Las cinco grandes meteduras de pata de Apple en internet

En Apple se han vivido días de tensión tras la filtración de fotos privadas sustraídas de iCloud, el denominado CelebGate. Aunque la empresa ha desmentido rotundamente que el robo se haya producido debido a un fallo del servicio, el precio de sus acciones ha descendido provocando unas perdidas que algunos valoran en 25.000 millones de dólares.

En ese desplome seguramente ha influido que no sea la primera vez que un producto de internet creado por los de Cupertino provoca quebraderos de cabeza. Por eso en la keynote de este martes, Apple, además de demostrar que sabe fabricar hardware de calidad, no estaría de más que convenciera de que sabe hacer las cosas mejor en la red.

Por eso es clave comprobar la acogida que tendrá iCloud Drive, la renovación del servicio para gestionar datos en la nube integrado en iOS 8 y Mac OSX Yosemite. El objetivo de Apple es que pueda competir con servicios como Dropbox, Google Drive o Microsoft One Drive.

Estando Google volcado en la integración absoluta de sus sistemas operativos Android y Chrome con internet, Apple no puede seguir dando pasos en falso en ese terreno, pues ya lleva acumulados algunos errores de bulto en la red.

MobileMe

El antecesor de iCloud fue uno de los peores productos con el logo de la manzana. Almacenar datos en internet a través de MobileMe no sólo era caro, sino que además los fallos eran frecuentes y contaba con características tan absurdas como un límite de tráfico de datos mensual.

Por eso un encolerizado Steve Jobs despidió a su responsable, abroncó a todo el equipo de MobileMe y decidió hacer borrón y cuenta nueva presentando iCloud en 2011, aunque una antigua empleada responsabilizó a Jobs del fracaso de la criatura por las prisas que impuso a la hora de ponerlo en marcha. El anterior CEO de Apple admitió que MobileMe no había estado a la altura de las circunstancias.

Ping, la red social que naufragó

En septiembre de 2010, Apple lanzó su propia red social de música usando como plataforma iTunes. Para ello convenció talonario en mano a un buen número de artistas, entre ellos a Lady Gaga, para que tuviesen su propio perfil en Ping. De esa forma se intentaba incentivar las compras en la tienda de música.

Entre los grandes problemas que llevaron a Apple a cerrar Ping dos años después estaba que no se podía acceder al servicio con un navegador, solo con iTunes. Además, tampoco era posible conectar con Facebook para buscar contactos y hubo momentos en los que el spam fue frecuente en la plataforma.

Los problemas con los perfiles de usuario

Desde hace meses el que esto escribe no puede acceder desde su Mac con su contraseña a iCloud ni a la App Store, pero si desde otros equipos. Después de numerosas llamadas al servicio de asistencia técnica de Apple el problema persiste. La empresa apunta a que puede tratarse de un fallo de hardware del ordenador, algo bastante rocambolesco si tenemos en cuenta que cualquier otro servicio de internet funciona perfectamente en ese equipo.

Problemas como ese demuestran que el sistema de gestión de perfiles de usuario que utiliza Apple es innecesariamente complejo. Basta con darse una vuelta por los foros de soporte técnico de la empresa para comprobar que están llenos de consultas sobre el tema.

iTunes radio

Con el iPod y con iTunes, Apple supo entender que los soportes musicales físicos habían entrado en declive y que el futuro estaba en las descargas de música en formato MP3, aunque la empresa no ha sido capaz de reciclarse para afrontar el fenómeno de los servicios de streaming, como Spotify.

Su única apuesta en este sentido, iTunes Radio, sigue sin estar disponible en muchos países, España incluida, y Apple ni tan siquiera se ha pronunciado sobre las fechas en las que el servicio abrirá sus puertas a usuarios de otras zonas del mundo. El tiempo corre en contra de los de la manzana si pretenden intentar plantar cara al modelo impuesto por Spotify.

iWeb

En pleno auge de los blogs Apple lanzó el programa iWeb. Con él pretendía simplificar la creación de páginas web y blogs personales. Aunque su manejo era intuitivo, actualizar un blog con él era un auténtico engorro pues había que hacerlo forzosamente desde un ordenador que tuviese ese software instalado. Un anocronismo incluso en 2006, cuando fue lanzado.

Estos casos, a los que podrían sumarse otros como el desastre que supuso el estreno del servicio de mapas online de Apple, demuestran que ha llegado la hora de descubrir si Apple ha aprendido a imitar a Google de la misma forma que los de Mountain View han aprendido a imitarles a ellos. Toca otra cura de orgullo.