Es noticia
Ferrovial e Iberdrola lideran la aportación española a la ansiada fusión nuclear
  1. Tecnología
una docena de empresas trabajan en el iter

Ferrovial e Iberdrola lideran la aportación española a la ansiada fusión nuclear

La multinacional especializada en infraestructuras acaba de firmar su cuarto contrato con el ITER, el proyecto europeo que pretende domar la energía de las estrellas. Pero no es la única

Foto: ITER será construido en la ciudad francesa de Cadarache
ITER será construido en la ciudad francesa de Cadarache

La fusión nuclear podría solucionar todos los problemas energéticos sin apenas contaminar. Pero domar la energía de las estrellas no es sencillo, y para conseguirlo nació el proyecto científico internacional ITER, en el que España tiene una participación cuantiosa en forma de contratos, que ya superan los 400 millones de euros.

“Desde el principio España ha estado en el trío de cabeza”, asegura a Teknautas el director del Laboratorio Nacional de Fusión del CIEMAT, Joaquín Sánchez. En materia de concursos ganados nuestro país es el tercero, por detrás de Francia e Italia y por delante de potencias tecnológicas como Alemania y Reino Unido.

El último contrato con el proyecto ITER lo ha ganado Ferrovial, con un valor de 30 millones de euros. Su objetivo será abastecer de electricidad a todo el complejo mediante una red de alta tensión de 1.200 MVA (megavoltiamperios).

España es el tercer país que más concursos ha ganado en el ITER, por detrás de Francia e Italia

La instalación contará con dos subestaciones y siete transformadores que suministren la energía necesaria para calentar el plasma del reactor de fusión hasta los 150 millones de grados centígrados, grado arriba o abajo.

Se trata, además, del cuarto contrato que gana la multinacional especializada en infraestructuras. El más importante de ellos, consistente en la construcción del edificio que albergará el reactor de fusión Tokamak y en el que también participará el grupo galo Vinci, está valorado en 300 millones de euros. Por este motivo, la mayor parte de la obra civil del ITER correrá a cargo de esta compañía.

Pero Ferrovial no es la única empresa española que se dedica a construir el ITER. La lista completa supera la docena, aunque Sánchez aclara que algunas son mucho más activas que otras.

Iberdrola, por ejemplo, es la líder de un consorcio hispanoitaliano encargado de fabricar los grandísimos imanes superconductores, cuyo papel es capital. Se encargan de generar los campos magnéticos que enjaulen el plasma ya que, a temperaturas de 150 millones de grados centígrados resultaría imposible que ningún material lo albergara como un cazo soporta el agua hirviendo.

Este consorcio también diseñará los módulos de primera pared, que temperaturas muy elevadas (aunque muy inferiores a las del plasma). Por este motivo, Sánchez cataloga su construcción como “muy complicada”. En total, los tres contratos que ha obtenido Iberdrola superan los 10 millones de euros

No acaba aquí la participación española. Idom diseñará los módulos con los que se experimenten formas de generar tritio, mediante un contrato de 4,5 millones de euros. Empresarios Agrupados firmó otro de 150 millones para las obras de ingeniería de los edificios.

También la filial española de Airbus participará con la construcción de los grandes anillos de fibra de vidrio que forman parte del reactor. Incluso Indra y Gas Natural tienen una porción del pastel.

El ITER es un proyecto envuelto en numerosos retrasos y dudas. Los primeros experimentos debían comenzar en 2019, pero Sánchez considera que probablemente la fecha final se retrase cuatro o cinco años. Esta lentitud se debe a los retos tecnológicos, pero también a la estructura de la iniciativa.

A pesar de este ambiente, Sánchez opina que todas estas empresas no arriesgan porque, por mucho que el proyecto sea ambicioso, su viabilidad está asegurada. En otras palabras, todas ellas cobrarían se finalice o no. “Sí asumen riesgos tecnológicos, porque construir imanes tan exigentes es un compromiso importante”.

La energía de las estrellas

La fusión nuclear, como su propio nombre indica, consiste en la fusión de núcleos atómicos. Tiene lugar continuamente en las estrellas, como el Sol. Y eso persigue el ITER, desde que fue ideado en 1986: traer el Sol a la Tierra, y aprovechar esta energía para olvidarse de las emisiones de carbono y la escasez de combustibles. Pero primero tendrá que demostrar que es posible hacerlo de forma masiva y segura.

Los retos científicos y tecnológicos de la proeza no son pocos. La fusión se produce entre deuterio y tritio, dos isótopos del hidrógeno que se combinan para producir helio y neutrones. Sin embargo, aunque el primero es abundante en la naturaleza (se consigue del agua), el segundo debe producirse en fábricas. Y la reserva mundial de tritio no supera los 20 kilos.

Ferrovial acaba de firmar un contrato de 30 millones de euros para abastecer de electricidad al proyecto

Además, semejante reacción libera unas cantidades ingentes de energía calorífica que hay que controlar y dominar. Tanto el control del plasma a 150 millones de grados centígrados como la traducción de este calor en electricidad suponen un gran reto.

Domar la energía de las estrellas puede parecer peligroso, pero la seguridad del proceso es total. Por un lado la reacción sólo libera helio (elemento presente en cualquier globo) y neutrones, y en caso de accidente se detiene en seco. Una situación opuesta a la energía nuclear, que además de producir residuos radioactivos muy peligrosos y duraderos, en caso de accidente la reacción corre el riesgo de descontrolarse.

¿Será posible arrancar la fusión nuclear del futuro y traerla al presente? Los físicos cuentan este chiste: “La fusión nuclear es la energía del futuro… y siempre lo será”. Resume a la perfección las dificultades que entraña una tecnología que podría ser una revolución energética, pero también tardar 50 años en implementarse. Pero una cosa está clara: si es posible será el ITER quien lo consiga, gracias a la colaboración internacional y a la aportación de un buen número de empresas españolas.

La fusión nuclear podría solucionar todos los problemas energéticos sin apenas contaminar. Pero domar la energía de las estrellas no es sencillo, y para conseguirlo nació el proyecto científico internacional ITER, en el que España tiene una participación cuantiosa en forma de contratos, que ya superan los 400 millones de euros.

Nuclear Física
El redactor recomienda