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Esto es un dispositivo de espionaje
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UNA CÁMARA CAMUFLADA EN LA BOTELLA

Esto es un dispositivo de espionaje

Hace un tiempo el espionaje era cosa de los servicios secretos nacionales. Hoy, la democratización de la tecnología ha llegado a todos... también al espionaje

Foto: Imagen real de la cámara inserta en la botella de refresco (Espiamos.com)
Imagen real de la cámara inserta en la botella de refresco (Espiamos.com)

Observe la imagen de arriba. En principio no tiene nada de especial. Nada la distingue, por ejemplo, de una fotografía de móvil, pero no lo es. En realidad, la instantánea ha sido captada con una cámara oculta inserta en una botella de refresco. Atrás quedaron los clásicos relojes y pulseras. ¿Y quién desconfía de una botella de refresco?

Esto es más o menos lo que han debido pensar en Espiamos.com, uno de los líderes en el mundo de la vigilancia encubierta y el contraespionaje a nivel nacional. La botella, que en su apariencia no se distingue de un envase convencional, ha sido creada ad hoc en el laboratorio de la compañía. Lo novedoso es que no graba desde el tapón, que podría tirarse a la basura, sino que tiene un compartimento detrás de la etiqueta donde se ubica la cámara. Así, una persona puede beberse el refresco sin sospechar nada raro.

Según explican los técnicos, lo más complicado ha sido ubicar la batería. Es más, para un caso tan especial (que además ha de estar aislada en un medio acuoso), en Espaimos.com han optado por contruir una propia que, en principio, puede soportar hasta 30 horas de grabación continuada en alta calidad. A este respecto, no solo era importante que la ubicación de la cámara fuese poco visible, sino conservar la mayor parte de las condiciones de peso y aspecto de una botella convencional.

Aunque todavía se trata de un prototipo, la empresa considera que su rango de precio estará en torno a los 300 euros. Por el momento ya se ha exhibido en salones de seguridad, como SICUR, captando un gran interés entre los profesionales del sector.

Observe la imagen de arriba. En principio no tiene nada de especial. Nada la distingue, por ejemplo, de una fotografía de móvil, pero no lo es. En realidad, la instantánea ha sido captada con una cámara oculta inserta en una botella de refresco. Atrás quedaron los clásicos relojes y pulseras. ¿Y quién desconfía de una botella de refresco?

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