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Fabio Gallo: el hombre que engañó a Torcuato Luca de Tena
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Fabio Gallo: el hombre que engañó a Torcuato Luca de Tena

Torcuato Luca de Tena soñó con ver a 'ABC' citado por los más prestigiosos diarios del mundo como el periódico que descubrió a Beria en España tras fugarse de la URSS. Pero la exclusiva le salió cara

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Torcuato Luca de Tena soñó con ver a ABC citado por los más prestigiosos diarios del mundo como el periódico que descubrió aLavrenti Beria en España tras fugarse de la URSS. Le costó caro haberse atrevido a afirmarlo sin pruebas: fue destituido el mismo día que lo publicó, 23 de septiembre de 1953.Y cabe concluir de su fulminante destituciónque el Gobierno quiso mostrarse serio.Temió que el planchazo de ABC fuese visto por los nuevos aliados estadounidensescomo un síntoma del carácter pintoresco, temerarioe irresponsable que los anglosajonessuelen atribuir a las élites españolas.La frase de Torcuato Luca de Tena,“lo que en otro país es un Pulitzer aquí es una destitución”, habla de ese pintoresquismo.Cuando publica susmemorias en1997 no se le ocurre pensar a Luca de Tenaque el prodigioso pasode Beria en Españatendría que haber sidoexpuesto a esas alturas por historiadores rusos, españoles o estadounidenses.

Llamaba la atención en esta historia elpersonaje tan huidizo de Fabio Gallo. Con muy poca esperanza de poder averiguar mucho sobre él, en 2013, en un blog quelleva por nombre de Los frescos de Marenco, aparecieronpistas biográficas de Fabio Gallo que traen recuerdos de personajes latinoamericanos delgrand monde de aquellosaños, los Porfirio Rubirosa o Ramfis Trujillo.Elautor de esta primera nota biográfica afirma que el joven Fabio se educó en internados de Europa,que era un vividory que presumía de tener una villa en las afueras de Roma, y como vecinos y amigos a Sofía Loren y Carlo Ponti,a los que invitó a Nicaragua parapasearporSan Marcosen Cadillac y Maseratti.Y si Claudio Magris nos sugiere que el Danubio podría nacer de un grifo mal cerrado, el autor de esta web sugiere que el caudalosoasunto de Beria en España bien pudo haber salido de una botella de vino.

Escribe el autor del blog: “La vida de Fabio Gallo no fue ajena a interesantes aventuras que afortunadamente no terminaron en algo trágico. Sin deberla ni temerla, estando en España se vioinvolucrado en un caso que cimbró a las principales agencias de espionaje, en especial a la CIA. (…)De casualidad, Fabio se encontró en Madrid con un diplomáticonicaragüense que había estado en Moscú y que después de algunos tragos le confió que Beria había logrado escapar con vida de la URSS y que él lo había visto en España.Semanas más tarde, estando Fabio en Valencia en un exclusivo restaurante en compañía de algunos amigos, les comentó que le parecía haber visto a Beria en una calle de esa ciudad. La noticia fue captada por los servicios de inteligencia estadounidenses,quedesplegaron un operativo descomunalque al fin resultó un fiasco. Desde ese momento, Fabio decidió no volver a regresar a los Estados Unidos por si las moscas”.

El autor del relato complementa su esbozo biográfico de Gallo con otras aventuras no menos increíbles relacionadas con los años eternos de los Somoza en el poder en Nicaragua,señalando que simpatizó más con la insurgencia sandinista que con el somocismo. Se afirma en el blog que Fabio participó en el suministro de armas, como representante de la fábrica Beretta,de cuyos propietarios era amigo cercano,pasando armas a oficiales desertores de la Guardia Nacional somocista.Y que cuando fue descubierto por el somocismo y pareció que ahí iba a terminar su vida,la cosa da un giro de 180 grados.

Escribe el autor del blog:“De Nicaragua se dio una comunicación a un número privado en El Vaticano; horas más tarde, de otra oficina de la Santa Sede se realizó una llamada a la residencia del Cardenal Spellman, arzobispo de Nueva York,quien a su vez llamó a Guillermo Sevilla Sacasa, embajador de Nicaragua en los EEUUy este llamó inmediatamente a la Casa Presidencial en Managua.Nadie sabe a ciencia cierta el contenido real de estas llamadas;sin embargo, Fabio Gallo salió completamente ileso de todo el asunto”. En plena insurrección, entre 1978 y 1979, remata el blog,ayudará a un mando guerrillero del Frente Sandinista de Liberación Nacional a huir de una encerrona metiéndolo en el portamaletas de suCadillac, que en ningún control se atrevieron a registrar.

