Es noticia
"La opinión media de los alumnos es más acertada que la del profesor"
  1. Tecnología
LA INTELIGENCIA DE LAS MASAS ES BUENA PREDICTORA

"La opinión media de los alumnos es más acertada que la del profesor"

Futura Markets es una pequeña 'startup' con una curiosa teoría: que todos saben más que el que más sabe. La usan para predecir los vaivenes del mercado

Foto: Orlando López (izquierda) y Andrés Alonso, cofundadores de Futura Markets
Orlando López (izquierda) y Andrés Alonso, cofundadores de Futura Markets

Explica el escritor y periodista James Surowiecki en su best seller The Wisdom of Crowds (Random House, 2004) que la decisión que se obtiene de las opiniones promedio de un grupo es a menudo más correcta que la que se emana delgurú. Esto es, que todos saben más que el que más sabe.La teoría, conocida como 'sabiduría de grupos', no pertenece a Surowiecki, sino aSir Francis Galton, uno de los padres de la estadística.

El episodio que puso a Galton sobre la pista es muy interesante. Sucedió a principios del siglo XX en el mercado de ganado de Plymouth, en Inglaterra. Allí, un carnicero troceó un buey y lo situó sobre una báscula cubierta. A cada uno de sus clientes le pidió una mínima aportación por intuir cuánto pesaría el buey; el que más se acercasese llevaría toda la carnecomo premio. Lo que Galton descubrió es que, sumando todas las papeletas y diviendo el número entre los participantes, la cifra resultante se acercaba más a la realidad que la que propuso el ganador.

La teoría ha ido evolucionando en distintas formas y aplicaciones en los últimos años, aunque nadie ha hecho más por su popularidad que el economista Robin Hanson, creador de un algoritmo orientado a realizar predicciones de todo tipo. Mercados de predicción, los llaman, y se basan en obtener información a partir de las apuestas de un grupo de personas sobre un determinado evento. Y precisamente el algoritmo de Hanson ha servido como base para la fundación de Futura Markets, la primera experiencia española sobre los mercados de predicciones.

La idea llevaba años dando vueltas en la cabeza de Andrés Alonso, economista especializado en estudios financieros de Sintetia y fanático de las teorías de Galton y Hanson. No sería hasta 2012 cuando conoció a Orlando López y su empresa, Talento Corporativo, que le proporcionaron la tecnología necesaria para poner en marcha su proyecto. Después, el empresario Martín Varsavsky les puso en contacto conRicardo Galli y Benjamí Villoslada, de Menéame, que hicieron una excepción con Futura Markets. A día de hoy, se trata de la única startup en la que han invertidolos dueños del popular agregador de noticias.

El funcionamiento de Futura Markets se asemeja al del Comunio o cualquier otro juego de apuestas: sobre una pregunta concreta (¿Será Eduardo Madina nombrado secretario general del PSOE?) el usuario tiene la posibilidad de comprar una respuesta, un sí o un no. Si cree que está en lo correcto, mantiene su posición hasta el desenlace; si no, siempre tiene la posibilidad de venderlaaprecio demercado. Según Alonso, "a partir de 65 usuarios el porcentaje de acierto se sitúa en torno al 80-85%, y en el 95% cuando son entre 110 y 120 las respuestas". Afirma que la información está ahí, entre la maraña especulativa:"Por ejemplo, nosotros captamos rápidamente que Podemos, la formación política, iba a tener más de un eurodiputado, antes que las encuestas. Pronto vimos que tenían un 75% de posibilidades de conseguirlo".

Ruido y señal

El usuario de Futura Marketsdispone de un dinero virtual para realizar sus inversiones:"Como la cantidades limitaday las respuestas son públicas para el resto de la comunidad, el inversor responde con sinceridad. A estas respuestas les aplicamos el algoritmo de Hanson modificado por mí, que básicamente haceque el precio varíe en función de las posibilidades que algo ocurra", explica el economista. Es crucial matizque aporta el dinero virtualno solo porque minimiza la especulación sino, sobre todo, porque evita quelos emprendedores sesometana las leyes del juego online. "En realidad no podemos hablar de apostar", dice Alonso, "porque esinvertir. Sostiene el estadístico Nate Silver que toda información se compone de señal y ruido. En un partido, en el que puede pasar cualquier cosa, casi todo es ruido, es apuesta, pero en la bolsa hay gran parte de señal".

Los mercados de predicción tienen un fuerte componente evolutivo. Funcionan como redes neuronales, en tanto que los usuarios van aprendiendo y ellos mismos tienden a autoseleccionarse, a reconocer quién es bueno vaticinando en política y quién lo es en tecnología. En esta línea, Alonso y su equipo tienen esperanza de alcanzar mejores resultados cuando conozcan su base de usuarios y pongan a competir a los super forecasters, los individuos con una tendencia marcada hacia elacierto. El gobierno de Estados Unidos está financiando proyectos de este sesgo: uno, The Good Judgement Project, es un estudio de cuatro años que busca soluciones a los grandes problemas globales. El otro, SciCast, trata de anticipar el futuro de la ciencia y la tecnología.

Aunque Futura Markets es de acceso gratuito, los fundadores tienen un libro de ruta hacia la rentabilidad. A corto plazo están ofreciendo a empresas la posibilidad de financiar preguntas -como hicieron con Entradas.com en la gala de los Oscar- y por la otra con el sistema de micropagos que tan buenos réditos le está dando al sector de los videojuegos.Más adelante, cuando el sistema esté maduro, la idea pasa por licenciarlo como herramienta de business intelligence para empresas, como ya hacen Google y Microsoft a la hora de tomar decisiones internas y estratégicas. Otra opción, apunta Alonso, consiste en el crowdsourcing médico, un concepto que triunfa en Estados Unidos y que consiste en un segundo diagnóstico efectuado por la comunidad de usuarios. "Entre los que respondan habrá médicos y también habrá pacientes que hayan experimentado los mismos síntomas. No importa, la teoría dice que la opinión promedia de los alumnos es más acertada que la del profesor", concluye Alonso.

Explica el escritor y periodista James Surowiecki en su best seller The Wisdom of Crowds (Random House, 2004) que la decisión que se obtiene de las opiniones promedio de un grupo es a menudo más correcta que la que se emana delgurú. Esto es, que todos saben más que el que más sabe.La teoría, conocida como 'sabiduría de grupos', no pertenece a Surowiecki, sino aSir Francis Galton, uno de los padres de la estadística.

El redactor recomienda