se hayan lanzado a la busca y captura de su explicación
Filtraciones de 'gargantas profundas', documentos privados que salen a la luz, informes que señalan actuaciones poco éticas... Wikileaks ha conseguido en los últimos años hacerse un hueco en la era de las telecomunicaciones gracias, en buena parte, a su capacidad para dar a conocer información sensible que, de otra manera, siempre quedaría oculta para el usuario medio. Pero su última comunicación ha levantado mucho revuelo... sobre todo, por no saber de qué se trata.
Wikileaks sorprendía a propios y a extraños con tres tuits realmente raros, cada uno de ellos encabezado por el texto 'compromiso previo' y un número, además de una palabra clave y un código de 64 caracteres. Enviados los tres de manera consecutiva y sin dar más explicaciones, pronto comenzaron las especulaciones por parte de los usuarios de las redes sociales, hasta llegar, más o menos, a una teoría común: ¿podría tratarse de un 'Código de Hombre Muerto'?
pre-commitment 1: John Kerry 4bb96075acadc3d80b5ac872874c3037a386f4f595fe99e687439aabd0219809
— WikiLeaks (@wikileaks) 16 de octubre de 2016
pre-commitment 2: Ecuador
— WikiLeaks (@wikileaks) 16 de octubre de 2016
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pre-commitment 3: UK FCO f33a6de5c627e3270ed3e02f62cd0c857467a780cf6123d2172d80d02a072f74
— WikiLeaks (@wikileaks) 16 de octubre de 2016
Pero, empecemos por el comienzo: ¿qué es un 'Código de Hombre Muerto'? No es, ni más ni menos, que la extrapolación al mundo de la informática de una tecnología que se comenzó a emplear en los antiguos ferrocariles y con la que a día de hoy sigue contando buena parte de la maquinaria automática dirigida por un ser humano: un pedal o dispositivo que pulsar cada cierto tiempo para 'comunicarle' a la máquina que el hombre sigue ahí, lo que sirve para evitar posibles accidentes del vehículo, bien por despiste o por haber sufrido una incapacidad temporal, como un desmayo.
Aplicado a servicios que contienen información sensible como Wikileaks, el 'Código de Hombre Muerto' serviría para evitar que los documentos caigan en el olvido por la incapacidad del dueño de los escritos para publicarlos. Es decir, si Julian Assange sufriera cualquier tipo de problemas, la activación se realizaría a través de estos códigos que, en las manos correctas, sabrían interpretarlo para desvelar toda la información que tiene en su poder. Y, ahí es donde comenzó la conspiranoia en la red.
¿Era posible que hubiera muerto Julian Assange y, por eso, se enviaran los tres tuits con el misterioso código? No en vano, se trata de una de las personas más buscadas del mundo, a quien Suecia y EEUU quieren detener para juzgar -uno, por presuntos delitos sexuales; otro, por espionaje-, pero que su asilo en la embajada londinense de Ecuador lo impide. Así, al saber poco o nada de él en la vida pública, se empezó a especular con la posibilidad de un fallecimiento.
Sin embargo, la explicación parece mucho más sencilla. La propia cuenta de Wikileaks en Twitter confirmó que, efectivamente, los tres mensajes se trataban de un 'Código de Hombre Muerto', pero no porque le sucediera nada al fundador de su organización: "La conexión a internet de Julian Assange fue intencionalmente interrumpida por cierto Estado; ya tomamos las correspondientes medidas por si surgen circunstancias imprevistas".
Julian Assange's internet link has been intentionally severed by a state party. We have activated the appropriate contingency plans.
— WikiLeaks (@wikileaks) 17 de octubre de 2016
Esta no es la primera vez que se hace público en las redes un 'Código de Hombre Muerto' por parte de una conocida personalidad, como ya lo hicieron en su momento tanto Edward Snowden -antiguo empleado de la CIA y la NSA, encargado de filtrar documentos secretos- como Andrea Shepard -desarrolladora del Proyecto Tor-. Quizá la imposibilidad de Assange para conectarse a internet durante un número de días determinado ha provocado que se ejecute un código que ha disparado la conspiranoia en la red.
Filtraciones de 'gargantas profundas', documentos privados que salen a la luz, informes que señalan actuaciones poco éticas... Wikileaks ha conseguido en los últimos años hacerse un hueco en la era de las telecomunicaciones gracias, en buena parte, a su capacidad para dar a conocer información sensible que, de otra manera, siempre quedaría oculta para el usuario medio. Pero su última comunicación ha levantado mucho revuelo... sobre todo, por no saber de qué se trata.