Concluye el bloguero su retrato diciendo que tras años de vida de playboy, en la madurez,Fabio Gallo se casó. Que falleció en los años 90 en Nicaragua de infarto y “no como cabría esperar”, dice el autor, "con una muerte de esas que salen de la mente de Ian Fleming(…) en medio de fuego cruzado en un enfrentamiento entre espías, en un naufragio en un yate en el mar Tirreno, o bien por la ponzoña de un áspid en Egipto”.

Un familiar malagueño de Fabio Gallo

Pero en el blog aparece un relator que recuerda a Fabio Gallo cuando sucedían los hechos narrados. Se llama Eladio Ferrer Romero y es Jefe jubilado de Promoción Turística del Ayuntamiento de Málaga. El es único testigo fiable de la personalidad del joven Gallo .Comienza Ferrer por señalar que es familia del personaje por vía materna: la madre de Fabio, María Garrido Lucuix, era malagueña de Manilva. Vivió directamente el episodio Beria de 1953, aunque era entonces muy niño, y también por los recuerdos familiares. Además vivirá entre 1971 y 1972, a los 25 años de edad, nueve meses “enclaustrado en aquella casa blanca de los Gallo en San Marcos en Nicaragua”.

“Fabio- escribe Eladio Ferrer- no tenía título académico ninguno. Contaba que había estudiado, esto es un decir, con Nixon. Y se volvió, pues tengo entendido que lo largaron de allí(Fabio decía a Blanco y Negro que coincidió en la universidad con Patric Hilings, amigo de Nixon. Hilings se habría licenciado en Derecho en 1943, en la Universidad de Sur de California)". Continuaba Ferrer: “Efectivamente fue un playboy. Predominan en mi familia los rubios de ojos claros y de gran estatura. Era muy atractivo con 25 o 30 años, cuando estuvo en Málaga con dinero, apabullando a la aristocracia local. No eran aristócratas, claro, porque en Málaga poca aristocracia había. Eran abogados o farmacéuticos, gente conocida de Málaga… y con su dinero los apabullaba. Cerraba salas de fiesta en el hotel Miramar-Málaga corriendo con todos los gastos. Almuerzos en el Hotel Alhamar de Marbella, Cadillac arriba Cadillac abajo, un maravilloso carro de color verde pistacho con la capota descapotable en negro".

"Tuvo varios flirts en Málaga, uno con una chica de la buena sociedad malagueña, pero prescindiremos de su nombe. Mi familia -vivía mi padre- era conocida en Málaga y muy respetada. Al conocerse su relación con Beria, Fabio estuvo confinado en nuestra casa durante un tiempo y cuatro policías custodiándolo día y noche. ¡Pobres padres míos! ¡Cuánto pasaron por culpa del fantoche Gallo! Un comisario lo confinó en nuestra casa de Pedro Molina 3, 2º piso. Lo trasladó a este domicilio desde el hotel Miramar. Tener la casa día y noche con cuatro policías secretas en plena dictadura franquista no fue agradable. Todo gracias al ansia de notoriedad de Fabio Gallo. Mi padre lo largó y se fue a vivir a casa de un hermano de María Garrido, la malagueña madre de Fabio Gallo, Alejando Garrido Lucuix, terrateniente que vivía en la calle céntrica de Sebastián Subirón”.

Eladio Ferrer seguía: “El dinero lo había hecho su madre, la malagueña de Manilva, como prestamista. Solía recordar que, cuando se casó con Fabio Gallo padre, no tenían ni camas. Dormían en hamacas. Y que fue ese dinero ganado por ella el que les permitió después comprar grandes fincas. Tenían catorce fincas y hasta una isla situada en uno de los lagos de Nicaragua. La madre de Fabio, María Garrido Lucuix, era una mujer de casi dos metros de estatura que era quien tenía la última palabra en todo, porque en realidad todo era suyo incluídos los coches, entre ellos dos Cadillac, uno blanco y un negro, además del Maserati. Si ABC dice que Fabio se movía en 1953 en un Mercedes lo que yo recuerdo era un Cadillac verde pistacho con capota negra;a mis 7 años me llevó hasta el hotel Miramar en él. Recuerdo que, cuando lo de Beria, Fabio dijo a mi padre que si en un tiempo prudencial no sabían nada de él,que fueran a Madrid a la embajada de Nicaragua a pedir información. Mi padre, quizá por no significarse, envió a mi hermana que tenía veintidós años y nunca había salido de Málaga. En la embajada le dijeron que no había que preocuparse, que estaba bien”.

