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“Este bebé será de la Asociación del Rifle”
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EL 'LOBBY' DE LAS ARMAS SE MOVILIZA CONTRA OBAMA

“Este bebé será de la Asociación del Rifle”

“Futuro miembro de la Asociación del Rifle”. Es el lema que lleva impreso el babero para bebés que se vende en la tienda del Museo Nacional

Foto: “Este bebé será de la Asociación del Rifle”
“Este bebé será de la Asociación del Rifle”

“Futuro miembro de la Asociación del Rifle”. Es el lema que lleva impreso el babero para bebés que se vende en la tienda del Museo Nacional de las Armas de Fuego de Virginia. Por unos diez euros, cualquier niño americano puede derramar su papilla sobre el logotipo de la Asociación Nacional del Rifle (NRA), una entidad que está metida de lleno en la campaña presidencial norteamericana.

“Es ahora o nunca. Victoria o derrota. El tiempo de las palabras ha terminado”, alerta el vicepresidente de la Asociación del Rifle, Wayne LaPierre, en una carta que ha dirigido a sus cuatro millones de miembros ante las próximas elecciones. “Barack Obama y sus aduladores de los medios de comunicación jamás lo admitirán, pero Obama ha dedicado toda su vida política (unos 16 años) a proponer o promover o respaldar en secreto las más radicales políticas contrarias a la libertad de llevar armas que puedas imaginar”.

Por eso, desde la citada entidad piden a sus asociados que sean activos en la campaña para evitar que gane Obama. A juicio de Wayne LaPierre, “desde el nacimiento de nuestra nación, la Libertad siempre ha dependido de los propietarios de armas como tú y yo para defenderla con nuestras voces, nuestros votos, nuestras fortunas o nuestro sacro honor. La Libertad sólo prevalece cuando los propietarios de armas van todos a una”.

¿Qué es lo que teme el ‘lobby’ de las armas? Sobre todo que el presidente pueda seguir nombrando jueces del Tribunal Supremo contrarios a la libertad absoluta de portar armas de fuego en muchos estados de los EEUU. Y es que la Segunda Enmienda a la Constitución establece el derecho a ‘guardar y portar armas de fuego’, pero es evidente que no significa barra libre para tener un tanque en casa o un lanzagranadas. La realidad es que hoy día se pueden comprar fusiles de asalto, sin presentar ningún tipo de certificado, en 35 estados de la Unión, según datos de organizaciones pacifistas.

El cuarto del niño, decorado con rifles y revólveres

Si fuera por la Asociación del Rifle no cabría ningún tipo de restricción. El mundo ideal lo retratan en una de las habitaciones del Museo de las Armas de Fuego, en Virginia. Allí se recrea, tal y como se puede ver en las fotos que acompañan este reportaje, una habitación clásica del niño medio americano, con una estantería en la que cuelgan varios fusiles de juguete y una cama sobre la que reposan revólveres y cómics de hazañas bélicas. Todo en un entorno de colores pastel y con estanterías de madera.

Frente a esa sala del museo está otra dedicada al cine y las armas de fuego. Junto a carteles de películas de Clint Eastwood o John Wayne, se presentan los rifles o revólveres utilizados en esas producciones. El negocio del cine ha sabido reflejar esa cultura del pistolero que se toma la justicia por su mano para ayudar a los débiles. Y en pocas ocasiones se ha puesto el foco en las víctimas de los desalmados que han ejecutado a otros sin piedad.

“30.000 muertes al año es un precio demasiado alto”

Desde la Coalición Para Frenar la Violencia de las Armas se asegura que “las 30.000 muertes relacionadas con armas de fuego que se producen al año en EEUU es un precio demasiado alto para la ‘libertad’ que reclama la Asociación del Rifle”. El individualismo a ultranza del pistolero, insisten los anti-violencia, “degrada los valores y las instituciones democráticas que protegen las libertades que tenemos todos los americanos”. En su opinión, los “lobbies extremistas de las armas están dispuestos a pisotear cualquier libertad que se interponga en su camino hacia un acceso absolutamente libre a las armas”.

Desde la Asociación del Rifle tienen claro cuál es uno de los obstáculos que deben superar: Barack Obama. “Es el presidente más contrario a las armas que ha ocupado nunca la Casa Blanca”, sentencia Wayne LaPierre.

En las estanterías del Museo de las Armas se exhiben las pistolas de quienes precedieron al actual presidente en el despacho oval, con especial recuerdo para Theodore Roosevelt, un gran amante de las armas de fuego. Obama aún no tiene espacio reservado, pese a que puede dar el tiro de gracia a la épica del Salvaje Oeste.

“Futuro miembro de la Asociación del Rifle”. Es el lema que lleva impreso el babero para bebés que se vende en la tienda del Museo Nacional de las Armas de Fuego de Virginia. Por unos diez euros, cualquier niño americano puede derramar su papilla sobre el logotipo de la Asociación Nacional del Rifle (NRA), una entidad que está metida de lleno en la campaña presidencial norteamericana.