Es noticia
El Estado Islámico, acorralado en Siria tras perder el control de la frontera con Turquía
  1. Mundo
vía clave de suministros para el ISIS

El Estado Islámico, acorralado en Siria tras perder el control de la frontera con Turquía

El 'Califato' ha quedado aislado por el norte. Las milicias rebeldes apoyadas por Turquía en su operación en Siria contra yihadistas y kurdos han arrebatado al ISIS el control de la frontera

Foto: Blindados turcos avanzan hacia la frontera en Karkamis, Gaziantep, el 27 de agosto de 2016 (Reuters).
Blindados turcos avanzan hacia la frontera en Karkamis, Gaziantep, el 27 de agosto de 2016 (Reuters).

El 'Califato' ha quedado aislado por el norte. El Ejército Libre Sirio (ELS), las milicias opositoras apoyadas por Turquía en su operación en Siria, han arrebatado al Estado Islámico de los últimos enclaves que controlaban en la frontera con Turquía, entre las regiones de Azaz y Jarablus, según informa la agencia de noticias oficial turca, Anatolia, que cita fuentes del aparato militar turco. El ELS controla toda la franja fronteriza gracias al apoyo militar turco, que desde el 24 de agosto ha realizado incursiones con carros de combate para apoyar a las milicias rebeldes. Por ello, el grupo yihadista se ha quedado acorralado en el norte de Siria, sin salida hacia Turquía. La única vía hacia el exterior que le quedaría al ISIS sería la del paso entre las zonas de Abu Kamal, en Siria, y Al Qaim, en Irak.

El 24 de agosto y tras dos días de bombardeos de artillería y de la Fuerza Aérea, efectivos terrestres turcos penetraron en territorio sirio y atacaron la localidad de Jarablus, controlada por el Estado Islámico, en una operación denominada Escudo del Éufrates, en la que Anakara también ataca a las milicias kurdas apoyadas por Estados Unidos. Este sábado una nueva columna de carros de combate turcos cruzó la frontera desde la provincia turca de Kilis en dirección a la localidad de Al Rai. El objetivo de la ofensiva turca, denominada Escudo del Éufrates, es además frenar el avance de las Fuerzas Democráticas Sirias, en las que participan las Unidades de Protección Popular (YPG) kurdas y obligar a estas milicias a retirarse al este del río Éufrates.

Mientras que todos los actores en la guerra siria, sea el régimen de Damasco, Rusia, Irán o Estados Unidos, coinciden en que su principal objetivo es derrotar a los yihadistas, todo indica que la prioridad para Turquía es contener el avance de los kurdosirios. Ankara quiere evitar así la creación de una zona kurda contigua a lo largo de los 900 kilómetros de su frontera con Siria. La razón de ese movimiento descansa en que Turquía desea evitar un fortalecimiento de los rebeldes kurdos en su propio territorio, el proscrito Partido de los Trabajadores de Kurdistán (PKK), que considera terrorista al igual que Estados Unidos y la Unión Europea (UE).

Turquía exige que los kurdos sirios se retiren a la ribera oriental del río Éufrates, algo que Washington reclama también para mantener sus relaciones de amistad con Ankara. Sin embargo, las YPG, la principal milicia kurdosiria, han demostrado en los últimos meses ser el arma más efectiva para combatir al ISIS en el norte de Siria, por lo que han recibido apoyo de EEUU.

El régimen avanza en Alepo

Mientras, las fuerzas gubernamentales sirias y sus aliados iraníes han logrado importantes avances territoriales en el suroeste de la ciudad de Alepo, que llevaba un mes en poder de los rebeldes. Los avances fueron precedidos por un intenso bombardeo. Entre las zonas retomadas por el Ejército y sus aliados están la Universidad del Armamento y la Universidad Técnica de la Fuerza Aérea, en la zona de Ramousah, según ha informado el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, una organización con sede en Londres pero con una amplia red de informantes dentro de Siria.

Los insurgentes habían tomado esta zona tras romper el asedio de las fuerzas gubernamentales a la parte este de la ciudad que controla la oposición, por lo que este avance gubernamental reinstaura de facto ese cerco. Un portavoz de los rebeldes había informado anteriormente de que las fuerzas gubernamentales habían entrado en la Universidad del Armamento, pero sostenía que la batalla aún estaba activa. Alepo, segunda ciudad del país antes del comienzo de la guerra, es el principal objetivo de las fuerzas gubernamentales, que cuentan con el apoyo de Irán, Rusia y de la milicia chií libanesa Hezbolá.

El 'Califato' ha quedado aislado por el norte. El Ejército Libre Sirio (ELS), las milicias opositoras apoyadas por Turquía en su operación en Siria, han arrebatado al Estado Islámico de los últimos enclaves que controlaban en la frontera con Turquía, entre las regiones de Azaz y Jarablus, según informa la agencia de noticias oficial turca, Anatolia, que cita fuentes del aparato militar turco. El ELS controla toda la franja fronteriza gracias al apoyo militar turco, que desde el 24 de agosto ha realizado incursiones con carros de combate para apoyar a las milicias rebeldes. Por ello, el grupo yihadista se ha quedado acorralado en el norte de Siria, sin salida hacia Turquía. La única vía hacia el exterior que le quedaría al ISIS sería la del paso entre las zonas de Abu Kamal, en Siria, y Al Qaim, en Irak.

Guerra en Siria Califato
El redactor recomienda