Castro 'castiga' a España: recibe a Margallo y Pastor un año después que a Francia

"Marca un antes y un después que tiene que ser aprovechado". Con estas palabras el ministro de Asuntos Exteriores y Cooperación, José Manuel García-Margallo, ha calificado la reunión que él y la ministra de Fomento, Ana Pastor, han matenido con el presidente de Cuba, Raúl Castro. El encuentro, que según el ministro ha servido para alcanzar "el punto más álgido" de las relaciones entre España y Cuba, llega más de un año después de que gran parte de la diplomacia occidental comenzara a acercar posiciones con este país.

De esta manera, España va al 'ralentí' después de que la isla ya haya recibido en los últimos meses varios países europeos como Reino Unido, Italia, Holanda y Austria y enviara miembros de la diplomacia cubana a Alemania o Luxemburgo a pesar de que nuestro país es el tercer socio comercial de Cuba y el primero de la UE. De hecho, la reunión con Castro no ha sido casual ya que llega casi dos semanas después de que el ministro de Economía, Luis de Guindos, firmara en Madrid el acuerdo para reestructurar la deuda de la isla, que asciende a 2.444 millones de euros, de los cuales fueron condonados el 80%: 1.955 millones.

Francia, Italia UK, Bélgica... ya visitaron la isla

El primero en 'abrir fuego' en la ronda de visitar a la isla fue el presidente de Francia, François Hollande, que tomó la delantera en el acercamiento europeo a la Cuba del deshielo con Estados Unidos. En su encuentro, el francés se reunió con el líder cubano Fidel Castro y su hermano Raúl en una visita histórica al país que tenía como uno de los principales objetivos adelantarse a sus socios europeos para aprovechar las oportunidades de negocio en la isla. De hecho, Francia es el tercer inversor europeo en Cuba pero mantiene todavía un modesto intercambio comercial con la isla alejada de los flujos que mantiene con otros socios europeos como España, Holanda o Italia.

Nueve meses después de que los hermanos Castro recibieran a Hollande, Raúl le devolvió la visita viajando por primera vez a un gran país europeo. El 31 de enero de este año fue la primera vez que Francia recibe a un presidente cubano en las últimas dos décadas.

A la visita de Hollande se sumó después la del primer ministro de Italia, Matteo Renzi, así como la de otros países europeos como Suiza, Bélgica, Holanda, Austria, Noruega y Portugal. También Reino Unido viajó a la isla, cuyo canciller Philip Hammond fue el primer jefe de la diplomacia británica que viajaba a ella desde 1959.

Dos horas y media de reunión

El encuentro entre España y Cuba, que ha tenido lugar en La Habana y ha durado dos horas y media, ha abordado, además de la condonación del 80% de los 2.444 millones de euros de deuda, cuestiones en materia de transporte, cuestión que le compete a Ana Pastor, que se ha reunido con el ministro de Transporte cubano, Adel Yzquierdo, para firmar el primer memorándum de entendimiento en materia de transportes en la historia de las relaciones entre ambos países.

La ministra en funciones compartió con su homólogo cubano la importancia de seguir invirtiendo en infraestructuras y eficiencia del transporte para atender la creciente y continua llegada de turistas a los diferentes destinos de Cuba, así como favorecer la movilidad de los propios cubanos.

"Nueva era" entre España y Cuba

"Recuerdo pocas visitas o pocas entrevistas a este nivel en que haya habido una cordialidad como la que ha habido ahora. Subrayando que es obvio que somos ministros, y que nos reciba un Jefe de Estado no es lo que el protocolo exige. Es más bien muestra de un gesto especial hacia España por parte de las autoridades cubanas", ha destacado el ministro de Exteriores.

"Las cosas han cambiado a una gran velocidad, esto abre unas oportunidades nuevas y (...) espero que haya una nueva era entre Cuba y España, porque la hay con Estados Unidos y la Unión Europea", ha dicho.

Preguntado si Raúl Castro ha planteado invitar al Rey de España a visitar Cuba, Margallo respondió: "Lo único que nos ha dicho el presidente Castro cuando nos ha enseñado el Palacio de la Revolución (lugar de la reunión) es en qué sitio se produciría el saludo cuando viniese el Rey o el presidente del Gobierno. Y a buen entendedor pocas palabras bastan".