Series propias y sin anuncios: así funciona el YouTube de pago

Pagar por ver YouTube puede sonar poco atractivo. Google, sin embargo, ha anunciado su nuevo servicio de suscripción YouTube Red (que no debe confundirse con Redtube) que será lanzado el 28 de octubre en EEUU. Una plataforma con la que pretende competir contra empresas como Spotify, a la vez que monetiza más su creación.

YouTube Red elimina los anuncios de los vídeos, algo que ya se consigue con los bloqueadores de anuncios (al menos de momento). Esto es lo de menos, porque Google incluirá suficientes características adicionales para convencer al usuario de que pagar esos 9,99 dólares al mes vale la pena.

En primer lugar permitirá guardar los vídeos offline para verlos más tarde sin conexión, una función pensada especialmente para tabletas. También dejará reproducirlos (¡por fin!) en segundo plano: se acabó dejar de oír una canción por tener que contestar un WhatsApp.

Pero no se vayan, porque todavía hay más. La suscripción a YouTube Red incluye también Google Play Music, el servicio de reproducción de música por streaming (el Spotify de Google, si lo prefieren).

Red permitirá ver vídeos sin conexión, reproducirlos en segundo plano y disfrutar de contenido propio como series protagonizadas por 'youtubers'

Google no sólo pone el punto de mira en Spotify. Así como Netflix y Amazon ya ruedan sus propias series, YouTube Red incluirá contenidos propios. Y lo hará exprimiendo todavía más su principal gallina de los huevos de oro: los youtubers. Personajes tan influyentes como PewDiePie (considerado según Forbes como el mejor pagado, gana más de 10 millones de dólares al año por jugar a videojuegos) participarán en series como realities. En uno de ellos, por ejemplo, los participantes tendrán que enfrentarse a un apocalipsis zombi.

Aunque todavía no hay fecha de estreno en otros países, Google ha metido el pie en la piscina para decidir si se lanza de cabeza. Ni Google Music puede competir con Spotify ni un reality con producciones como Daredevil o El hombre en el castillo (por mucho que no haya que infravalorar la capacidad de movilización de los youtubers). Se trata, eso sí, de una toma de contacto: YouTube es una de las páginas más visitadas del mundo y si Google quiere, puede. Sólo queda la pregunta de cómo es posible que no lo haya intentado antes.