Imputan a un cura de Badajoz por supuestos abusos a un menor de 12 años

El Juzgado de Instrucción número 1 de Don Benito (Badajoz) ha abierto diligencias contraJosé Donoso Fernández,el párroco de la localidad pacense de Mengabril,por un supuesto caso de abusos sexuales a un menor de 12 años, han informado fuentes de la investigación.

El sacerdote, responsable de impartir catequesis y oficiar misas en este municipio,ha sido apartado como "medida preventiva" de "toda actividad parroquial", ha informado el Obispado de Plasencia en un comunicado de prensa.En el perfil de Facebook de la Parroquia de Mengabril pueden verse varias fotos del párroco junto a los feligreses y los monaguillos.

Fuentes próximas a la instrucción de los hechos han explicadoque el párroco, que vive en la localidad pacense de Don Benito, ya ha declarado como imputado en el juzgado, cuyo titular ya ha escuchado también al menor, así como a técnicos sociales.

La apertura de estas diligencias tiene su origen en un escrito de exposición de hechos que elevó el Área de Servicios Sociales del consistorio mengabrileño a la Fiscalía de Menores y a la Junta de Extremadura, ha explicado el alcalde de este municipio, Lorenzo Garrido.

Hablaba de "putas" y "mamporreros"

En este sentido, el Ejecutivo regional ha condenado enérgicamente "cualquier tipo de abuso que se cometa sobre un niño" y ha expresado su "absoluta confianza" en la Justicia y su respeto al procedimiento judicial abierto.

Garrido ha explicado que los hechos investigados se remontan a octubre del pasado año, aunque "había rumores" sobre la actitud del párroco en el municipio desde varios meses atrás, especialmente por algunos comentarios que éste habría realizado durante la catequesis.

Expresiones como "putas", en alusión a algunas mujeres, o "mamporreros" habrían sido utilizadas por el sacerdote ante los niños durante algunas sesiones de la catequesis.

De hecho, el alcalde se reunió con el religioso y con la trabajadora social del municipio para tratar "esta cuestión", especialmente ante el malestar creciente que se estaba generando entre las familias de los menores.

A raíz de estos hechos, se conoció el caso del menor víctima de los presuntos abusos sexuales -Garrido ha eludido comentar cómo- y posteriormente la familia del niño decidió unirse a la denuncia inicial.

En un comunicado de prensa, el Obispado de Plasencia, que "está colaborando" en las diligencias judiciales, ha anunciado que ya ha abierto una investigación canónica, tal como indica la normativa eclesiástica para estos casos.

La Dirección General de Política Social y Familia de Extremadura activó los recursos para recabar información sobre los hechos nada más conocer los primeros indicios y los puso en conocimiento de la Fiscalía de Menores.

En su comunicado, el Gobierno de Extremadura "lamenta que la sociedad actual siga siendo testigo de hechos tan repugnantes y deleznables como son los abusos a niños".