Cómo hacer un proyector para el móvil con una caja, una lupa y piezas de Lego

El móvil cada vez tiene más usos, y uno de los indiscutibles es el de cámara de fotos o de vídeo. La calidad de las imágenes captadas no hace más que mejorar gracias a los avances de los fabricantes, pero lo que no ha cambiado mucho es la forma de visionar luego esos archivos: o los ves en el propio móvil o los exportas a un ordenador. Pero, ¿qué tal si conviertes el salón de tu casa en un cine y proyectas tus fotos o películas para poder compartirlos con tu familia o amigos?

Por suerte, construir un proyector casero es muy fácil y, sobre todo, muy barato. Se trata de un proyecto apto para toda la familia (aunque habrá que manejar un cúter, por lo que se recomienda la supervisión de un adulto).

Además, sirve para aprender algunos fenómenos ópticos, como por ejemplo, como se invierten los rayos de luz al atravesar una lupa.

Para fabricar este proyector se necesita: una caja de zapatos, una lupa, varias piezas de Lego, un rotulador, un cúter, cinta aislante y pintura negra (puede ser para pincel o en espray).

Para empezar, y para que la calidad final de la imagen sea mayor, conviene que el interior de la caja (que será la base del proyector) sea lo más oscuro posible. Para ello, vamos a pintarla con la pintura negra. También podemos forrarla por dentro con cartulina o papel negro.

Una vez pintada, cogemos la lupa(una típica lupa como las de los detectives clásicos)y utilizando el rotulador marcamos su circunferencia en uno de sus lados más estrechos. Es importante que el círculo quede lo más centradoposible. Con el cúter, cortamos por la línea que hemos dibujado. El resultado debería ser un agujero redondo, de la misma circunferencia de la lupa, donde ésta encaje perfectamente.

Para fijar la lupa en su sitio, y para que la luz no se escape por fuera de la lente, utilizamos cinta aislante (preferiblemente negra) para asegurar su posición. No debe haber cinta pegada en el cristal, solo en el marco redondeado de la lupa.

Para que sea más cómodo, el mango de la lupa debería quedar dentro de la caja y sujeto también con cinta aislante,o bien en posición completamente vertical, y haremos un agujero en la tapa de la caja para que pase por él y eso ayude a fijarla. Podemos hacer otro pequeño agujero en la tapa para que pase el cable del cargador del móvil, y así nos aseguramos de que no se quede sin batería y tengamos que interrumpir la proyección.

De esta forma, el proyector ya está completo, aunque aún falta algo para poner en marcha nuestro cine casero: un soporte para el móvil. Éste tendrá que mantenerse totalmente vertical, así que habrá que encontrar la forma de sostenerlo.

Existen muchas formas de hacerlo, desde construir un pequeño atril de poliespan o corcho blanco hasta doblar un clip con la forma precisa. Una de las más divertidas es construirlo con piezas de Lego. En las fotos se puede ver un modelo, pero aquí es donde entra en juego la creatividad: mientras sujete el móvil con precisión, todo vale.

Con el móvil en su soporte y el soporte dentro de la caja, ¡ya puede comenzar la proyección!

Trucos para mejorar el resultado

Al pasar a través de la lente de la lupa, la imagen se da la vuelta, es decir, que se proyectará boca abajo. Así que debes colocar el móvil tumbado con la imagen al revés, para que se proyecte del derecho. Recuerda desactivar el giro automático de la pantalla si lo tienes activado.

Puesto que la potencia lumínica de este proyector casero no es muy alta, sube al máximo el brillo del móvil cuando quieras montar tu cine, para que la imagen se vea mejor. Si proyectas sobre una pared blanca o cubierta con una sábana blanca, también conseguirás este efecto. Ah, ¡y apaga las luces!

Cada caja y cada lupa son distintas, así que deberás ajustar la distancia entre el móvil y la lente para encontrar el mejor enfoque (es lo que harías girando los anillos del objetivo en una cámara réflex). Una vez encuentres el punto en el que la imagen es más nítida, márcalo con un rotulador y así no tendrás que volver a ajustarlo.