Es noticia
El cerco se estrecha sobre la 'capital' del Estado Islámico: ¿y ahora qué?
  1. Mundo
su expulsión no traerá la paz a la zona

El cerco se estrecha sobre la 'capital' del Estado Islámico: ¿y ahora qué?

El cerco se estrecha sobre la 'capital' del ISIS tras la primera jornada de la gran ofensiva sobre Mosul. Los expertos creen que la expulsión de los yihadistas no acabará con los conflictos

Foto: Un tanque avanza hacia Mosul entre efectivos del Ejército iraquí (Reuters).
Un tanque avanza hacia Mosul entre efectivos del Ejército iraquí (Reuters).

El cerco se estrecha sobre la 'capital' del Estado Islámico tras la primera jornada de la gran ofensiva sobre Mosul. Fuerzas progubenamentales iraquíes, apoyadas por los 'peshmerga' kurdos y los bombardeos de la coalición internacional liderada por EEUU, han logrado "importantes" avances en el frente de Al Jazer, al noroeste de la segunda mayor ciudad de Irak, tras conquistar nueve localidades. El progreso de las fuerzas terrestres se vio acompañado por intensos ataques aéreos centrados en las primeras horas de la ofensiva en la zona de Sahel Nínive, especialmente en el área de Bashiqa, a 14 kilómetros al norte de Mosul, que también fue golpeada con dureza por artillería pesada iraquí y kurda. El objetivo: irrumpir en esa localidad, donde está desplegado un contingente de fuerzas de Turquía.

La gran ofensiva

Los bombardeos —que han llegado a castigar Bartella, a solo 14 kilómetros de Mosul— han infligido "grandes pérdidas en vidas y material" al ISIS, asegura el Ejército iraquí. Asimismo, las tropas gubernamentales cercaron dos localidades próximas a Mosul, después de que sus habitantes se rebelaran contra los yihadistas y matasen a nueve de ellos, incluido un dirigente identificado como Osama al Edan. No fue la única 'revuelta' en el territorio del 'Califato' desde el inicio de la gran ofensiva: un grupo de resistencia denominado Los Batallones de Mosul asegura haber asesinado a cuatro miembros del Estado Islámico de nacionalidad saudí en el barrio de Mohandisin, en el este de la ciudad. Otro grupo, Los Caballeros de Mosul, afirma que ha quemado la casa de un destacado líder del aparato financiero del grupo.

El Estado Islámico cuenta con miles de combatientes en Mosul, hasta 5.000 según estimaciones del Pentágono. Los acólitos del ISIS elevan esta cifra hasta los 7.000 milicianos. Se enfrentan a una fuerza conjunta de 54.000 efectivos iraquíes y miles de 'peshmerga' apoyados por la coalición internacional. Milicianos del ISIS llenaron ayer de trampas explosivas el flanco izquierdo de la ciudad, zona donde se desplegaron "más de 3.500 combatientes, muchos de ellos procedentes de Diyala, Tikrit o Anbar", según declararon residentes de Mosul a la agencia de noticias kurda Rudaw. También incendiaron pozos petrolíferos en Hamdaniya, en un esfuerzo por crear densas columnas de humo para entorpecer el avance de las tropas iraquíes y los 'peshmerga' y reducir la visibilidad para los aviones de combate. La defensa de Mosul se completa con trincheras y túneles, trampas explosivas y camiones y coches bomba conducidos por suicidas que pretenden ralentizar el avance de las fuerzas de la coalición.

Pese a que las fuerzas iraquíes han cosechado varias victorias territoriales contra el ISIS durante el último año, la batalla por Mosul, donde todavía viven 1,5 millones de personas, es de una complejidad mucho mayor. La ofensiva durará "semanas, posiblemente más", según el teniente general estadounidense Stephen J. Townsend, que dirige la coalición internacional contra el ISIS. El Ejército iraquí ha estado sometido a una inmensa presión para lanzar la ofensiva antes de 2017, debido a las promesas del primer ministro, Haider al-Abadi. De hecho, el ataque se ha lanzado antes de que la clase política iraquí haya acordado cómo gobernar la provincia tras la expulsión de los yihadistas.

El día después del hundimiento

"Preocupa especialmente el escenario posoperación, porque hay demasiados intereses en controlar Mosul. La intervención de Turquía es especialmente peligrosa y lo puede incendiar todo. La violencia sectaria entre grupos iraquíes también es algo que debe temerse cuando el ISIS haya desaparecido de la ciudad. Sabemos por experiencia que expulsar a la insurgencia no significa paz, significa competencia por ver quién establece las nuevas reglas del juego. Hay presiones por parte del Gobierno kurdo para influir, también del Gobierno chií de Bagdad e, igualmente, por parte de los grupos suníes de la zona (que son mayoría) con el apoyo externo de Turquía y su negativa a dejar el tema solo en manos de Irak", explica a El Confidencial Gabriel Garroum, politólogo experto en el Estado Islámico y doctorado en el Departamento de Estudios de Guerra del King's College de Londres.

No son pocos los expertos en la región que comparten sus temores. Incluso aunque el ISIS pierda la ciudad de mayor tamaño de su 'Califato' en Irak y Siria, hay razones para pensar que la victoria en Mosul, aunque importante, no acabará con los conflictos en la zona. "Hay al menos ocho fuerzas diferentes combatiendo en Mosul y la derrota militar del Estado Islámico no resolverá el problema de los enfrentamientos entre dichas fuerzas. Hay confusión sobre quién gobernará Mosul una vez que el ISIS haya sido expulsado. (...) La fuerza oficial de liberación será el Ejército iraquí, donde la mayoría son chiíes, pero se debe recordar que fuera del Ejército hay otras milicias en la zona", escribe Daryl McCann, experto en el ISIS.

McCann se refiere a la violencia sectaria que podrían desatar las polémicas milicias chiíes en Mosul, ciudad de mayoría suní. Por ello, las conocidas como Unidades de Movilización Popular han sido trasladadas a Hawija, a 100 kilómetros de la ciudad. También a las aspiraciones regionalistas de los kurdos, que juegan un papel importante en la ofensiva, en la que el Ejército iraquí está apoyado por los 'peshmerga', milicias chiíes, fuerzas iraníes o milicias suníes entrenadas por Estados Unidos.

El cerco se estrecha sobre la 'capital' del Estado Islámico tras la primera jornada de la gran ofensiva sobre Mosul. Fuerzas progubenamentales iraquíes, apoyadas por los 'peshmerga' kurdos y los bombardeos de la coalición internacional liderada por EEUU, han logrado "importantes" avances en el frente de Al Jazer, al noroeste de la segunda mayor ciudad de Irak, tras conquistar nueve localidades. El progreso de las fuerzas terrestres se vio acompañado por intensos ataques aéreos centrados en las primeras horas de la ofensiva en la zona de Sahel Nínive, especialmente en el área de Bashiqa, a 14 kilómetros al norte de Mosul, que también fue golpeada con dureza por artillería pesada iraquí y kurda. El objetivo: irrumpir en esa localidad, donde está desplegado un contingente de fuerzas de Turquía.

Irak Califato
El redactor recomienda