Es noticia
El Gobierno es incapaz de frenar el fraude por SMS
  1. Tecnología
la setsi, saturada por las denuncias

El Gobierno es incapaz de frenar el fraude por SMS

Mensajes avisando de sorprendentes premios o viajes a playas paradisíacas son algunos de los ejemplos de fraudes masivos. El Gobierno no actúa contra ellos

Foto:

"¡Enhorabuena! Su número ha sido elegido como el ganador de un carro de la compra valorado en 1.000 euros completamente gratis. Llame ahora al 807 50 56 37 ¡Disfrútelo ya!". El pasado 2014 una cadena de SMS comenzó a difundir un fraude incitando a miles de usuarios a llamar a un 807, un teléfono de tarificación adicional. El gancho en aquella ocasión se trataba de un falso regalo de un carro de la compra valorado en 1.000 euros. Ni que decir tiene que los mensajes se enviaban desde un número que nunca estaba operativo. En lugar de una operadora cualquiera, todos aquellos que llamaron se encontraron con un contestador automático e interminablespreguntas absurdas para, de esta forma, alargar la conversación e inflar la factura.

No es el único fraude masivo a través de SMS que circula por las líneas móviles españolas. Supuestos familiares que intentan ponerse en contacto contigo por mensaje o viajes a playas paradisíacas son algunos de los ejemplos enviados para engañar a los usuarios. Es cierto que muchos no caen en la trampa. Pero otros tantos sí.

El precio de las llamadas a estos números depende no sólo de la duración, sino de la cuarta cifra marcada. Es decir, la que se marca a continuación del código 807. En este caso la cifra siguiente era un 5, el nivel máximo de tarificación según la Secretaría de Estado de Telecomunicaciones y para la Sociedad de la Información (Setsi), por lo que el coste de la llamada erade 1,21 euros por minuto si se llamaba desde un fijoy 1,51 euros si se hacía desde un móvil.Un negocio muy lucrativo para las empresas que están detrás de estos fraudes.

Industria se 'duerme' con los fraudes masivos

Según ha denunciado Facua, la Setsitardó más de seis meses en anular el número con el que se produjo estefraude masivo. Un largo tiempo durante el cual los responsables se lucraronilícitamente.Pero no es la peor actuación delórgano dependiente del Ministerio de Industria, Energía y Turismo. Otras denuncias apuntan a demoras de un año e incluso más tiempo. ¿La razón? El portavoz de la organización de consumidores Rubén Sánchez, lo tiene claro: la falta de personal y un número excesivo de denuncias.

Preguntados al respecto, desde la Setsi han explicado que "en caso de una reclamación el procedimiento es breve, se ordena al operador inmediatamente que devuelva el dinero al usuario. En caso de denuncia sin embargo, hay que tener en cuenta que es necesario llevar a cabo una investigación previa para ver si se incumple el Código de Conducta y luego tramitar un procedimiento con alegaciones al titular, ya que puede concluir en cierre del número. Es posible que entre investigación previa y procedimiento posterior se tarden varios meses, pero se trata de un procedimiento con todas las garantías".

La CNMC, encargada de eliminar en última instancia un número fraudulento, ha explicado que "en ocasiones nos llegan denuncias de algunos usuarios contra este tipo de SMS fraudulentos pero siempre les remitimos a la Setsi, que es la competente. Cuando este órgano nos dice que hay un fraude a través de una línea es entonces cuando procedemos a inhabilitarla. Mientras no lo haga no podemos hacer nada".

Desde laDirección General de Consumo de la Comunidad de Madridtambién han reconocido aTeknautasque en la mayoría de casos remiten las denunciasal órgano de Industria. "Analizamos cada reclamación de forma cuidadosa pero generalmente les remitimos a la Setsi. Hay que tener en cuenta que el sector de las comunicaciones es donde más reclamaciones se producen. Y aún más en telefonía de tarificación adicional".

Ahora multipliquen lo que sucede en la capital por todas las autoridades autonómicas de protección al consumidor que hay repartidas por la geografía española. Razón por la que podría estar colapsada la Setsi.

Otro asunto es la cuantía de lasmultas impuestas.

Unas multas poco disuasorias

Los fraudes a través de SMS violan varias normativas españolas. En concreto y según el abogado Pablo Fernández Burgueño la Ley General para la Defensa de los Consumidores y Ususarios, la Ley de Protección de Datos, la Ley de Competencia Desleal y la Ley de Servicios de la Sociedad de la Información.

Cuando la Setsi valora que hay infracción en materia de consumo sanciona a los responsables. Pero según las organizaciones de consumidores y usuarios con multas poco cuantiosas. "Un fraude de 100.000 eurospuede acabar con un castigo de 20.000 euros", ha explicado Rubén Sánchez. "Esto les anima a seguir defraudando".

Para el abogado Joaquín Muñoz, del despacho Abanlex, "estas multas son insuficientes. La AEPD sin ir más lejos impone este tipo de sanciones por incumplir únicamente el artículo 21 de la LSSI. Que es cuando envías una información comercial sin el consentimiento del usuario".

No le falta razón. La Agencia Española de Protección de Datos (AEPD), tiene la competencia sobre comunicaciones comerciales electrónicas no solicitadas (spam), aplicandoel régimen de infracciones y sanciones de la LSSI. "En este caso el SMS fraudulento además de estar incluido dentro de la normativa para envíos de mensajes comerciales por medios electrónicos, es un fraude. Hay publicidad engañosa que lleva al usuario a incurrir en un gasto de forma fraudulenta", ha concluido Muñoz.

Facua lleva a cabo actualmente una campaña para dar a conocer este tipo de timos a través de las redes sociales con el hashtag #fraudeSMS. Los usuarios que se hayan visto afectados pueden informar a la asociación en la dirección de correo electrónico que aparece en su página web.

"¡Enhorabuena! Su número ha sido elegido como el ganador de un carro de la compra valorado en 1.000 euros completamente gratis. Llame ahora al 807 50 56 37 ¡Disfrútelo ya!". El pasado 2014 una cadena de SMS comenzó a difundir un fraude incitando a miles de usuarios a llamar a un 807, un teléfono de tarificación adicional. El gancho en aquella ocasión se trataba de un falso regalo de un carro de la compra valorado en 1.000 euros. Ni que decir tiene que los mensajes se enviaban desde un número que nunca estaba operativo. En lugar de una operadora cualquiera, todos aquellos que llamaron se encontraron con un contestador automático e interminablespreguntas absurdas para, de esta forma, alargar la conversación e inflar la factura.

El redactor recomienda