Los fundadores de la UE instan al Reino Unido a acelerar el proceso de salida

Tras el resultado en el referéndum sobre el Brexit, los seis países fundadores de la Unión Europea -Alemania, Francia, Bélgica, Holanda, Luxemburgo e Italia- han exigido al Reino Unido que ponga en marcha cuanto antes el proceso previsto para abandonar de forma ordenada el bloque. El Ministro de Exteriores alemán, Frank-Walter Steinmeier, ha dicho hoy que Londres debe activar "cuanto antes" el artículo 50 del Tratado de Lisboa, que es el que prevé el procedimiento para la salida de un país miembro. Los seis Ministros de Exteriores de estos países han realizado una comparecencia conjunta en Berlín para dar a conocer esta postura.

Estas palabras se suman al comunicado leído ayer por el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, que aseguraba lamentar la decisión británica pero respetarla, e instaba a Londres a iniciar el proceso de salida en el menor plazo posible. “Lo que esperamos ahora es que el gobierno británico haga efectiva la decisión del pueblo británico cuanto antes, a pesar de lo dolorosa que pueda ser”, decía el comunicado firmado, además de por Juncker, por los Presidentes del Consejo y el Parlamento europeos, Donald Tusk y Martin Schulz, y por Mark Rutte, que encabeza la presidencia semestral de la UE.

“No es un divorcio amistoso, pero, al fin y al cabo, tampoco era una gran relación amorosa”, reiteró Juncker anoche en una entrevista con la televisión alemana ARD. “No entiendo por qué el Gobierno británico necesita esperar hasta el mes de octubre para decidir si envía o no la carta de divorcio a Bruselas. Me gustaría tenerla inmediatamente”, insistió.

La canciller alemana Angela Merkel también se ha pronunciado en ese mismo sentido esta mañana, diciendo que el Reino Unido "no debería eternizarse" en el proceso, aunque ha hecho un llamamiento a la moderación: "No hay necesidad de ponerse desagradables" en la negociación entre Bruselas y Londres, ha dicho. Un comentario relevante dado que ahora mismo va en interés de la UE el hacer que el procedimiento de la salida británica sea lo menos placentero posible, para evitar un "efecto contagio" y desincentivar a otros socios europeos a seguir el mismo camino.

Por su parte, el Comisionado de Servicios Financieros del Reino Unido para la Unión Europea, Jonathan Hill, ha anunciado su dimisión, asegurando que "lo que está hecho no puede deshacerse". "No creo que sea correcto que siga siguiendo el comisionado británico como si nada hubiese pasado. Por lo tanto le he dicho [a Juncker] que renuncio. Al mismo tiempo, tiene que haber una transferencia ordenada del cargo, así que le he dicho que trabajaré con él para asegurar que así sea en las próximas semanas", ha dicho en un comunicado.