“Cuando viví con ellos en Nicaragua lo hice en su casa, ahora convertida en hotel", sigue Ferrer, "que cualquiera puede ver pinchando en internet Hotel Boutique San Pedro en San Marcos de Nicaragua. Lo pasé mal por el mal carácter que tenía ambos. Me hartaron y me fui a Madrid a estudiar Turismo”.

Al preguntar a Eladio cómo pudo darse verosimilitud de la peripecia de Fabio con Beria, responde: “Había cosas muy sorprendentes en la vida de Fabio. Fabio decía que había sido el único nicaragüense invitado en 1973 a la ceremonia de coronación del Sha de Persia en Persépolis en 1973, cuando montaron aquellas tiendas de lujo con aire acondicionado para alojar a los invitados en medio del desierto. Podías dudarlo, pero tenía expuesta en la gran casa donde vivían una especie de museíllo de objetos y allí estaba la vajilla de bordes dorados que el Sha había regalado a todos sus invitados como recuerdo de aquellos días. También decía que había asistido a la ceremonia de matrimonio de Rainiero con Grace Kelly en Mónaco y que era padrino de un hijo de la hija de Mussolini".

Días sin huella

Sólo los escasísimos materiales procedentes de la Comisaría Provincial de San Sebastián y del Puesto Fronterizo de Canfranc , documentan que la policía española estaba sobre la pista de Gallo, al que se le prohibió salir de España, y al que se le levantó después la prohibición para volvérsele después a aplicar. No hay documentos sobre este asunto en el Archivo Histórico Nacional. Seguro que sí la CIA, pero dejamos solicitarlos para otra ocasión.

¿Hubo, años atrás, orden de destrucción del contenido del expediente Fabio Gallo de la Dirección General de Seguridad? No parece posible que un caso que pasa por las manos del Jefe de Estado Mayor del Ejército, del Director General de Seguridad y del jefe de la Brigada Político Social no haya dejado un grueso expediente. Apellidos ilustres, capaces de ser escuchados en El Pardo, o después en la Moncloa o la Zarzuela, aparecen ligados a este episodio que costó el puesto al director de ABC. Quizá pidieron, y consiguieron, ser desvinculados de este esperpento que habría quedado reflejado, cabe imaginar, en el expediente policial, y lo que se hizo fue destruir la totalidad del material.

Sobre el primer encuentro de Torcuato Luca de Tena con Fabio Gallo, Alfredo Semprún, en Blanco y Negro, en 1979, corrige a Gallo y Luca de Tena, y señala que Luca de Tena habría visto por vez primera a Gallo en la finca Guadalmina de la familia Goizueta, anfitriones de expresidentes de gobierno y de cabezas coronadas. Escribe Semprún: “La caballerosidad de don Fabio Gallo le ha llevado, sin duda, a omitir o disfrazar varios detalles en el relato de su aventura. Por ejemplo dice haber llamado a Norteamérica desde el desaparecido hotel Miramar, de Málaga, donde se hospedaba. Y eso no es cierto. La primera llamada para anunciar su próximo contacto con Beria se le hizo desde Washington como consecuencia de un telegrama recibido por Mr. Hilings y firmado por Gonzalo Goizueta en el que pedían al senador que llamara al número 15 de Marbella. La llamada efectuada tras la entrevista con Beria, se llevó a cabo desde la finca Guadalmina propiedad de los señores de Goizueta, amigos del millonario nicaragüense. Fue en esa finca donde don Torcuato Luca de Tena y su esposa tuvieron la primera noticia del asunto”.

Texto: Germán Sánchez,redactor de Radio Exterior de España.

Fotos: Eladio Ferrer.

Torcuato Luca de Tena soñó con ver a ABC citado por los más prestigiosos diarios del mundo como el periódico que descubrió aLavrenti Beria en España tras fugarse de la URSS. Le costó caro haberse atrevido a afirmarlo sin pruebas: fue destituido el mismo día que lo publicó, 23 de septiembre de 1953.Y cabe concluir de su fulminante destituciónque el Gobierno quiso mostrarse serio.Temió que el planchazo de ABC fuese visto por los nuevos aliados estadounidensescomo un síntoma del carácter pintoresco, temerarioe irresponsable que los anglosajonessuelen atribuir a las élites españolas.La frase de Torcuato Luca de Tena,“lo que en otro país es un Pulitzer aquí es una destitución”, habla de ese pintoresquismo.Cuando publica susmemorias en1997 no se le ocurre pensar a Luca de Tenaque el prodigioso pasode Beria en Españatendría que haber sidoexpuesto a esas alturas por historiadores rusos, españoles o estadounidenses.

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